Corazón Encrucijado •LawLu• ONE PIECE

Capítulo 46: Caos - Parte 2

En cuanto el Donquixote dejó caer al marine al piso, sacudió la sangre de su espada, y lo primero con lo que su visión periférica se topó fue con otra silueta familiar que lo hizo voltear complacido, ya que solo con eso pudo reconocer al hombre por el que se había animado a provocar todo ese alboroto en primer lugar y aunque le hubiera gustado rebanarle el cuello de inmediato, la verdad es que era un hombre de protocolos y, lo que este indicaba, es que tenía que ser mucho más parsimonioso si la víctima era de mayor interés para él. Es como cuando visitas un restaurante elegante, sería un desperdicio atragantarse con la comida sin saborearla bien primero, los platillos principales debían de ser apreciados con cuidado, y paciencia, pues terminarlo de una sería un jodido desperdicio.

—El plato principal ha llegado —musitó relamiéndose los labios mientras su mirada se volvía gélida como el hielo.

—Oi... Ahorine, ¿Estás bien? —musitó el capitán de los Heart intercalando la mirada entre el marine y su atacante tratando de comprobar a primera vista su estado, pero sabiendo que no podía precipitarse a tratar de curar al contrario, no cuando tenía a la bestia mirándolo dispuesto a morderlo en cualquier momento— Joder... —maldijo por lo bajo sintiéndose inútil por no poder atender a su paciente.

—Parece que te divertiste ¿No? —preguntó el Donquixote comenzando a caminar hacia su presa mientras mantenía su espada erguida en un porte amenazante— ¿Disfrutas burlarte de mí acaso?

—¿De qué demonios estás hablando?

—¡No te hagas el tonto! —gritó irritado al tiempo que regresaba a hacer respiraciones largas tratando de tranquilizarse así mismo— Tú me has arrebatado lo que me pertenece —gruñó por lo bajo— Aprovechaste que estaba ocupado para correr a tus anchas y ahora me has robado algo que no podré recuperar.

—Yo no te he quitado nada.

Ante dicha declaración, el emplumado corrió y saltó de tal manera que de un segundo a otro ya se encontraba enfrente del capitán de los piratas de corazón quien al mantenerse con la guardia alta pudo recibir el ataque evitando el corte, cosa que si bien molesto un poco al atacante, también le generó una cierta satisfacción, pues no sería una presa fácil lo que de alguna forma lo complació bastante

—Me has quitado lo único bueno que tuvo esta estúpida experiencia —dijo con una calma que solo demostraba lo molesto que estaba— ¡Pagarás con tu vida! —grito el emplumado rabioso, lanzando ataques a diestra y siniestra.

Pero al igual que el marine antes, el Donquixote se estaba dejando llevar por la rabia que sentía en contra de Torao, haciendo que sus ataques y movimientos fueran muchísimo más erráticos de lo que serían en una situación normal, cosa que el pirata noto y obviamente uso a su favor, logrando de esta forma acertar varios golpes y cortes a su atacante, lo que de hecho solo hacian enojar aún más al de negro.

—¿Eso es todo lo que tienes? —se burló el pirata recibiendo el ataque desviando la espada de su posición hacia un costado, momento que aprovechó para romper la defensa del de negro dando un segundo golpe con la funda para así lograr que este termine por soltar su espada— Qué decepción... ¿Cómo es que le ganaste a Ahorine? —exclamó fastidiado observando la expresión encolerizada del contrario quien lejos de verse sorprendido sólo giró lentamente su cabeza hacia un costado con una calma tal que lo hacían lucir bastante tétrico.

Antes de que el capitán de los Heart pudiera decir algo más, el Donquixote se aproximó rápidamente a su contrincante pues su experiencia indicaba que al estar desarmado, lejos de tomar distancia, el movimiento más inteligente era acercarse lo más posible al contrincante para evitar que éste pudiera blandir su espada libremente convirtiendo el encuentro en una pelea cuerpo a cuerpo en donde él sabía que tenía la ventaja pues su conocimiento de diversas artes marciales le favorecían. En este caso su conocimiento en Aikido era fundamental.