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—Hola, hola guapas. Perdón, diferencia de horarios ¿Llego tarde?
—Para nada, en el cofre tienes tu armadura y todo lo necesario.
Sonreí agradeciéndole a Ama para comenzar a jugar minecraft con ellas. El plan era tomar, platicar y pasarnos minecraft. Si, todo en pocas horas.
¿Mi plan? No tomar mucho y concentrarme en divertirme con las hermanas.
Abrí mi primera lata de cerveza escuchando los festejos de las hermanas, cosa que me hizo reír.
Aburrida no iba a estar pues estas no dejaban de hablar y de hacerme reír.
—¿Donde esta la Rivers?
¿Cómo?
—Estoy en una mina abandonada, lejos de ustedes.
Tenía que ser una broma.
—Pasa las coordenadas para que vayamos con ________.
—¿Cómo? Ah si, voy.
—________ ¿Ya estas tomando, bebé?
—Ya voy por la segunda—admití bebiendo de la lata. Cambio de planes, necesitaba tomar para agarrar valor y aguantar el stream.
—Ya vi a Rivers—aviso Ari guiándonos, decidí concentrarme en el juego siguiendo a las hermanas.
Me quedé ayudando a Ari para matar algunas arañas. No pude evitar soltar una carcajada al oír a Ama gritar pues no tenía como defenderse.
Continuamos explorando por aquella mina pues debíamos conseguir diamantes.
—Tenía ocho diamantes y ahora tengo doce ¿Cuantos me diste?
—Te dio cuatro—hablo Rivers.
—Wow, si sabes contar Rivers—burlo Ari logrando sacarme una risa.
—Si me gradué de primaria yo.
—¿Acabaste la primaria? Eso es de chingonas.
—Gracias gracias.
《》
—Mi pregunta es ¿Cuantas llevan?
Trate de no reír tan fuerte al oír la discusión de las tres amigas al tratar de averiguar cuantos tragos encima llevaba Ama.
—¡Me hablo el ender dragón!—nuevamente reí al oír la emoción de Ari—¡Grito!
—Yo voy por el noveno—murmuró con algo de dificultad Rivers.
—Se te oye—dije siguiendo a Ari, aquel comentario causó que las tres mujeres rieran—Yo llevo... ocho creo. Perdí la cuenta hace rato.
—¿Cuál ha sido su peor peda?
—Los Eslands—murmure mirando ya con dificultad mi pantalla—Esperen.
Me levante de mi silla para buscar mis lentes, aproveche para amarrar mi cabello y regresar a jugar. Solté una risa al oír como se burlaban de Ama pues un golem la había matado.
Sonreí comenzando a cantar con Ari mientras la seguía a una aldea dejando a Rivers y Ama peleando con los monstruos.
—Son las once con once, Juanito por siempre.
—Ay que predecible.
—No importa el que dirán, tu papá y tu mamáaquí solo importa nuestro amor...
—Que dolidas—burlo Ama causando que rieramos.
Continuamos por varios minutos intentando encontrar al dragón entre risas, albures y cantos.
—¡Es aquí abajo!
Seguimos a Ari comenzando a picar para poder pasarnos minecraft. Mientras nosotras cantábamos Rivers y Ama sufrían pues únicamente escuchábamos a los crepeers explotar.
No sabia si eran por los tragos que tenia encima pero me encontraba disfrutando bastante. Moví un poco mi cuerpo al escuchar las canciones que Ari tenía puestas.
—¡Amor de mis amores que dejaste de quererme!
—¡Ari, ________!
—Mande.
—No contestaban...
—¿Cómo no? Aquí estamos listas—defendió Ari mientras reíamos. Una vez que Rivers terminó de explicarnos decidimos seguir cantando.
Después de por fin tantas horas de juego logramos entrar por el portal listas para acabar Minecraft.
Aunque si estaba difícil y más con unos tragos encima. Y claro, no pudimos ganar.
Tome mi vape observando a las tres mujeres a través del discord pues me habían invitado a quedarme un poco más. Claro que acepte.
—Ay amigas, ya tengo cara de pedita—reí causando únicamente comenzar a toser gracias al humo causando las burlas—Hermosa ya estas pedita ¿Verdad?
Asentí sin dejar de toser causando más risas.
—Se ven bien bonitas ¿Que maman?—dijo Ama terminando de acomodar su cabello—__________ ¿Te quedas?
Antes de responder mire hacia mi puerta observando a Lenay sonreír.
—Ya es tarde y no estas acostumbrada a tomar—murmuró adentrándose—Hola chicas.
—Ya llego mi mamá—dije formando un puchero en mis labios—Eso es un no, gracias por la invitación.
Me despedí de las tres mujeres de ahí para después despedirme de mi chat. Suspiré agradecida cuando la rubia me ayudo a quitarme mis cascos y a levantarme de mi silla.
—Me divertí too much...
—Lo pude ver pero debes dormir—señaló guiándome a mi cama. Me acomode en mi cama observando como Germán se adentraba a mi habitación.
—Hoy la vi mejor, esa gente le hace bien—susurro recogiendo las latas de cerveza vacías—Y tiene buen aguante.
—No digas eso—regaño Lenay limpiando mi escritorio—Debes dormir ¿Si?
