𝐈𝐧𝐞𝐯𝐢𝐭𝐚𝐛𝐥𝐞 𝐃𝐞𝐬𝐭𝐢𝐧𝐨 ☆(Duff McKagan)☆

☆Capítulo 32☆

Cara Rota

Me despierto con la cara de Duff enterrada en mi pecho.
La noche anterior lo habíamos hecho y nos habías dormido desnudos, solo con las sábanas de la cama sobre nosotros.
Duff había tomado la costumbre de enterrar su cara en mi pecho y abrazarme, parecía un niño que se acurruca en los brazos de la madre.

La convivencia en el nuevo departamento era...extraña.
Aún no me acostumbraba a quedarme sola cuando Duff tenia que irse a ensayar. Pero siempre encontraba cosas que hacer, o al menos casi siempre (como por ejemplo ensayar con mi banda).
De repente el teléfono de al lado de la cama sonó, haciéndo que me sobresaltara.
Me giré y contesté.

—¿Hola?

—Hola preciosa, ¿cómo amaneciste?—Era slash.

—Slash, que sorpresa ¿qué se te ofrece?

—Dime, ¿la rubia ya está despierta o tendré que ir a despertarla con un beso?

—Tú ve a besar a la pelirroja histérica y yo me encargo de esta princesa de aquí ¿si?

—Oye, ya no es gracioso—carcajeé—hablando encerio ¿Duff esta despierto?

—Algo así, si quieres puedo despertarlo.

—Mm, no, olvidado. Solo dile que esta noche festejaremos el cumpleaños de la novia de Steven en el bar Rainbow a las 20:00 hs.

—Esta bien, se lo diré.

—Y dile que no se masturbe tanto o se le caerá el pito.

Mi respuesta fue solo una risa, me despedí y corté.
Cuando me acomodé otra vez en la cama Duff ya había despertado.

—Mmm ¿Quién mierda era?—preguntó aún con los ojos cerrados y con la notable molestia de que lo hayan despertado.

—Slash.

—¿Y qué quería?

Le transmití toda la información al rubio, quien terminó insultando al moreno por esto de que se le caerá el pene si se masturba mucho.
Un rato más tarde me levanté de la cama, me cambié, desayunamos con Duff, luego me puse a hacer todos los quehaceres de la casa.
Esta vez, el rubio me ayudó en todo, ya que hoy no tenían ensayo (cabe aclarar que lo único que hizo bien fue barrer).

Tuve que enseñarle como se hacían las cosas, como se limpia el baño, como se lava la ropa, la forma correcta de repasar las cosas, etc.
En eso me vino una imagen a la cabeza, una de Duff y Susan. Su esposa en el año 2022.
Al menos...cuando se case con ella me quedaré con la tranquilidad de que sabrá ayudarla en la casa.

Después de limpiar todo, hasta los instrumentos, cocinamos.
Después de cocinar, descansamos.
Y para cuando ya habíamos descansado, ya casi era la hora de ir al bar.

Duff insistió en elegirme el atuendo para esta ocasión, lo que yo llamaria en mi época "ouftfit".
La verdad, la ropa que eligió no estaba nada mal.
Era un top blanco, unos pantalones engomados con tachas y cadenas, las botas estilo militares y una chaqueta de cuero negra con tachas.
La verdadera novia de un rockero.

El atuendo de Duff me dejó babeando, como hacia el simple hecho de que me mirara.
Para todo esto ya casi era la hora acordada, entonces salimos en marcha en el auto del rubio.
Llegamos al bar, cuando entramos ya estaban todos los chicos sentados en una mesa, las chicas también estaban ahí.

Wow, estaba conociendo el bar Rainbow, el favorito de muchísimas bandas de Rock. Que momento más histórico para mi.
Saludamos a Adriana por su cumpleaños y tomamos asiento en la mesa.
Al cabo de unas cuantas horas ahí, decidí ir a la barra para pedir más bebida.
Mientras esperaba a que me dieran la botella, un tipo alto, de pelo negro y piel tostada se me poso al lado.