Halle no tenía la menor idea de lo que estaba pasando, con un repentino plof, Darl apareció en sus brazos.
Las wiccas comenzaron a vitorear de nuevo, mientras Darl repartía besos a diestra y siniestra.
- ¿Como aprendiste a mandar besos de esa forma? - Halle le preguntó totalmente desconcertada.
- Rubio... - Darl señalo la mesa donde estaban Niall y Fernanda, ambos bajaron la mirada al conectarla con Halle.
- Al menos les sigues agradando.
- Si - Dijo muy orgulloso el pequeño elfo.
- Presumido - Le susurró Halle antes de darle un beso en la mejilla.
- Srta. Darlyn - Volvió a llamarla Igor Ackerman
- ¿Si?
- Solo suba al jodido podio.
Halle solo suspiro con fuerza y se dedico a caminar a través de la multitud de personas, jamás en su vida había visto tantas personas reunidas, ni siquiera cuando sus tías hicieron la locura de abrir una casa embrujada en Hammelin... Halle se detuvo un momento ante esos pensamientos, ni siquiera había hablado con sus tías después de aquella carta tan inesperada.
- La estamos esperando Srta. Darlyn - Halle por fin observo como todos la contemplaban con una sonrisa de oreja a oreja, mientras que el hombre alto y rubio parecía a punto de explotar.
William Rohde observaba la escena con una sonrisa, vaya que Halle Darlyn era demasiado divertida.
- Es interesante - Le susurra a un chico ruso quien solo se encoge de hombros al no entender el inglés.
- Lo siento - Halle esta vez no se quedo parada a medio camino, camino hasta el podio, donde estaban algunos magos, brujas y hadas, ninguna wicca con su elfo salvo ella estaban ahí.
- ¡Ya tenemos a los 15 concursantes de los juegos mágicos!
- ¿¡Qué?! - Grito con horror Harry Styles desde la entrada del gran comedor, al mismo tiempo que Halle abrió tanto sus ojos de la impresión que pareciera que se saldrían de sus orbitas.
Nadie se dio cuenta de los gritos de exasperación del joven Styles o de la mirada de becerro condenado al matadero de Halle Darlyn.
- ¡Un momento! - Eine Handel se alzó entre la trifulca de aplausos.
David se puso totalmente pálido al ver la actitud de su hermana. con un asentimiento, Maritza le indico que debía ir con la problemática wicca.
Igor Ackerman observo con desdén a la hermosa Wicca que se alzaba, algo dentro de él, le decía que esa chica, sería un peligro.
- ¿Quién es usted? - Ackerman no simulo ser amable en lo absoluto.
- Mi nombre es Eine Handel...
David le hizo una seña para que guardará silencio, pero Eine negó, llevaba años soportándolo, no más, alguien tenía que alzar la voz.
- ¿Por qué ha llamado a Halle Darlyn a ser una de los jugadores? - Eine cuestionó la autoridad de la orden - Habían dicho que ninguna wicca participaría.
Igor Ackerman casi entra a un colapso mental, mientras las demás wiccas asentían, no estaban en contra de Halle Darlyn, sino a su favor.
- Porque me han dicho que la Srta. Darlyn tiene un talento demasiado bueno para desperdiciarlo.
- Si se refiere a meterme en problemas - Halle interrumpió la conversación - Él se lleva el premio - Señalo a Harry quien solo articulo un "¿Qué?"
- No me refiero a eso Srta. Darlyn - Igor se acerco a paso lento a ella.
- ¿No? - Halle Darlyn podría ser un problema, pero esa wicca era demasiado ingenua para su propio bien.
- No - Susurro Ackerman. La observo detenidamente - Lindo elfo - Le dijo sonriendo malévolamente al Darl, quien solo se escondió en los brazos de Halle.
- Todos aman a Darl - Halle se encogió de hombros.
- Haz algo Styles - Le susurro Louis Tomilson situándose a su lado.
- Esta vez, estoy de acuerdo con Louis, si no cierra la boca rápido, Igor la hará pedazos - Liam parecía estar muy nervioso.
- ¿En qué momento llegaron? - Harry los observo con el ceño fruncido.
- Justo en el que dijo que era el mayor problemático de todo Charmed School, si no es que de Alemania.
- O de toda Europa - Concordó Liam con Louis.
- ¿Por qué todo el mundo dice eso? - Harry estaba exasperado y un poco dolido por las comparaciones.
- No se diga cuando la pequeña pelirroja está contigo... Colapsarían el mundo mágico y el mortal en cuestión de segundos - Louis lo abrazó por los hombros.
- ¿Algo más que quiera decir Srta. Darlyn? - Halle estaba a punto de decir que se encontraba hambrienta, pero Harry susurró un pequeño hechizo que podría callar hasta las hadas en el equinoccio de primavera.
- Si... - La boca se le cerró por completo, no podía emitir sonido alguno.
- Dígalo Srta. Darlyn - Pero Halle no tuvo más remedio que solo negar con la cabeza - Si alguien más aparte de la Srta. Handel, quiere cuestionar las decisiones de la orden hable ahora o calle.
Todos los estudiantes, simplemente guardaron silencio, Halle lo hizo, solo porque tenía un hechizo sellador, pero ella no quería participar en lo absoluto en los juegos.
- Pido un aplauso para los quince héroes que darán la gloria a su colegio, algunos saldrán victoriosos - Observo a William Rohde que estaba de lo más divertido viendo como Darl, trataba de ayudar a despegar los labios de Halle - Otros simplemente morirán - Detuvo su mirada en Halle, quien por fin logró despegar sus labios - Mucha suerte - Los aplausos no se hicieron esperar, mientras Halle solo fruncía el ceño a Harry Styles.