❝─Un par de copas encima junto a un par de adolecentes con las hormonas alborotadas, trajeron al mundo a un hermoso bebé que tendrían que cuidar en medio de su adolescencia─❞
#04 En SooKai 26/10/23
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Cómo ya muchos sabrán, la relación de SooBin y HueningKai se reducía únicamente al rol de padres que tendrían que cumplir con respecto a el hijo que tenían en conjunto, más haya de eso ambos únicamente eran un par de conocidos que vivían dentro de un mismo entorno.
HueningKai se dedicaba de lleno en la crianza de su pequeño bebé Niki, el cual a sus ocho meses de edad ya estaba bastante desarrollado a niveles neuronales como para estar bastante al pendiente de lo que ocurría a sus alrededores, podía entender las cosas a pesar de que no fuera tan evidente, por lo cual el menor había tratado de no actuar de manera tan salvaje cuando se encontraba su bebé tan cerca de el, no quería que de alguna manera este se viera afectado por su comportamiento.
El menor seguía estudiando, no había dejado de hacerlo en ningún momento, aunque ahora tuviese que ir muy de vez en cuando a la preparatoria cuando era necesaria su presencia, estudiar a distancia le había ayudado de gran manera ahora que contaba con un bebé al cual dedicarse por completo, su mundo giraba al rededor de aquel bebé de ojos pequeños y grandes mejillas, para el, Ahn Niki era lo más bonito y precisado que tenía.
SooBin, pues el, seguía siendo el, estudiaba por las mañanas y trabajaba por las tardes, tenía días libres por los cuales darle todo el cariño y la atención a su familia, aunque uno de ellos se siguiera negando constantemente a ser amado por el, no le importaba, el seguiría amandolos a ambos, aún sin importar que uno de ellos jamás llegaría a corresponder en lo más mínimo sus sentimientos.
SooBin vivía por y para su pequeña familia, amaba con todo su corazón a Niki, siempre lo consentía a pesar de que su estricto madre no quisiera que lo hiciera, alegando que después les haría berrinche para obtener lo que quería, pero a él mejor no le importaba en lo absoluto, el trabajaba y ganaba lo suficiente para darle todo lo que su primogénito quisiera, hacia lo mismo con HueningKai, aunque este no le hubiese pedido nada de su parte aún así lo hacía, era su esposo, y merecía recibir lo mejor de el, aún sabiendo que el menor solo lo veía como el padre de su hijo y no como algo más.
── Niki dormirá con nosotros, espero no te moleste Hyung ── comentó HueningKai mientras cubría su rostro con su antebrazo izquierdo, estando sumamente cansado sobre la cama matrimonial, SooBin asintio no teniendo el más mínimo problema, el por su parte terminaba de colocarse su pillama, bastante listo para irse a dormir después de haber terminado con sus tareas, Niki jugaba sobre la cama con uno de sus peluches en forma de pingüino ese que le había comprado cuando a penas nació debido a que le había recordado a su madre, (este seguía negandose a que tuviera algún parecido con aquel animal), el bebé miro a su madre, con ojitos llenos de necesidad que el menor no pudo notar en su momento, debido a que no podía verlo, el bebé hizo pucherito ante la falta de atención de su madre, acercándose a él mismo para darle un pequeño golpecito sobre su barriga, tratando de llamar su atención de alguna manera ── Ah, bebé ¿Que pasa?, No debes golpear a mamá, tienes que aprender a llamarme con palabras.
── a-M-Ma Ammmma ── El bebé pronunció a duras penas mientras señalaba su pecho con una de sus manitos, tocó la zona mencionada un par de veces, comenzando a pucherear y a desesperarse un poco ── a-M-Ma mer, Ammma mer.
── Oh por dios bebé, si acabas de comer hace poco ── Aclaró el menor mientras observaba a su primogénito con suma impresión, el mismo quien hizo pucheritos hasta que su madre finalmente cedió ante sus exigencias, subió la camisa de su pillama, el bebé conociendo aquella señal para poder subir sobre su pecho y atrapar con su pequeña boquita su pezón, se sentía bastante raro, pero al menos HueningKai sabía que con ello el menor finalmente se sentiría completamente satisfecho ── No puede ser Ahn Niki Kamal Huening, ¿Sabes que edad tienes?, Estás muy grande para tomar leche.
El menor lo ignoro siguiendo con su acción, sus ojos cerrandose ante la satisfacción que le generaba el sentirse ligeramente lleno de nuevo, SooBin miró la escena desde su ángulo, y simplemente no pudo ser capaz de dejar de mirar aquel hermoso pezon que aún quedaba desocupado.
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