Un Corazón con Motor

Prólogo

Mayo de 2012

—¿Segura que estás bien para la carrera? —le preguntó su padre antes de que subiera al monoplaza.

—Si — ella se pone el casco —Estoy mejor que ayer.

—No creo que es recomendable que corras hoy.

—Papá voy a estar bien —le dice.

Ella se acercó a su hermano para poder desearle suerte para la carrera que correrían.

—Eri —llamó a su hermana cuando ella ya estaba caminando hasta el monoplaza —Si te pasa algo es mejor que te retires. — se burla de ella pero en verdad estaba preocupado por su melliza.

—En tus sueños— menciona mientras camina —Pero si llega a pasar algo tú debes de seguir. —Ericka iba a empezar la carrera en tercera posición mientras que su hermano sería el quinto en la salida.

Después de unos minutos la tercera carrera de la Fórmula tres europea del 2012 inició, las primeras tres vueltas transcurrieron de manera normal para Ericka, pero en la novena vuelta de la carrera en una de las curvas para mantener la tracción en el monoplaza y no realizar un trompo en la curva tuvo que realizar una mala maniobra que le provocó que nuevamente tenga ese dolor insoportable en su pecho, el mismo de ayer y de hace algunos días.

—¿Ericka, te encuentras bien? —le preguntó su ingeniero.

—Estoy bien —mintió, pero el único que identificó la mentira por su tono de voz fue su padre que aún estaba en el box del equipo de su hija.

Continuó la siguiente vuelta con el dolor que mantenía en su pecho, pero en la segunda curva de la décimo primera vuelta ella empieza a zigzaguear bajando la velocidad del monoplaza, ya que se sentía algo mareada.

—Regresó —Ericka avisa por la radio.

—Ericka debes de retirarte —le dicen.

—No, puedo continuar —dice tomando la siguiente curva, empezando a ver borroso.

—Ericka retírate —vuelven a pedirle.

Ella no contestó, estaba en la recta e iba detrás de los demás pilotos, en la siguiente curva el monoplaza de Ericka chocó contra las barreras, el choque no fue tan fuerte gracias a que el monoplaza ya había perdido velocidad.

—¿Ericka? —empiezan a llamarla pero no obtenían respuesta alguna —Ericka por favor contesta.

La carrera no se detuvo, un carro de seguridad y un carro médico salieron del pit line para dirigirse hasta donde había chocado.

—¿Fue mi hermana quien salió?— Carlos pregunta pero nadie le contesta.

—Si —es avisado —La pista está limpia debes seguir.

—¿Cómo está ella?—pregunta con preocupación.

—Carlos —escuchó la voz de su padre —Recuerda lo que te dijo tu hermana.

—Bien

Ya habían sacado a la chica pero estaba inconsciente, rápidamente la llevaron al hospital del circuito, donde aún seguía sin despertar cuando su padre llegó hasta el sitio. El médico que estaba atendiendo a su hija no le decía nada.

—Familiares de la señorita Sainz —llamó el doctor, Carlos se acercó —ella aún no despierta, tuvimos que ponerle una intravenosa para que pueda estar hidratada, puede que el desmayo se deba al estrés que ocasiona este trabajo.

—¿Puedo ingresar a verla? —preguntó el patriarca de los Sainz.

—Si, lo acompañó —ingresaron a la habitación donde Ericka estaba acostada en un camilla. —Señor Sainz, voy a hacerle algunas preguntas que no pudimos hacerle cuando llegó.

—Adelante — Carlos se sentó en uno de los taburetes que se encontraba en la habitación, viendo a su hija dormida.

—¿Ha visto algún cambio en su hija durante los últimos días?

—Ericka desde hace algunos días ha tenido mareos —indica el padre —El médico familiar la revisó antes de viajar e indicó que puede deberse al estrés, pero cuando llegamos a Inglaterra los mareos eran más frecuentes, dijo que tenía dolores en el pecho desde días atrás.

—¿Algún otro síntoma?—preguntó el doctor

— Un poco de dificultad al respirar y el día de ayer me dijo que había tosido sangre —eso último que había dicho el padre de Ericka fue lo que alertó al médico.

—¿Había tosido sangre antes?

—Por lo que ella me dijo, no —contestó.

—Sr. Sainz, los síntomas que menciona son preocupantes.—señala el doctor mientras estaba anotando todo lo que le había dicho el señor Sainz — La tos con sangre y los dolores en el pecho podrían ser señales de un problema más serio. Necesitaremos hacerle más pruebas para determinar la causa exacta de sus síntomas.

El padre asintió. Se decidió trasladar a Ericka a un hospital para que puedan realizarle los exámenes completos y poder determinar qué era lo que tenía Ericka. Ni bien llegaron al hospital en la ambulancia ya estaban realizando lo pertinente para diagnosticarla.

Lo que hizo que Ericka dejara el deporte a motor por un tiempo fue una Tromboembolia Pulmonar en estado agudo pero que si no era tratada en el momento podía perjudicar. El Trombo pudo haber sido ocasionado por un sobreesfuerzo o la deshidratación, aunque no descartaban los viajes prolongados que tenían que realizar.

Publicado: 11-07-2023