Toda está historia se sitúa en "El Bronx" un barrio de la ciudad de Nueva York, una zona muy pobre y sin demasiado atractivo turístico, es una zona de pandillas donde abunda el tráfico de drogas y un sinfín de crimenes más.
Aquí mismo viven nuestros...
Mia Miller: Después de haber ido a "rescatar" a Gigi y ver como Tom la miraba, la tomaba en sus brazos al regreso no pude evitar sentir ese "vacío" en mi estomago. Él había sido más que follar para mí a diferencia de él, pensé que tal vez podríamos volver a tener eso que teníamos, después de todo teníamos la misma vida, los mismos traumas, lo conocía tan bien, mejor que a mí misma. Pero al enterarme del embarazo de Gigi todo se fue al carajo, sabía que él tenía algo con ella, lo sospechaba, cada vez que ella pasaba con su estúpido uniforme por la calle de enfrente la forma en la que Tom la miraba no era normal y las noches que me rechazaba luego de habernos dejado y se desaparecía en la mitad de las reuniones de la pandilla, estaba todo enfrente de mis ojos, carajo.
La odiaba, a ella y a su bebé, ella ya era todo para Tom y con un bebé en camino aún era más, el las amaba y yo solo era un cero a su izquierda, una más de su lista.
Aún así no me rendiría, si había sido mío antes, podría serlo ahora o cuando yo lo quisiera, ella me importaba tan poco.
Abajo estabamos ya todos temprano en la casa de "South Bronx Leaders", fumando tomando, repartiendo mercadería, arreglando los autos afuera, haciendo ruido con nuestras motos. Yo subí disimuladamente las escaleras y antes de llegar al final de la misma arriba pude ver a Tom salir de su cuarto dirigiendosé al bajo con una toalla en su hombro, iba a seguirlo, Gigi estaría durmiendo, él había estado con ella toda la maldita madrugada, era mi momento, hasta que siento que uno de los chicos llama a mi nombre y yo solo hago una mala cara antes de bajar y ayudarlos.
Minutos después subo decidida y al llegar a la puerta puedo sentir la regadera aún prendida, tomó el pomo de la puerta abriendola y posteriormente ingresando, al entrar pude ver la ropa de Tom y alguien más en el piso, a lo cual levantó mi vista viendolo a él y Gigi borrosos debido al vidrio del baño, abrazados. Él la tenía agarrada contra la pared con una de sus piernas en su cadera, al sentirme entrar el la cubrió y yo solo cerré la puerta bajando lo más rápido que pude, maldita perra.
Minutos después los veo ingresar al patio tomados de la mano, yo estaba sentada en el parillero de la casa, fumando un cigarro observandolos venir a nosotros o más bien a Ronny y Alessia, los padres de Tom, ellos parecían contentos, o más bien Alessia con Gigi, la pequeña perra no había terminando de sentarse alado de Tom que ella fue directo a su lado en el brazo del sofa para abrazarla feliz y tocar su abultada y maldita panza.
Gigi Barons: Después de nuestro "momento íntimo" con Tom decidimos bajar con todos al patio y luego de varías charlas, nuestra hija parecía tener mucha hambre a lo cual le avisé a Tom que iría a la cocina por algo de comer, él quiso levantarse para ir conmigo, no quería dejarme sola ni un minuto, era algo tierno pero su hermana Olivia le dijo que ella me llevaría.
-Tranquilo hermanito, yo le daré de comer a mi sobrina.-Dice sonriente, dandole un beso en la mejilla tomando mi mano dirigiendonos a la cocina.
Al llegar revisó la heladera para posteriormente mirarme:
-¿Y bien? ¿Qué quiere la princesa?.-Dice mirandome con ternura.
-Sinceramente muero por algo de chocolate con maní.-Dije moriendo mis labios.
-Hecho, tengo de eso en mi cuarto, esperame aquí.-Dice para posteriormente salir corriendo a su cuarto.
Empiezo a caminar por la cocina mirandola con detalle, si bien hace mucho vivó aquí nunca he podido admirar nada de ella en sí, pasaba el 90% del tiempo con Tom que insistía en estar fuera o en nuestro pequeño globo en nuestra habitación mientras cumplía mis antojos, mirabamos la TV y el acariciaba mi panza y me besaba.
Pude notar una bandeja con lo que parecía ser una torta de manzana, mi hija también lo noto pues al instante tuve el antojo de un trozo, mire para todas partes para ver si había alguien h cuando iba a tomar un trozo alguien me interrumpe para hablarme.
-Así que tú eres la famosa Gigi.-Dice esa una voz. Al voltearme pude observar quien era, Mia estaba parada de brazos cruzados a unos metros de mí, nunca había sentido su voz, siempre la veía a la distancia, todos en "El Bronx" sabíamos su historia y también que había tenido con Tom, mi Tom.
-Mmm, si supongo que esa soy yo.-Dije algo bajo.
-Mira, que te hayas dejado embarazar de Tom no significa nada, no me interesa que diga él y sus padres de ti, lo que hice ayer fue solo por Tom que quede claro.-Dijo acercandose a mí haciendome alejar y quedando pegada a la mesada de aquella cocina.- Y esuchame bien maldita perra, Tom fue, es y será mío siempre. Ni tú, ni ese maldito bebé podrán conmigo-Dice sería.
-¡Aquí está el súper chocolate!.-Dice Olivia entrando a la cocina.-¿Pasa algo chicas?.-Continúa al vernos a mi y a Mia en un mismo lugar.
-Para nada Oli, estamos hablando con Gigi acerca del bebé, ¿No es verdad?.-Dice mirandome con una sonrisa falsa a lo cual yo solo asiento mirandola.
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