Rumores , por todos lados , podía oír los murmullos en cada rincón de la fortaleza roja.
No quería creerlos, imposible, no quería ni un poco a su medía hermana Rhaenyra, pero sabía que pesé a todo la mujer no era capaz de permitir tal cosa, tal acción...
Lucerys yendo a ... Ese lugar, con ese tipo de personas, era algo inaudito, totalmente. Pero si ella no lo sabía, podía entender que entonces esa idea era de Daemon.
Todo lo que se decía en voz baja era que el pequeño príncipe Lucerys Velaryon había ido a las cavernas del pueblo, dispuesto a volverse todo un hombre.
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Lucerys Velaryon el joven príncipe, tan encantador, amable, servicial , atento acababa de cumplir la mayoría de edad. Y Daemon planeaba darle una ayuda, llevándolo a ese lugar "Te ayudará créeme" fueron sus palabras antes de meterlo a él y a Jacaerys en aquel lugar.
Era joven, inocente tal vez, pero sabía muy bien que era aquel sitio y para que estaba ahí, sintió su cuerpo temblar , y estaba muy nervioso, no sabía que hacer , por un lado quería hacer aquello pero por el otro no quería hacerlo de esa manera.
Jacaerys intentó detener el plan de Daemon, pero él se lo impidió porque creía que ya era momento, quería ser un hombre. Pero... ¿Quería hacerlo con esas mujeres? No lo sabía, era joven e inexperto era verdad, pero sabía todo sobre el sexo , vamos que se había masturbado muchas veces.
Conocía el placer de tocarse a si mismo, sin embargo era diferente ahora, cada una de las veces que se tocó penso en una sola persona, quería hacer todo aquello , solo que siempre se imaginó haciéndolo con alguien más.
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Caminó por el lugar, llevaba puesta una capa, no quería ser reconocido, no quería rumores sobre el, tenía que averiguar en qué lugar estaba Lucerys... Ese bastardo, tan puro e inocente estaba a punto de dejar de serlo... Con alguien más, no. No podía ni imaginar aquello , nadie podía tocarlo, nadie era digno, digno de su belleza, de su pureza, su cuerpo... Esos carnosos labios, tocar esa delicada y blanca piel, nadie era digno.
Apretó sus puños de solo imaginarlo, debía odiarlo a él Strong sin embargo estaba ahí enfurecido por todo eso. Se detuvo y sus pensamientos terminaron cuando vio a Jacaerys salir de aquel lugar, uno que conocía muy bien.
Se acercó a él y sin pensarlo mucho preguntó por Luke — ¿Lucerys está allá adentro?.
Vio al mayor de los hijos de Rhaenyra brincar levemente del susto, patético.
— ¿Aemond? ¿Que haces aquí?— parecía asustado y sorprendido de verlo, suponía que no planeaba verlo ahí.
