Taehyung se muda para comenzar de nuevo junto a sus hijos, pero el comienzo se ve afectado cuando estos incendian por accidente la casa del vecino, quien es un alfa gruñón y odia a los niños. El alfa termina viviendo junto a los niños y su padre ome...
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Cuando Jungkook era niño su madre lo habia sentado en la mesa del comedor con el ceño fruncido y ese rostro afligido por su hijo. Hyesun trataba de ser la mejor madre posible para el, aun si no entendía del todo los cambios que sufría un alfa puro como su hijo y a la vez el pequeño alfa no entendía porque la mujer se afligía cada vez que sucedía algo con él.
Esa misma tarde Jungkook habia golpeado a dos de sus compañeros en estado de enojo luego de que le dijeran que su madre era una zorra que no podía atender a un alfa, y que por eso su padre los habia abandonado.
Reacciono como cualquier niño de su edad hubiera hecho, la diferencia es que Jungkook era tres veces mas fuerte que un niño común y corriente.
El azabache nunca habia entendido correctamente porque su madre le prohibía destacar en los deportes o le pedía amablemente que no resaltara en nada, que fuera un niño normal. No entendía porque, el realmente podía lograr mucho, era bueno en todo. Si tan solo les hubiera demostrado antes lo bueno que rea, tal vez así tendría muchos amigos, y nadie le molestaría en la escuela.
Pero las cosas no eran así.
"No puedes resaltar porque es peligroso para ti."
Esa era la misma explicación de siempre, pero aquella vez habían hablado de la capacidad de su madre para retener un alfa. Tenia diez años, aun no entendía que era esa obsesión con que los omegas debían ser suficientes para un alfa, no lo entendía porque su madre era suficiente para hacerlo todo, y no recordaba nada de su padre como para decir algo como eso.
No sabia si sus compañeros tenían razón o si simplemente lo molestaban. Después de todo su madre nunca quería explicárselo.
Ni siquiera sabia que era tener un padre alfa.
¿De que se burlaban todos?
Ahora entendía a su madre cuando esta ocultaba la información, porque Jungkook era un niño, y a los niños no puedes decirles toda la verdad... Si su madre le hubiera dicho lo que sucedió antes de llegar a la ciudad, tal vez el no hubiera sido el mismo.
La puerta de la habitación de la pareja se abrió suavemente en n intento de no hacer demasiado ruido, ya que el omega se encontraba completamente dormido luego de lo que suponían un ataque de pánico... O una mala jugada de su cabeza.
—¡¿Que le hiciste?! —Jinwoo le grito a el alfa quien salia al fin de la habitación principal.
El alfa mayor relamió sus labios mientras contenía las ganas inmensas de llorar que tenia, sus ojos hinchados de tanto escucharle decir a su omega que le amaba, y que no quería que le abandonara. Aferrado a su cuerpo como a un oso.
¿Qué le sucedía? Como si Jungkook supiera... ¿Que le habia hecho? Bueno, tampoco sabia sobre eso, ¿Si quiera estaba seguro de haberle hecho algo?
Miro al adolescente apretando los labios porque se veía alterado, como si todos sus instintos fueran en contra de Jungkook, como si el fuera el culpable de todo. Tal vez lo era y el aun no sabia porque o como.
