Por ti hago lo que sea| EDITANDO

24| Emociones diferentes.

Diferentes emociones cap #24

Ya habían pasado una semana desde lo sucedido de Jenna y el reencuentro con mi padre.

Y bueno a decir la verdad, desde ese día ya no todo era igual.

Primero: porque sabía que mi padre nunca nos había abandonado.

Segundo: que mi mamá está rara, no se porque.

Y tercero: que Thomas no le he visto casi, y desde lo sucedido con Jenna y Nicole esta diferente.

Diferente en el aspecto que está más cerrado.

Y no me gusta eso.

Esto me da mala espina.

¿Quien le hizo eso a Jenna y Nicole?

¿Es alguien peligroso?

¿Ellos están en peligro?

¿Thomas sabe quien es?

Agh, odio no saber las respuestas a mis preguntas.

He intentado comunicarme con Thomas, pero si me contesta los mensajes es con respuestas monosílabos.

Y no ha ido más al instituto.

A decir verdad, más de una vez he estado a punto en ir a su casa.

Pero después no me atrevo.

¿Y si no quiere que me llegue a su casa?

No se.

Así que le he dado su espacio.

Aunque no lo quiera, creo que es lo mejor.

Otra cosa que me impide, son los estudios.

Ya queda menos de una semana para tener nuestras vacaciones de navidad.

Y estoy full con tareas, exámenes, trabajos, ensayos y de más.

Odio el instituto.

Y más si Thomas no va.

—Rose, cielo—apareció mi mamá, abriendo la puerta de mi habitación sin tocarla.

Ya no tenemos ni privacidad.

—Dime mamá—hablé ocupada en la lapto redactando un ensayo de historia.

—Voy a salir, te deje comida para la cena.

—¿Vas a ver a mi padre?— pregunté, despegando la mirada de la lapto.

—Si, voy a llegar algo tarde.

—¿Puedo ir contigo?—rogué haciendo un puchero.

Ahora que se que mi padre nunca nos abandono quiero aprovechar todo el tiempo que pueda, en estar con el.

No le he visto desde ese día del hospital, y a decir verdad quiero verlo.

—¿Estas segura que quieres ir? ¿Estas haciendo tarea?—me preguntó mi mamá, algo dubitativa.

—Si, además ya termine—mentira, aun me faltaba pero solo un poquito.

Eso lo podía terminar después.

Además, tenía que enfocar mi mente en algo que no fuera en:

Thomas.

—Mmm, esta bien, te espero abajo.

—Dale.

Y se fue de mi habitación.

Rápidamente me puse unos jersey, mis converse blancas—que se parecen más bien beige de los sucias que estan—una franela que tiene unas estrellas, una chaqueta ya que es invierno, y mi cabello recogido con un gorro.