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Parpadeé de nuevo y cuando abrí los ojos, Satoru seguía mirándome de la misma forma

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Parpadeé de nuevo y cuando abrí los ojos, Satoru seguía mirándome de la misma forma. No era un sueño. Inconscientemente, sonreí. 

-¿Que no decidimos que volveríamos a los 30?

-Maa... Tenía que sacarte de tu idiotez de alguna forma. Y las formas convencionales no funcionaron. -Satoru se encogió de hombros, de hombros. El atrevimiento. Debatí si darle un zape o patearlo, pero finalmente suspiré. 

-Si vas a hacerlo al menos hazlo bien. -murmuré. Y cuando sus ojos se abrieron asombrados, sonreí y lo atraje para darle un profundo beso. Me separé cuando nos quedamos sin aliento y dejé de estar de puntillas. -Maldita sea, Satoru. No deberías ser tan alto. Maldigo tu genética. 

Él tuvo el descaro de reír. Hinché mejillas y lo pateé en la espinilla. Sentí la satisfacción en mis entrañas cuando aulló de falso dolor e hizo una mueca.

-Tan cruel Airi-chan. Y sabes que te gusta que sea más alto que tú. Porque puedo hacer esto. -y como si fuese pan de cada día, me levantó la barbilla y me dio otro beso. No pude evitarlo, sonreí.

-Tal vez. -admití a regañadientes en sus labios. Noté los suyos curvarse en una sonrisa. 

-Por supuesto que sí. 

-Y ni te atrevas a llamarme Airi-chan en público.  -susurré tras atraerlo agarrándole la parte trasera de su cabeza. Suaves mechones de cabello erizando mi piel. Maldición, tendría que pedirle la marca del champú. Su pelo era aún más suave que cuando éramos jóvenes, y eso ya era decir mucho. Mi estúpida pareja tenía el cabello con la sedosidad del terciopelo.

-Trato hecho, cariño. -murmuró de vuelta. Sonreí por quinta vez en quince minutos, un nuevo récord de los últimos diez años. -Tenemos que ir. -murmuró de nuevo. Suspiré y solté su esponjoso cabello.

-Tienes que darme la marca. Es tan suave...

-Genética, Airi, genética.

-Genética tu madre.

-¡Qué lenguaje más grosero!

-Por favor, has escuchado cosas peores salir de la boca del director Yaga. Y no cambies de tema, sé que tu cabello no era tan suave cuando salíamos hace años. -entrecerré ojos en su dirección. -Así que ya puedes ir revelando tu secreto.

-No sabía que le prestabas tanta atención a mi cabello y que lo recordases tan bien... ¡Sabía que en el fondo me amas! Tan bonito de tu parte Airi-chaaaan.

-¡Deja de burlarte de mi estúpido anciano!

-¡Oye! ¡Nací así! ¡Discriminación a los lindos albinos!

-Por favor Gojo, todos sabemos que si tuvieras unas cuantas arrugas te verías viejo.

-Te atreves a cuestionar mi belleza... Cruel, Airi, cruel.

𝐈𝐋𝐋𝐔𝐒𝐈𝐎𝐍 [JJK] ˢᵃᵗᵒʳᵘ ᵍᵒʲᵒDonde viven las historias. Descúbrelo ahora