Corazón Encrucijado •LawLu• ONE PIECE

Extra: Enseñándole a Luffy.

Hola a todas y todos, tal y como dijimos la semana pasada, el día de hoy no habrá capítulo, pues hemos decidido una nueva modalidad de "tómate descanso después de un capítulo largo" :D como sea, de todas maneras nos dieron ganas de escribirles una pequeña escena extra como manera de regalo (tal vez lo hagamos de vez en cuando).

Como sea, si bien recuerdan, en el capítulo anterior muchas de ustedes nos preguntaron qué es lo que le ensañaron Ace y Robin al pequeño Luffy acerca de las felaciones, bueno... Éste corto capítulo es una respuesta a todas esa misma duda, así que disfrútenlo.

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*Hace cinco años: Edad de Luffy, 14 - Edad de Ace, cerca de los 17*

—Muy bien Luffy... Han pasado tres años desde que empecé a enseñarte sobre sexualidad, así que dime, ¿Qué has aprendido?

—Las mujeres son pirañas y dejan marcas raras en el cuerpo.

—¿Qué? ¡No! ¡No son pirañas! ¡Y se llaman chupetones! ¡No son mordidas! —regañó por enésima vez suspirando bastante fastidiado— Además... No sólo las mujeres dejan chupetones, también los hombres pueden hacerlo.

—Como sea —se encogió de hombros— De todas maneras, no entiendo por qué es importante aprenderse ésto, Ace... ¿A quién demonios le interesan las estúpidas relaciones de todas maneras? ¡Yo quiero ser pirata! ¡No quiero casarme ni nada por el estilo!

—Lu, enserio, pon atención por favor, dentro de dos días cumplo 17 años y tú bien sabes que me voy a ir a mi aventura, entonces... Necesito que te quede muy claro todo lo que te he intentado enseñar hasta ahora, tal vez no te importe ahora, pero... Pero dentro de un tiempo seguramente te va a gustar alguien y sé que eres un completo idiota, entonces... ¡Tienes que saber qué hacer en esos casos! ¡Cabeza hueca! ¡¿Qué harás si termina embarazada?! ¡¿Quieres que tu aventura termine así?!

—Pfff... Sí, sí, sí, chupetones, mordiscos, manos sudadas, besos tontos, y gente invadiendo mi espacio personal.

—¡No olvides la protección! ¡La protección es fundamental! ¡El esperma puede embarazar! ¡Así que no dejes a tus amigos libres así como así!

—Es... ¿Qué?

—¡Ya te lo había explicado!

—Lo olvidé —mencionó hurgándose la nariz.

—Ah... —suspiró fastidiado mientras se rascaba fuertemente la cabeza— Es lo que sale después de que alguien frota o estimula mucho la zona erógena... El pene —decidió simplificar pues sabía que con Luffy debía ser demasiado directo para que aunque sea algo se le quedase en esa cabeza hueca.

—Sí, sí, sí, así como te caché tocándote el otro día... Fue asqueroso, por cierto.

—¡Ah! ¡Te dije que olvides eso! —gritó totalmente sonrojado— Pero... Como sea, sí... eso

—Entonces la cosa blanca sale cuando la tocas mucho y cuando la metes en lugares raros.

—¿Y esos lugares son? —preguntó expectante.

—Emm.... ¿Allí abajo? —preguntó dudoso— Hay un agujero.

—¡Hay DOS agujeros! ¡No te vayas a equivocar de lado! Bueno... A menos que ella quiera, ¡Pero para éso hay que ser aún más cuidadoso! ¡Nunca guíes tú nada Luffy! ¡Deja que te guíen!

—Ah sí claro... Agujeros... Cosa rara, no lo haré de todas maneras, no me interesa —musitó ya fastidiado.

—¡Aunque hay una tercera opción!

—¿Eh? ¿Tercera opción?, ¿A qué te refieres Lu?

—Escucha Luffy... Cuando dos personas se quieren mucho, mucho, mucho, mucho... A veces la mujer, pues... Ella tiende a... —se acercó a su oído para empezar a explicarle acerca de las felaciones.

—¡Giu! ¡Ace, eso es asqueroso! ¡¿Por qué alguien haría eso?!

—¡Se siente bien! —justificó— Quiero decir... Es un proceso natural del cuerpo humano, Lu... Algún día lo entenderás.

—¡No quiero hacer eso! ¡Por qué tengo que meterme el "amigo" de alguien a la boca!

—¿Eh? —exclamó confundido— Eh... Yo no me refería a eso, hablaba de que tal vez quieran hacérte eso a ti.

—¡No pienso meterme un pene a la boca!

—¡No te dije ésto para que hagas eso! ¡¿Y por qué un hombre?! —preguntó extrañado.

—Tú dijiste...

—¡Yo no dije eso!

—Como sea... No lo haré, no lo haré y no lo haré ¡Definitivamente no lo voy a hacer!

—Ahhh.... Como sea, ya te arrepentirás por no escucharme atentamente cuando pudiste, maldito mocoso —concluyó dando por terminada esa conversación sobre sexualidad.

*Luffy, 19 años, durante el camino de Punk Hazard a Dressrosa*

—¿Qué pasó Robin? ¿Querías hablarme de algo? —preguntó Luffy un tanto irritado pues quería seguir jugando en la cubierta con Usopp y Chopper.

—Luffy... ¿Te agrada Torao-kun?

—¿Mmm? ¡Por supuesto que me agrada! ¡Me salvó la vida! ¿Por qué lo preguntas?

—Porque creo que tu le gustas mucho a él —mencionó entretenida— Mucho más de lo que podrías llegar a imaginar —rió por lo bajo.

—¿Ah sí? Eso es bueno, ¿No? Digo... Hicimos una alianza porque somos amigos, así que... ¿No es normal agradarnos?

—Bueno, sí... Pero... Creo que tienes que saber algunas cosas, capitán... Torao-kun no parecer ser el tipo de persona que se contenga demasiado. Podría querer pasarse de listo en cualquier momento, y para éso prefiero prevenirte.

—¿Eh? ¿Prevenirme de qué? ¿De qué hablas Robin?

—¿Qué sabes sobre el sexo?

—... ¡¿Ahhhhhhhhhhhhhhh?! ¡¿También tú?! ¡¿Por qué me preguntas sobre ésto?! ¡¿Y por qué justo ahora?! ¡¿No estábamos hablando de Torao?! ¡¿Qué tiene que ver una cosa con la otra?!

—Fufufufu, tiene mucho que ver Luffy —volvió a reír bastante entretenida— Como sea... A qué te refieres con "¿también tú?".

—Ace solía hablarme sobre esas cosas asquerosas y sin sentido.

—Oh... ¿Y qué tanto te dijo?

—Bueno... Algo sobre cómo nacen los bebés, y por qué los hombres y las mujeres pueden quererse más allá de una amistad... Resulta que "eso" me parece bastante extraño ¿sabes?

—Oh... ¿Y te dijo que "eso" puede hacerse también entre dos personas del mismo sexo?

—¿A qué te refieres?

—Quiero decir que puede haber sexo sin necesidad de que sea un hombre y una mujer quienes lo hagan, eso puede incluso pasar entre dos mujeres o en su defecto entre dos varones.

—¿Y eso para qué se haría? ¡¿Qué no es para hacer bebés?!

—No necesariamente.

—Mmmmm.... ¿Y cómo es eso? —preguntó el monito sintiéndose ligeramente interesado en el tema, pues toda la situación le parecía de lo más extraña.

—Bien, capitán... Siéntese, porque tendré que enseñarle todo desde cero —después de eso, Robin se quedó hablando con Luffy acerca de las maneras sanas de tener relaciones entre dos hombres y la importancia del establecimiento de límites.

Fin del extra.