Si Rachel no hubiera ido con Stefan.

Extra VI: Cita con papá | pt. 1

Christopher.

Salgo de la oficina, pasando de largo a la secretaria con los papeles en la mano. Siento la sangre caliente por lo que acabo de presenciar, y es peor cuando recuerdo las mejillas encendidas de mi hija.

—Ministro...

Sigo avanzando, hasta que llegó al área de cadetes, todos han retomado sus actividades, pero veo al mocoso idiota intentando acercarse a mi hija como...

—Ministro —la profesora se pone firme—, ¿Quiere que llame a la Señorita Morgan?

Asiento sin dirigirle la mirada, sigo viendo al mocoso, Milenka se va a otro lado y él idiota la sigue cuál perro.

La profesora va a llamarla y en cuanto lo hace, me dirige la mirada y se pone pálida, sale como se le indica, recogiendo la mochila en los casilleros dentro del aula, avanza, dedicándome el saludo correspondiente.

—Avance, soldado —lo hace, aún firme, hasta que la hago caminar al estacionamiento.

Ahí es cuando se lanza sobre mí, dándome un abrazo y un beso en la mejilla.

—¿Veniste por mi para ir con mamá y mis hermanos?, Quizá...

—¿Por qué coño andas dejando que él idiota ese te bese? —siseo—. Te dije que...

—¡Lo empuje! —chilla, las mejillas encendidas me hacen molestar más—. Y le dije que ya no se me acercará.

Le sujeto el mentón, el calor se esparce por todo su rostro, parece que...

—Subete.

Frunce los labios, me rodea el cuello con los brazos para que la levanté, y aunque no quiero, lo termino haciendo.

—Papi, no te enojes conmigo —parpadea—, yo no quiero a los niños, me caen mal todos, menos tu, pero...

—Subete ya —la suelto, pero ella se aferra—. Milenka...

—No te enojes...

Ruedo los ojos, lo toma como que ganó, por lo que me suelta, subiendo al lado del copiloto del auto, abordo el mismo después de respirar hondo.

Ella comienza a parlotear, hasta que llegamos a la casa, dónde corre hacia la habitación donde están su madre y sus hermanos viendo una película en la sala de cine.

Aunque Rochelle está dormida, Owen sigue teniendo la cara de náuseas y Olivia en vez de prestar atención a lo que ve, tiene las manos llenas de pintura sobre la tela blanca con la pintura de un atardecer. Rachel revisa la temperatura de su hijo con la niña en sus brazos. Ni siquiera sé cómo lo hace.

Entro, dándole un beso que hace a Owen bufar, como si me importará. Tomo a Rochelle y le alboroto los rizos a Olivia, a Owen le hago una mueca que él responde de la misma manera antes de que salga.

Llevo a Rochelle a su habitación y después voy a mi despacho, libero el resto de mi día y hago una reservación en el restaurante que le gusta a Milenka.

¿Quieres salir...?

Hice que la profesora lo llamara antes de terminar de hablar.

Maldito mocoso. Lo único que va a obtener va a ser una salida de la academia por pretender a mi hija. Y encima, por besarla sin su consentimiento.

Tomo el telefono para escribirle a Rachel, pero la última imagen me hace detenerme. Joder. En la mañana no la ví por qué se levantó más temprano que de costumbre, y yo salí tarde... Por eso tengo una foto de Rachel desnuda frente al espejo del baño, no hubo respuesta de mi parte por qué le hice una videollamada.