Nuestra rivalidad perfecta

CAPITULO 4

Kayla

No me lo podía creer ¿Que hacía aquí a tan solo unos metros de nosotros?

— No puede ser — Dijo Kyle.

— ¿Le has dicho que veníamos aquí? — Le pregunté a Kyle.

Jane y Keyla estaban boquiabiertas, no se les cayó la mandíbula al suelo porque era físicamente imposible, Keyla me miro y lo volvió a mirar.

— Que va — Me dijo y negó con la cabeza — Me habrá oído hablar con mi madre ayer o nos habrá oído a nosotros.

— Joder ¿Que dan de comer en Inglaterra? — Dijo Jane mirándole de arriba a abajo.

— Dijiste que no estaba tan bueno — Me dijo Keyla en un susurro acusador para que no nos oyera Kyle.

Vale, si se veia increíble con el bañador, pero nunca lo admitiría en voz alta, sus abdominales estaban definidos y sus oblicuos marcados, llevaba unas gafas de sol negras que tapaban sus ojos verdes, había cambiado mucho en estos dos años, Liam y Hunter eran sus mejores amigos, también eran guapos, pero nunca me llamaron la atención especialmente , aunque a lo mejor eso tenia algo que ver con Nash.

Kyle parecía sentirse mal, de un momento a otro venía hacia nosotros, Jane se volvió a colocar las gafas y Keyla parecía eufórica.

— Vaya vaya, mira que coincidencia — Se quitó las gafas y me miro de arriba a abajo, Liam y Hunter se quedaron atras de él.

— Si, una coincidencia fantástica — Dije — Nótese el sarcasmo — Añadí al final.

El simplemente se rió.

— ¿En serio? ¿Cómo has sabido que veníamos aquí? — Le pregunté.

— ¿Que pasa cariño? — ¿Cariño? ¿En serio me estaba llamando cariño? — ¿No ha podido ser una coincidencia? — Me pregunto cerca de mi, Jane y Keyla miraban la escena, Jane con un poco de disimulo, Keyla sin ninguno.

— Pues no

— ¿Y se puede saber porque vendría yo a la playa por ti? — Me pregunto en un tono arrogante.

Idiota fue la primera palabra que me vino a la mente ¿Porque tenía que ser tan arrogante, creído y egocéntrico y a la vez tan guapo? Le odiaba realmente le odiaba.

— Ayer os escuché — Dijo cuando me iba a dar la vuelta cansada de escucharle — Además a mí hermano le encanta restregarme en la cara que pasa mucho más tiempo contigo que yo — Dijo mirando a su hermano, Kyle estaba mirándole mal, tanto que parecía como si le estuviera tirando cuchillos por los ojos.

Con eso dicho se fue con sus amigos a otra parte de la playa más lejos y después de un rato estaba mucho más lejos de nosotros, por alguna razón sentia que mi corazón recuperaba el aire y volvía a latir normalmente no aceleradamente como antes.

— Pensé que no le habías dicho nada — Le dije a Kyle pero sin enfadarme.

— Y no se lo he dicho — Me dijo despreocupadamente — De verdad que no — Me dijo mirándome — Ya sabes cómo es.

En realidad no lo sabía.

— Yo no sé cómo será, pero está como quiere — Dijo Keyla — No te sientas mal — Le dijo a Kyle al ver que la miraba.

Kyle parecía sentirse mal y me acordé de lo que me dijo antes, cuando estábamos de camino.

— Tal vez pero nadie le quita lo odioso — Dije para que se sintiera mejor — Ni lo arrogante — Añadí al final.

Después de un rato a las 8 llegue a casa, mama y papa estaban preparando la cena y Cam estaba poniendo la mesa.

Subí a mi cuarto y cuando llegue miré por la ventana, ni siquiera sé por qué hice, no lo vi en su cuarto, pero sí que vi a Hailey en el jardín jugando con sus muñecas.