Taehyung se muda para comenzar de nuevo junto a sus hijos, pero el comienzo se ve afectado cuando estos incendian por accidente la casa del vecino, quien es un alfa gruñón y odia a los niños. El alfa termina viviendo junto a los niños y su padre ome...
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—Que sepa tu nombre no significa que te conozca.
Daebin bostezo mientras se aferraba a las cuerdas de su mochila. Liam lo seguía de cerca mientras podía, nervioso por el actuar del otro alfa, su personalidad era amable pero desinteresada. Se notaba para el alfa puro que este no queria tener nada que ver con el.
También entendía eso. Después de todo Liam estaba acostumbrado a las falsas personas que se preocupaban por el, mientras que a sus espaldas solo murmuraban acerca de tomar el control de la manada.
—No dije que me conocieras. —Murmuro Daebin estirando el cuello para ver si encontraba a sus hermanos en el estacionamiento de la escuela.
Liam le imito sin saber que hacia.
El trabajo de matemáticas era un dolor de culo, mas porque este valía la mitad del promedio anual de la materia y no era fácil tampoco, la profesora era estricta y filosa. El día estaba levemente oscurecido, las nubes tapaban el sol de la tarde avisando que una tormenta se avecinaba por la zona.
—¿Porque parece que mi presencia te molesta? —Hablo el alfa puro cando el pelinegro se detuvo en frente de una camioneta gris.
El alfa bufo porque no veia a sus hermanos y después de todo debía esperarlos. Miro a su compañero de clase y suspiro porque habia sido el quien le habia propuesto a Liam ir a su casa a por el dichoso trabajo.
—Porque es eso. —Explico volteando a ver al de ojos verdes por primera vez desde que se habia levantado de su escritorio para salir de la clase. —No me agradan las personas como tu.
Liam levanto una ceja por lo dicho. Daebin era directo y muy claro con las respuestas, lo que indicaba que era una persona de pensamientos duros y simples, su mundo tal vez se resumía en blanco y negro, bien o mal.
En cambio Liam era alguien que veia la extensa variedad de colores grises. Esto se debía totalmente en que toda su vida se habia visto justo en medio de esos dos colores tan distintos, en el lado intermedio de la maldad y bondad.
—¿Personas como yo? —Cuestiono soltando las correas de su mochila para cruzarse de brazos.
Daebin observo como sus brazos se tensaban en su pecho mientras la tela de su chaqueta negra parecía querer romperse. Liam le hacia acordar a su padre, tal vez por la asemejase de sus rangos, o un sentimiento diferente. Tena un rostro limpio y perfecto, ojos grandes y brillosos, un cuerpo ejercitado pero con las fachas de no haber pisado en su vida un gimnasio, tal vez eso venia con el gen de alfa puro.
—Vi como molestaban a ese chico de la clase de mi hermano. —Soltó el pelinegro importándole poco su reacción, tampoco esperaba que se defendiera.
