Te amaré cuando seas una tranquila noche estrellada.
Te amaré cuando seas una tormenta cósmica.
Ron Lorent.
Años más tarde...
Vuelvan a leerla, votar y comentar pliss.
—¡Amor! Ayúdame con esta caja por favor.
—Voy, voy—y me quitó la caja que cargaba en mis manos.
—Dios, no sabía que estar embarazada era tan doloroso.
Si, estaba embarazada.
Thomas me propuso matrimonio dos año atrás, al contarle a todos se emocionaron y comenzamos a planificarla
Sies meses después nos casamos en la iglesia.
Una boda simple, con muchos tulipanes.
Y obviamente estrellas.
Ahora Thomas es mi esposo y futuro padre de mi hija.
Una niña.
El día que nos enteramos que estaba embarazada Thomas no paraba de llorar al igual que yo de alegría.
Así que decidimos mudarnos a una casa mucho, mucho más grande.
Bueno, hablemos claro, es una mansión del ensueño.
Ahora tanto cómo Thomas y yo trabajábamos, el le ha ido de maravillas con su primer libro titulado.
Por ti hago lo que sea.
Un amor único y especial.
Nuestra historia.
Y yo trabajando cómo astróloga.
—Siéntate en el sofá, ¿te sientes mejor?
—Un poquito.
—Te traeré agua—y con eso se alejo para la cocina.
Ya casi estábamos terminando la mudanza.
El problema era.
Que nos habíamos mudado con 37 semanas de embarazo.
O sea que ya iba pronto a tener a luz a mi hija.
Por suerte, nuestra diseñadora, Kate—amiga de Thomas desde la infancia—ya nos tenía lista la habitación de la bebé.
Nuestra habitación también estaba lista, la cocina y baños.
Solo faltaba unas habitaciónes, la sala y el patio.
—Ten—y me paso un vaso con agua.
—Gracias.
—¿Necesitas algo más, estrellita?
—Si me puedes traer cereal con arroz, seria genial.
Thomas hizo una mueca de asco y nego con la cabeza.
Durante todo el embarazo he tenido muchos antojos muy extraños.
Una vez se me antojo probar manzana con mostaza.
Recuerdo la cara de Thomas cuando me lo estaba comiendo.
De película.
—¿En serió?
—No amor, mentira, así estoy bien.
—Bueno, me llamas por cualquier cosa.
—Esta bien—accedí.
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Por ti hago lo que sea| EDITANDO
Teen FictionDiane Brown, una chica distraída y que siempre llega tarde a clases. Thomas Cooper, el chico nuevo ojos azules, guapo y jugador de fútbol. Nunca sus caminos se habían cruzado hasta que un balón los unió. Oh, ¿ya se conocían desde antes? Thomas sería...
