Imagina | Matthew Sturniolo

Regalo sorpresa

Matt:

Estaba acostado observando lo que hacía Lua porque no dejaba de estresarse.

...

—¿Qué pasa amor?

—No encuentro mi falda favorita.

—¿Cuál de todas?

—La que me regalaste.

—Pero ¿no te habías comprado una nueva?

—Al final no la compré nada, porque no me alcanzaba.

—Encima ahora me venía a buscar Dalila para ir a tomar un café y no encuentro mi falda.

(Se escuchó una bocina de auto)

—Me parece que yá llegó.

—Uff, bueno. Iré así nomás, chau amor. —te acercaste a besarlo—

—Te amo nena, ten cuidado y no llegues tarde a casa ¿Sí?

—Sí bebé, yo también te amo. —le lanzaste un beso y cerraste la puerta —

Matt:

Sé lo mucho que Lua ama usar faldas, así que pensé en ir de compras.
Me arreglé un poco y me fuí al shopping para comprarle esa falda tan bonita que vimos ayer cuando estábamos de comprar, solo rogaba de que no la hayan vendido.
Cuando entré al local me atendió una chica.

—Hola buenas tardes en ¿Qué puedo ayudarte?

—Hola buenas, quería saber el talle de una falda que tienen exhibida en la ventana.

—¿La blanca?

—Sí ¿Qué talle es?

—Es talle único porque es la última que nos queda.

—¿Es mucha molestia verla?

—No para nada, ahí te la traigo.

—Perfecto.

Mientras que la chica iba a buscar la falda, yo que quedé viendo unos tops que estaban colgados en un mostrador. Elegí uno rosa salmón que me encantó y se lo llevé también.

...

—Listo...

—Ahora entiendo por qué le gustó tanto.

—¿Es para alguien especial?

—Sí, mi novia y yo pasamos por acá viendo un poco, y en eso se entusiasmó con esta falda, pero no tenía para pagarla, así que aprovecho la oportunidad para comprarsela porque mañana es su cumpleaños.

—Aww que lindo. No cualquiera tiene esos detalles por su chica.

—Sí

—¿Estará bien el talle? De última si le queda ajustada o algo la puede venir a cambiar por otra, pero ya no sería de la misma marca.

—Sí, este es el talle que le queda bien.

—¿Algo más aparte de la falda y el top querías ver?

—Hmm, no llevo solo eso.

—Perfecto, entonces te lo pongo todo ¿como regalo?

—Sí por favor.

...

Una vez que compré todo, me dí una vuelta y regresé a casa para guardar el regalo de Lua.

Luana:

Estuve toda la tarde hablando de todo con Dalila y del incidente de la falda, hasta me dí cuenta lo tarde que se había hecho. Me llevó de regreso y me despedí de ella para luego entrar a mi casa.

Cuando entré sentía el gusto a comida y supuse que Matt estaba cocinando. No quise hacer mucho ruido porque quería caerle de sorpresa. Me acerqué por detrás y lo abracé.

—Hola bebé.

—Ay cielo, no te había escuchado.

—¿Te asusté?

—Un poco

—¿Qué estás haciendo de comer?

—Pizzas

—Uff que rico, se me antoja una Pizza hecha por Matt

—Ya va a estar, andá sentandote que yo ya pongo la mesa.

—Como digas Lover Boyy.

Luana:

Cenamos y a decir verdad me encantaron las pizzas de Matt, cocina muy bien. Hablamos un buen rato, ordenamos todo y nos fuimos a acostar a las doce.

Mientras me estaba poniendo mi camisón Matt se puso atrás mío y me tapó los ojos.

—Te tengo una sorpresa, espero que te guste. —susurró a mi oído y me destapó los ojos—

—Felíz cumpleaños mi hermosa reina.

—Ayy gracias bebé ¿Qué es?

—Abre la bolsa cariño.

Con toda mi emoción abrí la bolsa y vi que había un top rosa salmón y la falda que había visto.

—Voy a llorar, me encanta amor.

—Quiero que te lo pruebes

—Ya me lo voy a probar.

Me cambié en frente de Matt y fuí al espejo a ver cómo me quedaba.

—¿Te queda bien?

—Sí, me queda perfecto, no me aprieta nada.
¿Cómo sabés mi talle de ropa?

—Son cosas que tengo que saber linda sino ¿cómo puedo regalarte ropa?

—Mi novio tiene un muy buen gusto para elegir mi ropa.

—Me encanta que te quede tan bien.

—Gracias Matty, te amo.

—Yo te amo mucho más princesa.

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