Camavinga
—Pasa querida—dice haciéndose a un lado—te presento a Eduardo Camavinga y a su hermano Sebastián y bueno a Florentino ya le conoces.
Nos da la mano uno por uno con firmeza, ella también ha parecido reconocerme, a pesar de mi pequeño disfraz.
—Buenos días , es un placer conocerles—dice estrechando mi mano y la de mi hermano.
Luis le indica que se siente en la silla en la que el se encontraba y eso hace, él resto también nos sentamos salvo él que queda de pie.
— Alguien va a decirme ya que hago aquí, estoy impaciente—dice sonriente, me quedo embobado mirándola, no sé bien por que, es decir, es una chica muy guapa, pero tiene algo más que llama mi atención, noto como Florentino me observa así que dejo de mirarla centrando mi atención en Luis.
—Tengo tu regalo de cumpleaños—comienza a hablar el abogado, para nada me esperaba esa respuesta, parece un chiste, incluso ella parece tomárselo asi porque tuerce el gesto de forma divertida, Florentino acaba riéndose, y esta le mira sonriendo de nuevo, Flo solo se comporta asi cuando esta con alguien de máxima confianza, asi que deben de haber tenido una relación previa bastante estrecha.
Luis deposita delante suya una carpeta y ella lo abre.
—Ui si un caso de agresión entre dos futbolistas, era justo lo que quería—dice con sarcasmo mirando las páginas, y yo no puedo evitar soltar una carcajada, fija su mirada en mi, y yo no pueda evitar sonrojarme, es bastante intimidante, parece tener una personalidad muy marcada y bastante carácter, eso acentúa mucho más su atractivo, si tengo que pasar el resto de la mañana con ella va a ser cuanto menos interesante.
—Mira quien es el abogado contrario—le dice Luis con una sonrisa de oreja a oreja, hace lo que dice y su cara cambia totalmente pasando de la indiferencia al interés, levanta su mirada y la dirige a Luis ambos se sonríen y parecen entenderse a penas sin hablar.
—¿Lo quieres?—pregunta Luis
—¿Cuando empezamos?—responde ella y yo no entiendo nada, pero a diferencia de mi hermano me encantan los enigmas y siento que ella lo es.
— Ahora mismo, id a la sala de juntas— Ash y él me miran me he quedado un poco cortado con la situación así que Sebastián se levanta para que le siga.
— Con que se quede él está bien, no nos llevará mucho rato— le dice a mi hermano mientras salimos del despacho, Florentino y Luis se quedan hablando, aunque en ese momento no le di importancia.
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Tras una pequeña discusión con Sebastián consigo quedarme solo con ella, lo agradezco ya que no quiero que me vea como un niño que necesita la protección de su hermano.
Ashley
Me ha sorprendido gratamente ver el nombre de mi antiguo despacho en el documento, por eso Luis sabía que me gustaría aquello, voy a enfrentarme a Harvey Pearson mi antiguo compañero, y ya os digo que será un conflicto interesante, o eso pensé cuando acepte el caso, lo que no sabía es que la historia interesante acabaría siendo la mía y no la que leí sobre el papel.
A pesar de ello si el no hubiese sido la otra parte hubiera cogido el caso igualmente, ya que aquel chico de pelo largo llamaba mucho mi atención.
—Bien comencemos—digo sentándome con el en la sala de juntas, el se sienta al otro lado de la mesa, parece nervioso – por tu cara puedo intuir que nunca has estado en una situación similar—este asiente nervioso, debo decir que nunca he teniedo relación con futbolistas mas haya de la redacción de contratos, pero me lo esperaba mas suelto y desenfadado.
—Vale, no te preocupes, es simple solo tienes que contarme punto por punto lo que paso aquel día, adoptaremos una conducta pasiva hasta que veamos que tiene la otra parte y una vez nos reunamos con el resto seleccionaré los testimonios que considere necesarios— le explico para que más o menos sepa que va a pasar. — eso si no llegamos a un acuerdo previo que sería lo más recomendable para ambos, porque ya sabemos lo que dicen mejor un mal acuerdo que un buen juicio— digo la frase que tantas veces he escuchado.
—¿Todo eso lo acabas de decidir en el camino por el pasillo?—me dice sorprendido, yo le miro extrañada.
—Querido he resulto gran cantidad de casos peores que este, Luis no me lo ha dado a mi por casualidad, se perfectamente lo que hago – le respondo algo mas cortante de lo que debería, cuando eres mujer estas acostumbrada a que duden contantemente de ti sobre todo en un sector donde lo normal es ver a hombres, pero intuyo que su intención no era mala, asi que continuo hablando – y si respondiendo a tu pregunta lo he pensado de camino aquí—le digo sonriéndole, el también suelta una pequeña sonrisa.
Pasamos 20 minutos en los que me narra lo sucedido en la noche de los hechos, el caso es bastante simple, y no llevará mas de una semana, la reunión con Harvey es la semana que viene.
— Bien pues ya hemos terminado—le digo terminando de realizar ciertas notas en la hoja que me dio Luis – Te acompaño a la salidad—este se levanta.
—Ha sido rápido—dice parándose delante mía, en verdad no tiene ni idea de que lo he alargado lo máximo posible, no quería que se fuese su forma de ser y de expresarse han llamado bastante mi atención, no se cuando volvere a verle, su participación muy a mi pesar no va a seguir siendo necesaria, finalmente he tenido que terminar la declaración porque mi compañero necesitaba la sala.
— Sí, muy rápido—le respondo mirándole, me he fijado que no ha dejado de sonreir ni un segundo desde que le conocí esta mañana, debe ser un chico muy risueño.
—Oye quería preguntarte si...—deja la frase a medio por que una voz nos interrumpe.
—Ashley—oigo decir y me encantaría haber escuchado esa voz en cualquier otro contexto salvo en este, justo cuando un chico guapísimo estaba a punto de preguntarme algo.
—Harvey—digo girándome hacia la voz y dejando a Camavinga con la palabra en la boca, Harvey anda hacia a mi y me rodea con sus brazos, bajo la atenta mirada de Camavinga que se ha quedado bastante fuera de juego.
—Eduardo te presento al abogado contrario en el caso – le indico cuando acaba el abrazo.
—Este es el testigo entiendo.
—Entiendes bien—respondo sin apartar la mirada del futbolista—Harvey y yo tenemos la misma edad, somos muy amigos, y estuvimos trabajando mucho juntos, ademas fuimos juntos a clase durante los primeros años de carrera, es por eso que Luis a hecho la broma de mi cumpleaños – le explico a este mientras Harvey esta entre los dos.
—Es cierto su cumpleaños es el viernes—dice Harvey levantando las cejas, Edu me sonríe.
— Espero poder felicitarte— se me encoge el estómago ante ese comentario, no lo esperaba después de su actitud algo tímida durante la mañana.
Tras unos minutos más de conversación Eduardo termina yéndose sin acabar la pregunta que quería hacerme. Yo me despido más decepcioanda de lo debido, cosa que Harvey parece notar por que no tarda más de dos segundos desde que la puerta del ascensor se cierra para hablar.
—Te gusta ese chico—me dice, y yo me rio exageradamente, como va a gustarme si le conozco de hace 20 min y ni si quiera se si volvere a verle. Pero cuando el destino quiere algo, hace que pase, y eso era justo lo que iba a pasarnos a nosotros.
Aunque en esta ocasión el destino tendría una pequeña ayuda.
Unos minutos después de que Edu y Ash saliesen del despacho:
— ¿De verdad crees que es buena idea? — le pregunta Luis a Florentino.
— Ese chico es muy buen futbolista, pero le falta asentar la cabeza, salirse del camino es muy fácil en un mundo como este, y Ash es perfecta para esto— le contesta él — ¿has visto como la miraba?
— Me preocupa más como lo miraba ella...
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Fuera de juego || Eduardo Camavinga (1 y 2 parte)
RomanceUna prestigiosa abogada que no cree en el amor, hasta que uno de los futbolistas más reconocidos del país se cruza en su camino. Dos mundos totalmente diferentes y condicionados por el que dirán. Una historia de amor o desamor, ¿te atreves a descub...