-30-

325 76 3
                                    

Me levanté con cuidado de la cama, la enfermera me dijo que podía dar un pequeño paseo por la casa, yo no conocía este lugar era nuevo para mi pero estaba decorada como el departamento donde vivía con Slime así que era agradable.

Al parecer había tenido un ataque de ansiedad o eso me explicaron, tal vez era un trauma por lo que había pasado. La enfermera fue muy amable hablándome de mi hija dejándome en claro que ella estaba bien.

Toda la mañana estuve con la enfermera, hacía algunas pruebas para verificar que mis signos vitales reaccionan bien estables, quitó la venda de mi cabeza colocando una pequeña gasa en mi herida.

Fui al baño y pude inspeccionar mejor mi cuerpo, tenía hematomas en la cara, tenía un pequeño corte en el labio pero parecía que estaba cerrando de forma rápida.

La enfermera me ayudó a cambiarme y me dijo que estirara las piernas por que pase demasiado tiempo acostado qué tenía que volver a acostumbrarme. También me prepara de comer me sentía tan hambriento qué sentía que moriría de hambre.

En estos momentos me informo que mi hija estaba en su escuela y mi suegra que se la pasaba cuidándome fue a su casa. El único miembro de la familia que restaba era Slime pero mencionó que estaba encerrado en su oficina.

Pedí que me indicará dónde era y yo iría, camine tranquilo sin mucha prisa tome la oportunidad de conocer la casa que me parecía maravillosa, no era tan grande como la mansión de los padres de Slime pero era perfecta.

Tenía un gran patio por lo que vi que había una piscina y una gran zona con muchos juegos, podía imaginar para quien estaba hecho ese lugar. Se me mencionó que estaba siendo decorada la casa, así que faltaban muchos muebles o se estaban pintando algunas paredes.

Pero lo que veía me gustaba, tenía una vibra relajante ya quería ver cómo era el cuarto que compartiría con Slime o el cuarto de mi niña. Ya los extrañaba a los dos, tenía una sensación extraña en mi cuerpo que quería abrazarlos, camine en dirección a la oficina esperaba no interrumpirlo y poderle dar un beso.

Sonaba tonto pero ya necesitaba sentir sus labios junto a los míos y escuchar todas las cosas lindas que me decía. Quería escuchar salir de su boca la palabra "Te amo", hace tiempo no la escuchan y ya era una necesidad en este momento.

Al acercarme a la oficina escuche algunas voces, tal vez estaba en alguna junta, mire mi ropa no quería lucir mal aunque no estaba en mis mejores galas. Tenía puesto un chándal y una sudadera qué me quedaba grande, podía ser peor con cuidado de no lastimarme me acomode el cabello.

Gire a la derecha donde me encontraría la puerta que da a la oficina pero al hacerlo vi a cinco hombres que estaban sacando de la oficina a alguien a rastras, lucía en mal estado la persona parecía que no estaba consciente y había sangre en el suelo.

Mi mirada viajo por todo el lugar hasta llegase al fondo de la oficina donde estaba una persona alta con un atuendo de color negro y era completamente clavo.

Y a su lado estaba Slime qué estaba hecho un desastre su camisa estaba salpicado de sangre al igual que su cara, lucía tranquilo como si no le molestara nada.

Baje la mirada encontrándome con sus manos qué estaban llenas de sangre, comencé a asustarme tal vez ahora mismo estaba teniendo un ataque de pánico qué hacía qué alucinar cosas.

No podía moverme, era como si mis pies estuvieran pegados, nuestras miradas se conectaron y él me vio sorprendido.

No reaccionaba de modo que de mi boca no salía ni un sonido y mi cuerpo estaba estático, mi concentración estaba en la escena de terror qué tenía frente a mi.

Los hombres dejaron en el suelo al sujeto qué estaba inconsciente y fue tal impresión que ahora sí salí corriendo del lugar como podía.

Mis piernas seguían débiles, no podía correr bien y no conocía bien la casa logré recordar el recorrido qué hice de mi habitación a la oficina para regresar a mi habitación donde cerré la puerta con seguro, me deje caer al suelo porque mis pies colapsaron.

Unos segundos después escuche que alguien me llamaba y tocaba la puerta con fuerza.

— No quiero verte. — No hablé con mucha fuerza porque todavía tenía ganas de vomitar, jamás había visto algo así.

— ¡¡Abre ahora!! — Gritó con fuerza Slime dando un fuerte golpe a la puerta.

— ¡¡Vete!! —

Sabía con seguridad a que se dedicaba Slime, sabía que eres un traficante y que en ese negocio a veces eran peligrosos o eso era lo que veía en las noticias pero verlo de cerca.

Y más siendo una persona por la que tengo sentimientos, verlo lleno de sangre me dio una mala sensación por que esa persona es la que cuida de mi hija.

Fui al baño qué tenía en la habitación y vomité durante un buen rato. No podría nunca olvidar esa imagen, Slime lucia de forma aterradora como si no tuviera alma y lo había visto enojado pero esta vez fue diferente.

Limpie mi boca para que no hubiera rastro de vómito, escuche que la puerta se abrió de golpe y Slime entró buscándome.

— Por favor déjame explicar que es lo que viste. — Hablo con mucha más calma.

— No-o te... a-cerques a mi... — Mi respiración comenzó a acelerarse.

— Tranquilo, no te haré nada solo respira tranquilo. — Trato de tomarme de la mano pero yo me aleje de él como si su toque me quemara. — No te alejes, por favor tú no hagas esto. — Me tomó de la cintura con fuerza abrazándome tratando de tranquilizarme, yo le pedía que me soltara por que tenía su camisa todavía con sangre. — No me hagas esto por favor, no me alejes de ti, yo te amo. Y te necesito ahora más que nunca. —

Con solo mirar su camisa quería volver a vomitar y me sentía asqueado con su toque. — ¡Suéltame! — Volvía gritar con más fuerza y de forma contundente pero él no hizo caso para ahora tomarme del rostro pero sus manos seguían llenas de sangre.

— Te explicaré todo pero no quiero que me veas así. — Hablo con una voz dulce tratando de tranquilizarme, me dio un beso qué sólo fue un toque para que yo lo aleje. — Solo escuche, no quiero que odies, eres lo qué me mantiene cuerdo sin ti no puedo seguir con esto. Todo esto lo hice por ti... por nosotros... — Suplico con mucha insistencia dando caricias donde sabía que me gustaba.

No dije nada, solo Slime comenzó a hablar tratando de explicar qué era lo que pasaba. — Primero limpia tus manos antes de atreverte a tocarme. — Dije con repulsión, él me hizo caso comenzando a limpiar sus manos. 

Love In ContractDonde viven las historias. Descúbrelo ahora