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CAPÍTULO VEINTE🍁 Su aura y la mía (2)

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CAPÍTULO VEINTE
🍁 Su aura y la mía (2)

No había registro en mi memoria de haber asistido alguna vez a una boda

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No había registro en mi memoria de haber asistido alguna vez a una boda. Quizás cuando era pequeña. No recuerdo. No obstante, estaba segura que nada se compara al escenario que veía ante los ojos.

El campo de la posada relucía en un verde perfecto y el cielo celeste en conjunto al sol en la cima del cielo lo hacía todo incluso más mágico. Las flores, los aromas, las personas bien vestidas. Todo se veía de ensueño y yo me sentía en una nube.

De considerar alguna vez contraer matrimonio, así es como quisiera que se vea todo. Eso incluía también a los ciudadanos bochornosos que ahora se reunían y cantaban reunidos en un piano. Mi madre los amaría, nótese el sarcasmo.

Esto es lo que quiero. Es el lugar correcto, me dije.

Tal vez estaba drogada y no lo sabía. No importa, me sentía de maravilla.

—Dios santo, todo se ve tan reluciente que me siento fuera de lugar —habló mi padre, enviando saludos a diestra y siniestra. No es el médico del pueblo por nada.

Mientras tanto yo lloraba por encontrar a alguien con quien pasar las horas.

—Hola —Una preciosa y educada Rory Gilmore se detuvo frente a mí en compañía del odioso de su novio colgado de su brazo igual a una garrapata. No lo veía desde ese viernes por la noche cuando le dije un par de verdades—. Te ves increíble —me alagó, siempre tan amable. A veces desearía que no lo fuera, que me dijera que estaba fea o que se yo. Pero ahí estaba ella, siempre noble, siempre correcta.

—Oh... Muchas gracias —sonreí, solo a ella—. Me gusta mucho tu vestido, ese sin duda es tu color —¿Para qué mentir?

—Sookie eligió el color para las damas de honor.

—Ah, ya veo —No es incómodo... para nada—. Buena elección.

Entonces, cuando esperaba por un milagro, este apareció en el cuerpo de un chico guapo.

—¡America! —Se sorprendió Ash—. Pensé que... Vaya, te ves preciosa.

La sangre subió a mi cabeza en dos palpitaciones de mi corazón.

The reason | Jess MarianoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora