Love In Contract

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La mesa estaba lista con todo tipo de platillo qué me gustaban y todos nos sentamos para degustar cada platillo.

— No debiste de hacer todo esto con algo sencillo me puedo conformar. — Era fin de semana Slime estuvo desde la mañana preguntando por mis platillo favoritos para que pidiera prepararlos.

— Tenía que hacerlo, quiero que te sientas mejor. — Su mano tomó la mía sobre la mía.

— Todos queríamos que fuera especial después de todo lo que has pasado queremos consentirte un poco. — Habló la madre de Slime.

— Si papá y yo hice un pastel. — Dijo emocionada, me sentía eran querido en este momento, no todos estaban muy pendientes de mí y me ayudaban en todo. — Te va a gustar mucho papá, ya quiero que lo pruebes, Papá Slime me ayudó a hacerlo. —

Desde hace años yo no tenía una verdadera familia, éramos mi hija y yo pero ahora tener este tipo de comidas donde todos compartimos cosas es especial. Hace cinco años o más no hablaba con mis padres, ellos me alejaron por completo de vidas, yo tampoco los quería ver porque estaba muy resentido por lo que me dijeron así que yo también me aleje de ellos.

El día en que me abandonó la madre de Juana traté de contactar de nuevo con ellos llamándoles o mandando algún mensaje pero no recibía sus respuestas. Fui a buscarlos pero nadie respondió cuando toque la puerta, estuve mucho tiempo esperando pero no había señales de que regresarán.
Encontré a una de mis antiguos vecinos que se acordaba de mi y le pregunté por mis padres, el vecino me afirmó qué ellos se mudaron hace meses de la casa y ya jamás pude volver a tener contacto con ninguno de ellos.

No me dijeron a donde estaban o donde podían haber ido, yo no tenía contacto con ninguno de mis tíos o algún familiar cercano qué me ayudara. Ese día fue muy difícil para mí porque me arrepentía de lo qué les dije el último día que les vi.

Recordar eso siempre me pone muy melancólico y más ahora rodeado de gente que me tenía mucho aprecio.

— Entonces, ¿ te gusta lo que preparamos? —

—Si me gusta mucho, gracias a todos. — Estaba muy sentimental por todo lo que pensé de mis padres lo mejor era cambiar de conversación. — Mejor comencemos a comer.

Todos comenzamos a comer, habían preparado algo especial para mi hija por que ella no podía comer de todo lo que había en la mesa.

— ¿Mañana saldrán a algún lugar? — preguntó la madre de Slime.

— Yo quería ir a algún parque, hacer un pequeño picnic pero no me ha respondido nada Slime, señora Miller. — Le respondí, este fin de semana quería salir un poco de la casa, me sentía abrumado pasar el día entero sin poder hacer nada.

— Olvídate de las formalidades, tu eres parte de la familia además me puedes decir suegra. A ti te considero alguien muy importante y a tu hija la veo como una nieta, espero no te moleste. — Dijo amable y yo me sonroje por lo que dijo.

— No me molesta en lo absoluto. —

— Es que quería invitarlos a ir de compras para el cumpleaños de mi nieta, quería comprarle su vestido o por lo menos ir a ver algún de su agrado. —

— Yo quiero que sea de princesa. — Mi hija estaba emocionada cada que podía nos recordaba que faltaba cada vez menos para su cumpleaños.

— Por eso tenemos que ir a buscarlo y quiero también enseñarte algunos de los salones qué podríamos hacer la fiesta. — Como estuve lastimado no me dio tiempo a ver nada, no tenía ubicado qué lugar podía rentar para una fiesta.

— Muchas gracias, con todo lo que pasó me olvidé un poco. — Hable avergonzado.

— No te preocupes por eso me tienes a mi para ayudarte. —

— Tú qué dices Slime, ¿puedes ir al parque? —

— No, trate de hacer algo de espacio pero tengo muchas juntas. — Slime fue el de la idea del picnic pero ayer se retractó porque no sabía si tendría trabajo. — Puedes ir con mi madre y trataré de terminar temprano para alcanzarlos. Quiero ver todos los lugares además de los vestidos, mi hija se merece el mejor. —

— Podría ser uno con muchos juegos para llevar a mis amigos. —

— Así será princesa. —

— Te mandaré la ubicación cuando salgas porque tú también tienes que comprar un traje para ese día. — La madre de Slime se veía muy emocionada y tenía claro que estaba al tanto de todo lo que se tenía que hacer para la fiesta.

— Si, saldré tal vez a medio día. Mañana tendré una junta con mi padre. — Nos quedamos callados porque no sabía que decirle, sabía que esa era una mala idea y más después de que Slime me contará qué su padre nunca confío en él para ser el jefe o eso es lo que le dijo Foolish. —

— Hijo, tal vez será mejor que no lo hagas. — La madre de Slime no tenía buena relación con su esposo, platique muy poco con ella de eso pero dejo entre ver que la tratan mal por eso estaban distanciados. — No vale la pena. —

— Tranquila mamá, será solo una conversación y no pasará nada. —

— Tu mamá tal vez tenga razón, podría lastimarte mejor no vayas. —

— Será mejor que canceles todo. — Dijo su madre que se veía preocupada al igual que yo.

— Ustedes... — Lo interrumpí antes de que siguiera hablando.

— Cancela la cita con tu padre y venís con nosotros. —

—Tienes que hacernos caso... — Slime dio un golpe fuerte en la mesa dejándonos en silencio a los presentes mi hija se asustó

— No vuelvan a decirme que hacer, ya no soy un pitó niño para que me manden. — Habló con frialdad, estaba tan asustada mi niña que empezó a llorar, me levanté con rapidez para tomarla en mis brazos tratando de tranquilizarla. — Lo siento, no quería alzar la voz es solo que se lo que hago. Perdoname hija, no quería hablar de esa forma. —

No quise escucharlo y me fui tratando de tranquilizar a mi hija, mi suegra fue detrás de mí.