HELL.
Sabiendo que Astaroth no puede verme, salgo del clóset sin hacer ruido, dado que Isaac continúa haciendo su magia allí dentro y cierro detrás de mí, avanzando casi al instante hacia la enorme ventana de la habitación que estoy ocupando con el mero fin de observar al demonio que me rompió muy molesto por no conseguir lo que deseaba y ser echado como un objeto viejo y sin valor del castillo de su más grande enemigo, totalmente humillado ante los guardias reales y demás demonios que merodeaban el terreno de la propiedad de Lucifer.
Me encantaría haber podido observar la manera en que fue echado de aquí, pero me conformo con verlo así de molesto y lleno de polvo.
Sube a lomos de la enorme criatura demoníaca y voltea a ver en mi dirección sintiéndose observado, pero frunce el ceño al no encontrar a nadie en la ventana. Acaricia el animal con la forma de un dragón sumamente aterrador, más de lo que las películas y series muestran, emprendiendo este el vuelo.
Cuando me vengue, voy a quedarme con esa bestia y volar sobre ellas unas horas antes de volver a mi mundo. Ahora que lo pienso, si asesino a Astaroth, yo sería la nueva soberana de los territorios sobre los que gobierna y me vería obligada a regresar aquí cada tanto a verificar que todo esté yendo bien y a dejar nuevas instrucciones.
O al menos eso creo.
Aunque tengo mis dudas al respecto, no soy un demonio completo y dudo que los Duques vayan a consentir que una mestiza sea su nueva señora.
Astaroth se aleja tanto del castillo, que el enorme dragón demoníaco parece un simple mosquito en el rojo firmamento, suelto un suspiro cargado de alivio y segundos después entra el príncipe Lucifer a la habitación y se acerca al armario y abre sus puertas.
—Amor, ya puedes deshacer el hechizo de invisibilidad y protección —murmura con un tono de voz dulce que contrasta demasiado con el que utilizó con Astaroth. Veo chispas de color plata a mi alrededor y sé que ya no soy más un fantasma—. Estoy muy orgulloso de ti, cariño e hiciste un gran trabajo.
Vuelvo a suspirar al ver como Isaac se echa a los brazos del demonio de dudoso sexo y este le acaricia el rostro con tanto amor y devoción que me recuerdan a todas las parejas destinadas que vi en mi clan y a Arthur y a mí.
—Me preocupó mucho que ese desgraciado te intentara hacer algo, sabes que nunca me ha agradado ni un poco. Sin embargo, escuchar cómo lo ponías en su lugar me trajo mucha paz y alivio, mi lucero de la mañana —le dice Isaac con el mismo tono que utilizó el demonio para hablarle—. Yo también estoy muy orgulloso de ti, hiciste un excelente trabajo, mi amor.
¿Isaac estuvo todo ese tiempo escuchando la plática? Bueno, no me sorprendería si se hizo con magia algunas modificaciones, porque hasta donde leí en libros antiguos que encontré en la biblioteca de mi clan, los hechiceros son seres inmortales, pero son la especie más parecida a los humanos al no poseer sentidos desarrollados como las demás especies.
O al menos eso decían los textos antiguos, le pediré a Isaac que me aclare eso, bueno, si decide responderme esa pregunta, dado que la última que le hice no la contestó y no le preguntaré esa tontería a Lucifer, creerá que soy una tonta y me entregará a Astaroth y esperará a que este me asesine y consiga una nueva esposa para llevar a cabo sus planes al ofrecerle libertad.
Así que no respiro ni hago el mínimo movimiento que los haga salir de su burbuja de amor y por lo que veo, pasión. Espero que no tengan sexo estando yo aquí, es lo único que pido mentalmente.
—Pronto estará muerto, mi príncipe, así que no tiene que preocuparse por ello —musita con un tono de voz bajo Lucifer—. Sabes bien que lo no quito de mi camino porque podría haber una rebelión de duques al pensar ellos que estoy abusando de mi poder y pese a poder mantenerlos a raya, es muy tedioso y no tengo ganas de lidiar con ellos. Por lo tanto, es preferible darle a Hell las herramientas necesarias para que lo haga por mí y se vea más como una venganza, puesto que, en parte lo es.
![](https://img.wattpad.com/cover/332621748-288-k644162.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Secretos Oscuros © [LIBRO I]
Viễn tưởngLibro 1 de la bilogía Oscuros. Enigmático, cautivador, inteligente y sexy. Sí, así es mi jefe Arthur Youngblood, el CEO de Bloodflowers. Cuando sonríe pone mi mundo de cabezas y en el momento en que me observa, lo hace como si me quisiera comer y di...