rude boy ✧ haobin

capítulo 23.

—¿A dónde quieres ir, eh?—preguntó Jaemin mientras lo miraba con una radiante sonrisa.

—A dónde sea, me da igual—contestó sin mucho entusiasmo, el chico le parecía muy atractivo, pero eso no era suficiente para querer tener una "cita" con él, si lo había hecho, era solo para poder tomar unas jodidas fotos y subirlas a su Instagram, ¿era inmaduro de su parte? Lo era, pero eso no le importaba.

Lo único que quería era hacer sentir mal a Hanbin, qué se diera cuenta de lo que estaba perdiendo por irse con su noviecita Minnie, o bueno, eso era lo qué Zhanghao pensaba, en realidad se había alejado por su actitud y porqué no quería terminar obsesionado con él.

—Me alegra que después de tantas invitaciones, al fin hayas decidido salir conmigo.

—Si, estaba muy aburrido en casa—contestó sin darle importancia.

Jaemin notó que él no estaba igual de entusiasmado con la salida, pero no dijo nada, sabía que Zhanghao era así, nada parecía causarle ilusión si se trataba de amor. Y no es como si Jaemin lo amará, pero si le gustaba y mucho, esa noche le llevaría a donde quiera con tal de terminar en su cama una vez más.

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—¡Muchas gracias por haberme invitado a una cita, Oppa!—exclamó con la voz chillona—Me la pase increíble a tu lado.

Si... él no podría decir lo mismo. Definitivamente ella no era su tipo de chica, no lo iba a negar, no era fea, al contrario, era muy bonita, pero simplemente no le llenaba por completo, había algo en ella qué no le gustaba, podría ser su voz chillona, la forma en la que expresaba su cariño con besos y abrazos cada diez minutos, o que estuviese dispuesta a hacer todo lo que él le pidiera, no tenía decisión propia, si Hanbin decía "no", para ella era no, si decía "si", era un definitivamente sí.

—Me alegra que la hayas pasado bien—acarició su cabello y le dio un pequeño beso en la frente, pero ella no quería solo eso, quería más—Debo irme, ten linda noche.

—¿No quieres pasar?

—Estoy muy cansado, será en otra ocasión—respondió y ella frunció los labios—Nos vemos mañana en la escuela, ¿si?

—Bien—aceptó, pues no tenía de otra y luego de despedirse, el peliazul se marchó en su motocicleta hacía casa.

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—Vamos, Zhanghao, canta conmigo—le animó Jaemin para que subiera al escenario y cantará una canción con él, pues habían decidido ir al Karaoke.

—No, no cantó bien—se negó por segunda vez—Ve tú, anda y canta algo para mi.

—¿Eso te hará feliz?

—Muy feliz—sonrió y le dio leves empujones para qué fuese al escenario y escogiera una canción. Él chico así lo hizo, entre todas las canciones de la lista eligió una de esas que podías dedicarle a tu crush que no te hacía caso, a Zhanghao realmente no le importaba, claro que se sentía bien, pues el chico estaba elevándole el ego, pero le interesaba más grabarlo para después subirlo a su estado junto a algunas fotos más. El chico continuaba cantándole y Zhanghao no dejaba de reír, le parecía tan patético que estuviese haciendo algo como eso, ¿qué tanto estarían dispuestos los chicos solo para llevarte a la cama?

—¡Bien, lo hiciste bien!—habló mientras daba pequeños aplausos y miraba como Jaemin regresaba a su lado.

—¿Te gustó?—se sentó y le dio un tragó a su bebida.

—Si, si, me gusto—tomó su celular de nuevo—¿Nos tomamos una foto?

—¿Qué tienes con las fotos?—preguntó, pues aún se acordaba de qué Zhanghao le había pedido una foto mientras le besaba el cuello.

—Soy de esos chicos que capturan todo—mintió y Jaemin no preguntó más, en su lugar se colocó a un lado suyo y Zhanghao comenzó a tomar varías fotos.

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—¿Cómo te fue en tú cita?—le preguntó su madre en cuanto lo vio sentarse a su lado.

—¿Te digo la verdad o te miento?

—Hanbin, cielo—tomó su mano—¿Por qué sigues saliendo con esa chica? es más que evidente qué no te gusta.

—Debo darle una oportunidad, ella siempre me ha querido.

—No tienes porqué—negó con la cabeza—No es tu obligación corresponderle con el mismo sentimiento a alguien.

Y esas palabras fueron directo a su pecho como una navaja, era verdad, no tenía obligación de sentir lo mismo qué Minnie, pero tampoco lo era para Zhanghao sentir lo mismo qué Hanbin.

—Quiero sacar a alguien de mi cabeza—confesó—Solo eso.

—No es la manera, ¿sabes?—él asintió—No voy a meterme en tus decisiones, pero te lo advierto, si solo ilusionas a esa chica para sacarte a otra de la mente, todo terminará mal.

—Bien, debo ir a mi habitación—se despidió de ella con un beso en la frente y se dirigió a su cuarto, su madre tenía razón y lo sabía, pero muy en el fondo, Hanbin quería darle celos a Zhanghao y así tener su atención.

Estaba cansado, lo único que quería era dormir, ni siquiera quería levantarse de la cama para cambiarse de ropa, estaba dispuesto a cerrar sus ojos, pero no pudo evitar tomar su celular y revisar el perfil de Zhanghao una vez más, pero como era de esperarse, solo le hizo sentirse mucho peor. Miró aquel video y las fotos, sin darse cuenta mantenía el puño cerrado del enojo, aún queriendo convencerse de qué no le importaba, la verdad era que sí y sabía muy bien que Zhanghao lo hacía a proposito, era como una maldita guerra de quién le daba más celos a quién y claro, Hanbin sería el perdedor.

—Solo vete a la mierda, Zhang—susurró y apagó su teléfono, intentó dormir pero le era imposible, los pensamientos no le dejaban conciliar el sueño y eso hacía querer golpear algo, quería desquitar su coraje con alguien, pero ¿qué haría? ¿golpear la pared?

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—No, ya te dije qué no quiero—le empujó—Vete a casa ya, Jaemin.

—¿En verdad me harás esto?

—¿Qué cosa?—preguntó con fastidio—¿No tener sexo contigo?

Zhanghao mantenía su espalda pegada al auto del chico y esté estaba frente de él impidiéndole el paso, habían comenzando con un par de besos subidos de tono, pero eso era todo lo que quería, pero al parecer Jaemin quería algo más.

—Me dejaste con las ganas aquel día en la fiesta y ahora estás haciendo lo mismo—contestó mientras colocaba su mano en la cintura de este—Me gustas mucho, Zhanghao, no puedo seguir esperando.

—Cállate, Na, te oyes como un jodido urgido—rodó los ojos y consiguió quitarlo de enfrente para caminar hacía la entrada de su casa, pero Jaemin le tomó de la mano para detenerlo.

—Lo siento, tienes razón—se disculpó—No es todo lo qué quiero de ti, en verdad me gustas y quiero seguir saliendo contigo.

—Solo suéltame—pidió fríamente y el chico así lo hizo, lo había arruinado todo y lo sabía, aunque en realidad no es como si hubiese logrado algo.

La diferencia era muy notoria, Hanbin quería pasar tiempo con Zhanghao, comenzar a conocerlo, tener citas y ese tipo de cosas, aunque no se lo había dicho, pero eso quería, no solo sexo, mientras otros chicos solo buscaban una cosa y era usar su cuerpo para satisfacer sus propios deseos...

Qué mal. 

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!gracias por leer¡