Al día siguiente trasladaron a Katie Bell al Hospital San Mungo de Enfermedades y Heridas Mágicas. A esas alturas la noticia de que le habían echado una maldición se había extendido por todo el colegio, aunque los detalles eran confusos y parecía que nadie, excepto Lily, Hermione, Theodore y Leanne, se había enterado de que Katie no era la destinataria del ataque.
Lily no sabía si Dumbledore regresaría a tiempo para la clase particular del lunes por la noche, pero, puesto que nadie le había dicho lo contrario, se presentó en el despacho del director a las ocho en punto. Llamó a la puerta y Dumbledore lo hizo pasar. Estaba sentado, parecía muy cansado y su mano estaba más negra y chamuscada que antes.
—Has estado muy ocupada durante mi ausencia.—dijo Dumbledore—Tengo entendido que presenciaste el accidente de Katie.
—¿Cómo esta ella?
—Todavía no se siente bien, aunque podríamos decir que tuvo suerte. El collar apenas le rozó la piel a través de un diminuto roto que tenía uno de sus guantes. Si se lo hubiera puesto o lo hubiese tomado con la mano desnuda, quizá habría muerto al instante. Por fortuna, el profesor Snape consiguió impedir una rápida extensión de la maldición.
—Ya veo.—asintió Lily.—¿Y donde has estado estos días?
—Te lo diré luego.—sonrió Dumbledore y señaló el pensadero.— Ahora, ¿Porqué no seguimos donde nos quedamos?
Así, volvieron a adentrarse juntos en el pensadero. Esta vez vieron sobre como después de que Tom Ryddle había abandonado a su esposa, Mérope, esta se quedó sola en Londres, embarazada de quién un día sería Lord Voldemort.
Se podía afirmar que estaba en Londres, puesto que Caractacus Burke, uno de los fundadores de Borgin y Burke, recibió en su tienda un día a Mérope, quién ya estaba pronta a dar a luz y necesitaba urgentemente dinero, por lo que ofreció el guardapelo de Slytherin. Caractacus, al ver que ella no sabía lo valioso del guardapelo, solo le dio diez galeones y ella se fue feliz de la vida por ello.
—Esta vez entraremos en mi memoria.—dijo Dumbledore en cuanto salieron de ese recuerdo.— Creo que la encontrarás rica en detalles y satisfactoriamente exacta.
—Que humilde—bromeó Lily y ambos ingresaron al pensadero.
Ese recuerdo, sin embargo, hizo que Lily no quisiera bromear nunca más. El recuerdo era de el primer encuentro entre Dumbledore y Voldemort, cuando este primero fue al Orfanato Wool para entregar su carta personalmente a Tom Ryddle, quién era un niño que atemorizaba a todos en el orfanato.
La señora Cole, la encargada del orfanato, explicó que Tom nació en Noche vieja, nevaba y hacía un frío tremendo. Su madre había subido los escalones tambaleándose y ellos la habíana cogido, tuvo al bebé al cabo de una hora de haber llegado, y falleció al cabo de otra hora. Al parecer lo último que Mérope dijo, fue que esperaba que su hijo se pareciera a su padre. Añadió también que quería que se llamara Tom, como su padre; Sorvolo, como el padre de ella; y que su apellido era Ryddle.
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Potter Girl [Draco Malfoy]
Hayran KurguSinopsis en la historia. Portada realizada por @bugharthheda de la @Editorial_Silver #1 en femharry 27/Agosto/2022