Capítulo 1: Un nuevo comienzo

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POV T/N

-¡Leonard, deja en paz a Pietro!-Digo elevando la voz.

-¡Mamá, Leo no para de morderme!-Dice mi primer hijo, Pietro, de siete años.

-¡Eso es para que dejes de decir que soy adoptado!-Dice mi segundo hijo Leonard, de seis años.

-Chicos, por favor, estén tranquilos, ya falta poco para llegar a nuestra nueva casa-Dice mi maravillosa esposa, Wanda Maximoff.

-¡A su madre no le conviene este estrés que le están causando, la nueva bebé tiene que vivir en un hogar feliz, no en uno donde nos mordamos unos a otros!-Digo agobiada mientras conducía.

-Amor, yo estoy tranquila, no pasa nada, ahora intenta no matarnos mientras conduces-Dice en una risa suave poniendo su mano en mi muslo.

Yo suspiro, intentando tranquilizarme, ya que estaba apunto de tener un nuevo comienzo con mi familia, por fin podría desconectar de la base de Los Vengadores, Wanda dejó de estar en ese equipo para poder cuidar de nuestros hijos mientras que yo iba a seguir con mi trabajo de arquitecta, no es una decisión que a mí me guste porque no quiero que deje su vida allí, prácticamente alejándose de su familia pero creo que aún así hemos tomado la decisión correcta, nuestra familia ahora mismo es lo más importante y no queremos que una de esas misiones salga mal...

-¿Ya han elegido el nombre de la nueva bebé?-Pregunta Pietro, el más emocionado con su nueva hermana.

-A nadie le importa eso-Dice Leo rodando los ojos.

Leo no está realmente emocionado como Pietro, cuando les dimos la noticia del nuevo bebé se fue a su habitación de la base mientras que Pietro se ponía a dar saltos y a decir lo contento que estaba. Wanda dice que es porque está celoso, en muchas ocasiones se ha visto como Pietro quiere darme abrazos pero Leo le empuja diciendo que solo él puede darme abrazos. Es algo muy complicado, Wanda y yo no le hemos educado así, hemos dado tantas charlas sobre los celos que ya hemos perdido la cuenta, pero él sigue igual...

-Leo,cariño,debes dejar de actuar así cuando hablamos de la nueva bebé, va a ser tu hermana pequeña y no quiero tener que castigarte cada vez que te portes mal, así que dejarás esos celos tontos de una vez y vas a querer mucho a tu hermana, ¿verdad?-Dice Wanda mirando por el espejo que está en la parte de arriba del coche, en medio de nosotras, apuntando hacía a él y mirándolo fijamente.

-De acuerdo mamá...-Dice Leo rodando los ojos.

-Y deja de rodar los ojos, te pareces a tu madre-Dice mi mujer dándole una mirada fulminante.

-Se parece tanto a tí que da hasta miedo, encima está obsesionado contigo-Continúa diciendo en un susurro en mi oído.

-Está obsesionado igual que su madre-Digo con una sonrisa pícara.

En ese momento recibo un golpe en el brazo por parte de Wanda.

-¡Auch!-Digo haciéndome la dolida.

-¿Por qué le puedes pegar a mamá y yo no le puedo pegar a Pietro?-Pregunta Leo cruzando los brazos.

-Leo, nosotras estamos jugando y ni si quiera me hizo daño realmente, en cambio tu a tu hermano le pegas bastante fuerte y no paras de portarte mal con él-Digo en un tono serio.

-Está bien mami, lo siento-Dice asintiendo girando su cuerpo hacia la ventana mirando el exterior.

-En serio, tienes que decirme que le has hecho para que a ti te haga caso y se porte bien-Dice con su mano en mi nuca acariciandola con las yemas de sus dedos.

-No sé que decirte cariño, no he hecho nada realmente, sabes que él siempre ha tenido ese respeto hacía a mí, al igual que Pietro siempre lo ha tenido por tí. Por cierto, vete bajando tú del coche y descansa, yo hablaré con los niños y bajaré las maletas-Digo llegando a nuestra nueva casa y dejando el coche aparcado en el garaje.

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