-34- 🔞

702 73 10
                                    

⚠ Advertencia contenido +18 ⚠


Terminé de ayudar a Slime a bañarse después de la plática qué tuvimos, estaba más tranquilo pero aún así se veía triste, tome una toalla y guíe a Slime a la cama donde comencé a secarle el cabello con la toalla qué tenía en las manos.

Estaba parado frente a él, parecía que no quería hacer ni el mínimo esfuerzo en hacer nada, lo más seguro es que tendría que vestirlo también. Lo bueno era que se le había bajado su estado de alcohol era más fácil que me hiciera caso.

— Te pondré la pijama, debes de estar cansado. — Trate de girarme pero el me abrazo de la cintura impidiendo qué me moviera. — Por favor, hazme caso quiero que descanses. — No movió ni un solo músculo seguía abrazándome.

— Podría estar todo el día abrazándote de la cintura, quedan perfectamente... — Era como si hablara al aire. — Encajan perfectamente con tu cuerpo. — Al escuchar eso no pude evitar sonreír, me gustaba cuando sacaba a relucir su lado coqueto.

— Dejame ir por tu pijama y podremos seguir abrazándome. — Una de sus manos bajo a mi muslo qué estaba desnudo dejando algunas caricias. Como tuve que meterme a bañar con él me coloque un pantalón corto que quedaba a la mitad del muslo.

— Eres muy hermoso... — Sus besos comenzaron a besar mi abdomen desnudo haciendo que una corriente pasara por todo mi cuerpo con solo un roce. — Podría estar todo el día admirando tu lo lindo que estas, mi amor. —

Subí a sus muslos colocando mis manos en sus hombros. — Podría acostumbrarme a esta nueva faceta. — Sus labios siguieron recorriendo pero ahora mis hombros y pasando por mi cuello donde dejaba algunas mordidas qué sacaban un gemido de mi boca.

— Eres solo mío.. — Sus manos en mis muslos comenzaron a apretarlos y subiendo cada vez más tocando mi cadera qué tomó el control de mis movimientos haciendo que mi cadera se moviera en un tortuoso movimiento para los dos.

— ¿Puedo besarte? — No podía más con la necesidad de que sus labios y los míos se fundieran en un apasionado beso como si mi vida dependiera de eso.

— Si... — No deje que continuará cuando me abalance sobre él, nuestras lenguas se encontraron comenzando una pequeña pelea. Mis manos ahora estaban en medio de nuestros cuerpos donde pasaba mis dedos por su abdomen hasta llegar a la orilla de la toalla qué seguía teniendo. — Deberíamos detenernos... no seré capaz de detenerme. —

No habíamos tenido oficialmente sexo, compartíamos algunas caricias complaciendo os el un al otro pero no llegamos nunca hasta el final por que nos interrumpían o por que yo me apartaba. Recuerdo una vez que lo íbamos hicimos pero tuvimos que terminar rápido por que nuestra hija comenzó a hablarnos. Oficialmente ya no era nuestra primera vez, pero teníamos que ser cuidadosos.

— Yo también quiero hacerlo, no te alejare. — El beso continuó, me levanté un poco para quitarme el pantalón que tenía puesto y el bóxer.

Slime no se quedó atrás e hizo lo mismo, me indicó que me recostara pero no hice caso empuje dolo contra el sofá y me subí sobre él . Tomé un lubricante qué Slime compró hace mucho tiempo y condones, en todo ese momento no nos detuvimos y seguimos besándonos.

Coloque algo de lubricante en mis manos para guiarlas por en medio de mis glúteos tocando el punto exacto y meter un dedo.

— Yo puedo ayudarte, te haré sentir bien. — Trato de llevar sus manos pero le di un manotazo impidiendo qué se acercara.

— Yo... puedo solo.. dame tu mano. — Slime dejó de insistir y me dio su mano para que la tomará.

Seguí haciendo mi trabajo ahora metiendo el segundo dedo. Sabía que para Slime era un completo espectáculo, tenía los ojos creados y al abrirlo pude ver que en cualquier momento Slime podría lanzarse sobre mi.

— Amor ya no puedo aguantar más... — Me estaba rogando para que lo dejara tocarme.

— Ya p-ued-es me-terl-o. — No podía ni hablar de lo excitado qué estaba por la mirada de Slime. No pude reaccionar cuando Slime hizo qué ahora yo estuviera acostado y el entre mis piernas.

— Podía notar lo mucho que disfrutabas tocándote... — Tomo uno de los condones qué dejé sobre la cama abriéndolo y colocándolo en su entrepiernas qué estaba a punto de explotar. — Pero tranquilo amor, haré que veas las estrellas. — Pasó su lengua por mis labios de forma erótica y después volvió a besarme.

Comenzó a entrar poco a poco yendo lento para no lastimarme, mis manos apretaban las sábanas tratando de relajarme pero era difícil. Cuando estuvo completamente dentro de mí, dejó de moverse y se separó colocando sus manos a cada lado de mi rostro, no paraban de salir gemidos de mi boca.

— S-lime... — Su nombre salió de mi boca en un gemido, trataba de calmarme mordiendo mi labio, una de mis manos fue a su brazo y lo apreté con fuerza.

— Podemos parar, si así lo necesitas.. —


— Su voz era muy ronca por la excitación haciendo que casi provoca que saliera un gimoteo de mi boca. Slime dejó besos por todo mi rostro tratando de tranquilizarme.

— Mu-evete. — Fue lo único que salió de mi boca.

El ojiverde comenzó a moverse de forma lenta pero que llegaba muy profundo.

— Amor.... si sigues así despertarás a todos en la casa. — Sin darme cuenta comencé a gemir sin controlar mi volumen de voz haciendo que en el cuarto se escuchara más fuerte.

No podía formular palabras en ese momento, mi cuerpo estaba disfrutando tanto con cada movimiento que me volvería loco. Mi mano fue. Mi boca tratando de callar mis sollozos pero Slime inmediatamente la quitó.

— Yo soy el culpable de esto... — Su aliento estaba en mi oído sentía su voz retumbar en mi cabeza nunca olvidaría esto. — Así que yo callaré tus gemidos con mis labios, cariño. —

Volvimos a besarnos, en la habitación solo se escuchaban algunos gruñidos pero nada tan fuerte, y el eco del lugar hacía qué se escuchara el coche de nuestros cuerpos haciendo el ambiente más erotico.

Slime comenzó a aumentar la velocidad porque se estaba volviendo tortuoso para los dos, queríamos terminar ya.

Me di cuenta que estaba ejerciendo mucha presión en el brazo de Slime dejando un rasguño. Mis manos fueron a su espalda donde me sujeté fuerte. Estuvimos un buen tiempo así y no pude evitarlo pero fui el primero en llegar al orgasmo donde solté un fuerte grito qué fue callado inmediatamente.

Slime seguía moviéndose tratando de terminar, separó nuestros labios. — Aún no terminamos, cariño. — Saco un momento su miembro para girar mi cuerpo haciendo que le diera la espalda, volvió a meterlo.

Hace unos minutos había tenido un orgasmo así que mi cuerpo se sentía completamente sensible, Slime seguía embistiendo sin detenerse de forma rápida. Jale la sabana qué estaba debajo de mi y la mordí tratando de callar mis gemidos, sin poder evitarlo se volvió a parar mi entrepierna.

Mi cuerpo era un completo caos en ese momento, sus manos del ojiverde fueron a mi cintura para sostenerme fuerte.

El sudor caía de mi frente y sentía mi cuerpo pegajoso por el sudor de nuestros cuerpo, sentí mi cabello pegarse en mi frente, algunas veces Slime jalaba un poco de él para acercarse y darnos un beso. El ojiverde también comenzó a repartir algunos besos en mi espalda y mordidas.

Y después de fuertes embestidas los dos llegamos al clímax y yo por segunda vez, caí rendido, no pude escuchar ni lo que decía cuando mis ojos comenzaron a cerrarse.





_______________________

Gracias por su apoyo y me encantaría hacer más larga la historia pero como dije no tengo computadora desde hace días y estoy escribiendo todo desde mi celular pero no me siento cómoda. Se está yendo mi inspiración y no quiero dejar la historia a la mitad prefiero terminarla antes, lo siento.

Love In ContractDonde viven las historias. Descúbrelo ahora