La calidez de un hogar

87 6 0
                                    

Está enorme mansión sigue siendo demasiado para nosotros, aunque vivimos rodeados de guarda espaldas y muchas personas las cuales todas cumplen su función, sigue siendo demasiado espacio para una pequeña familia de tres, pero con los meses le tome cariño a este lugar, es imposible no tenerlo cuando cada espacio es precioso y único, eso no se lo puedo reprochar a Benedikt, su buen gusto es una de sus pocas cualidades.

De principio fue incómodo y asta agobiante acostumbrarme a la convivencia y rutina, pero una vez que lo acepte terminé sintiendo ese calor de hogar, sin duda esta mansión también se a metido en mi corazón, ¿será ese mi gran problema? Que me adapto e ilusiono demasiado rápido.

Los primeros días de convivencia entre mi madre y Benedikt fue una guerra constante, se llevan demasiado mal, al punto de llevarse la contraria en todo y es que cada uno tiene ese instinto de sobre protección para conmigo que no saben como ponerse de acuerdo; Después de unos cuantos gritos incontrolables que me provocaron, ya han sabido hacer las pases por ese amor y respeto que me tienen, pero esa espina entre ellos sigue enterrada y no se que más hacer para que se quieran.

Entiendo a mi madre por todo lo que pasó con Roberto el hombre que amo con tanta intensidad, la traiciono y esa mala etapa que aún no supera a creado desconfianza hacia todos los hombres similares, adinerados y con poder, más el evidente hecho de que soy lo único que tiene en esta vida y por obvia razones siente que Benedikt me alejo un poco de ella; Sin duda la entiendo tiene miedo a perderme; Sin embargo, lo que no termina de entender es que ella siempre será la primera persona que más amo en el mundo y Benedikt no podrá cambiar esa realidad porque son dos maneras de amar completamente diferentes; En el ahora no me arrepiento de nada, por salvarla volvería a firmar ese contrato que tanta a cambiado mi vida, ella aún no sabe nada de esto, pues Benedikt es un hombre de palabra y a guardado nuestro secreto; En ocasiones el remordimiento de no poder contarle todo lo que he vivido me agobia pero me trago la culpa, ya que primero está su salud.

En cuanto a Benedikt, se bien que es un antisocial, posesivo y orgulloso y por más respeto que desee tenerle a mi madre esa parte salvaje y orgullosa que tiene siempre termina dominándolo y mas en esos momentos en los que siente no tener el control de todo; Él no permite ni permitirá que nadie lo contradiga y menos mi madre. Con el tiempo una parte de él perdió las ganas e interés de ganarse el respeto o aceptación de mi madre, pues dice que sin importar lo que haga, ella nunca lo querrá; Sin embargo, eso no es impedimento para que nos amemos y pasemos buenos días, sí, es intenso y me sobreprotege como su posición mas preciada pero e conocido que en el fondo, él tiene esa parte buena que resurge en los momentos menos esperados, Benedikt es un hombre perfectamente imperfecto pero lo importante es que cuanta con un buen corazón y se que el hecho de que mi madre no lo acepte lo tiene lleno de temor.

Después de no soportar mas las contantes insinuaciones de cada uno, más esa agresiva pesadez en el ambiente cada que ambos les tocaba compartir un mismo espacio y las tantas discusiones que yo terminaba por cortar antes que comenzarán, Termino por llegar ese día en el que mi paciencia tuvo su límite; termine enfrentándolos de la mejor y pacifica manera que pude, dejándole en claro la importancia de cada uno en mi vida y con ello, se comprometieron a intentar llevarse bien, asta ahora han cumplido con su palabra aunque las miradas asesinas que de vez en cuando se lanzan no son para nada agradables.

Como dije, es un constante agotamiento físico, emocional y mental todo lo que hemos vivido, más que todo con la agotadora enfermedad de mi madre que a todos en algún momento de este larga travesía nos agotó y desestabilizó emocionalmente, ya han pasado casi cinco meses y hoy termina su tratamiento para proseguir al siguiente y último paso, la inevitable operación que tiene fecha en tan solo una semana, todos los días le pido a dios que siga saliendo bien en todo esta ardua lucha.

Nada a sido fácil pero amo tenerlos tan cerca de mi, estando todos juntos mi Corazón esta desborda de amor y felicidad, ellos son el motivo suficiente para despertar cada día más fuerte, si vale la pena una vida de constante lucha a su lado, vale la pena seguir viviendo por el amor que ellos me brindan.

Por otra parte, no hemos recibido más ataque, ni amenazas de parte del demonio de Roberto y todos sabemos que tanto silencio de su parte no es bueno, esa vez que escribió al celular de mi madre estaba más que enojado por haber expuesto en noticia internacional su tan odiado secreto, por supuesto hemos tomado las previsiones necesarias, no hay esquina de la casa o lugar a donde vayamos solas, siempre estamos acompañadas de guarda espaldas hemos seguido el plan de Benedikt, también cambiamos de número telefónico, no hemos descubierto quién le dio el número personal de mi madre pero el dinero y poder lo puede todo así que no podemos descartar ninguna posibilidad.

-Bienvenidos, siéntense- nos dice el doctor que atiende el caso de mi madre.

Hoy le realizaron los últimos exámenes a mi madre y con lo que arroje estos resultados, el doctor toma la decisión final, hemos visto que con los días mi madre tiene mejor semblante y menos cansancio que antes espero no estarme ilusionando en vano y con el favor de dios sean las buenas noticias que todos esperamos, después de sentarnos Benedikt me toma la mano y la aprieta en señal de apoyo pues mi ansiedad y nervios son más que evidentes.

Cada vez que puedo le agradezco a el, por estar siempre a mi lado, tomando mi mano en estos largos y difíciles momentos. Justo ahora mis manos tiemblan por el intenso suspenso que a creado mi mente mientras el doctor sigue en silencio arrugando su entre cejo cuando sigue dando un último vistazo a los resultados que yacen en sus manos.

El doctor levanta su cabeza me sonríe mostrándome su blanca y perfecta dentadura.

- El tratamiento a sido un éxito, el cáncer se ha eliminado en su totalidad, la próxima semana podemos operarla y con esta operación nos aseguraremos de terminar limpiando y eliminar algún residuo que pueda quedar, con mucho positivismo y unas buenas semanas de tratamiento de solo analgésicos, nos aseguraremos de que venza por completo el cáncer- sonrió ampliamente y apretando la mano de Benedikt, suelto un pesado suspiro y miró hacia el techo como si atreves de él pudiera contemplar el cielo para así darle las gracias a diosito, mis lágrimas amenazan por salir pero esta vez por una inmensa felicidad en mi pecho.

Hace tan solo un año, las esperanzas y deseos de ver a mi madre con vida eran nulas pero hoy, no puedo estar más agradecida, solo un puñado de personas sobreviven al cáncer por lo que dios tiene que estar implicado en esta especie de milagro.

-Podemos estar feliz por su gran avance pero aún queda un arduo camino, la operación y la recuperación también es un camino difícil, no bajemos la guardia y sigue así de fuerte querida Zoe- bajando mi mirada, asiento con mi cabeza.

El doctor y yo sonreímos ampliamente, pero el molesto y fuerte ruido de la garganta de un molesto Benedikt me llevó a voltear a verlo, mi sonrisa se borra cuando veo su cara de enojo.

Tonto, celoso y posesivo, eso es lo que es, El doctor es un hombre muy amable y en los meses que hemos compartido las diferentes etapas de mi madre hemos ampliado nuestra confianza, es muy pronto para considerarlo un amigo pero es un buen hombre.

-¿Querida Zoe? Como se atreve a tutear de esa manera a mi mujer- Benedikt gruñe molesto dedicándole una oscura y fuerte mirada al doctor.

En ocasiones el mismo doctor cuando no estaba Benedikt presente, se tomaba la confianza de tutearme yo no le veía nada de malo pues es una persona que me a demostrado respeto y se ha vuelto muy cercano a mi madre, por ello le permití tal confianza.

El médico abre los ojos más de lo normal cuando se da cuenta de su gran error- tiene razón, lo siento señor Filatova- comenta muy serio.

Diría que estoy sorprendida por la reacción de Benedikt pero no es así, el siempre tiene esos dominantes impulsos, pero me sobresalto cuando Benedikt se levando con tal rapidez que en segundos llega a la parte de atrás del escritorio donde el doctor se encuentra.

Tapo mi boca cuando veo que enseguida el pobre hombre palidece y retrocede quedando acorrala por un endemoniado Benedikt

-Que no se te olvide cuál es tu única función, a mi mujer no le hables con esa confianza, para ti o cualquiera es la señora Filatova, mi mujer- le deja en claro, pero esta reacción si me toma por sorpresa.

Vivir por amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora