La chica nueva / soy luna

1. La llegada

– Luna entiende que no es que sea celoso, pero me molesta que siempre sea el guitarrista al que escoges primero, estoy cansado ya, de que siempre me dejes en segundo plano y yo siempre tenga que arreglar las cosas– Grita Matteo en medio de la discusión que tenía con su pareja.

– No te estoy poniendo en segundo plano Matteo, pero, Simón me necesita– Se queja la castaña

– Si, yo también te necesito pero parece que tú no te das cuenta, estoy harto de esta situación Luna, si no empiezas a poner de tu parte yo ya no pondré de la mía– El italiano toma el suéter del asiento de los lokers y se retira con el ánimo por los suelos.

Pues nunca le ha gustado pelear con su novia Luna, pero últimamente solo parece que hacen eso, pelear, cuando tienen un momento lindo y tranquilo, siempre llega algo en dónde comienza una nueva discusión y ese lindo momento se rompe.

Camina por el parque sintiendo miles de emociones en el pecho, con tantas emociones una canción podría salir de ellas pero no estaba de humor para componer en el momento, absorto en sus pensamientos choca con alguien.

– Lo lamento, no te vi– se disculpa con la persona y la ayuda a levantarse del piso.

– Me doy cuenta– está vez la voz de la chica se escucha y por primera vez Matteo le pone atención, viendo que había maletas por el piso y había una abierta decide agacharse con la chica para ayudarle a levantar sus cosas del piso del parque.

– De verdad lo siento, no era mi intención– dice metiendo unas prendas a la maleta que se había abierto.

– No te preocupes de verdad, los accidentes pasan– mientras recogen la ropa matteo se cruza con algunas prendas interiores que no debería de estar viendo pero que se le quedan en la imaginación, pero el celular de ella suena y saque de aquel trance al italiano.

–Was ist los, Vater ,ja ja, ich bin schon in Argentinien, ich werde in ein paar Minuten dort sein –(que tal padre, si si ya estoy en argentina, ya Estaré allí en unos minutos.)– colgando la llamada y volviendo a lo que estaba se dió cuenta de la prenda que Matteo tenía en sus manos, por lo que se la arrebato y con más rapidez recogió sus cosas.

– Ese idioma lo he escuchado, dónde lo he escuchado– se empezó a cuestionar el italiano en voz alta.

– Soy Alemana a lo mejor por uno de esos lados los has de ver escuchado.

– Wow Alemana, hablas muy bien español como para que no se note tu acento

– Si bueno mis padre es alemán mi madre es argentina y si te sigo contando el árbol genealógico de mi familia nunca acabaré y nunca llegaré al hotel. Ya con la maleta por fin cerrada se levantó y comenzó a caminar sin siquiera despedirse de aquel chico que la choco.

Matteo aún cautivado por aquella chica se levantó unos segundos más tardes pero cuando volteo a verla ya está muy lejos, para cuando se fijó en el camino, vio que de su bolsa de mano se resbaló un paliacate negro, corrió para recogerlo y entregárselo pero con el mar de gente pasando por el parque, le perdió el rastro.

Sin saber el nombre de aquella chica más que sabiendo su origen guardo aquel paliacate en su bolsillo trasero y camino de vuelta al roller, pues en los minutos que había estado afuera pasaron muchas cosas y con ellas se dió cuenta que olvidó sus patines.

En cuanto llego al Roller se topo con su mejor amigo Gastón quien ya conociendo lo mejor que la palma de su mano, decidió seguirlo hasta donde se dirigía el italiano para interrogarlo.

– A ti que te pasa, ¿hoy hay eclipse en el mundo de matteo?– haciendo referencia al nombre de su novia

– No hermano está vez no es así, en parte si, pelee con ella pero hay otra cosa, hoy choque con una chica.

– Me parece a mi o se te están pasando las costumbres de tu noviecita– se burla Gastón sin escrúpulos.

– No,no, para nada, simplemente iba metido en mi mundo y me choque con una chica rubia, de ojos verdes y con una mirada penetrante.

– ¿Si te acuerdas que estás de novio verdad?– cuestiono Gastón pues como bien se dijo el conocía mejor que nadie a su amigo y justo estaba pasando lo mismo con aquella chica como lo que pasó con luna.

– Si si ya se, pero eso no es todo, es alemana y al caminar de su bolsa se le cayó esto– de su bolsillo trasero saca el paliacate.– pero no pude alcanzarla, me contó que su padre era alemán y su madre argentina, y todo eso se originó porque empezó a hablar en el idioma de su padre– hizo una pequeña sonrisa.

– Mira no te voy a decir mucho pero si te voy a decir que si piensas tener algo con ella primero termines a Luna, recuerda como salieron las cosas de mal con Ámbar.– aconsejo Gastón acertadamente.

– Si si ya se, pero la acabo de conocer, nisiquiera se su nombre, solo le quiero regresar el paliacate, es todo, después de eso, no habrá comunicación alguna– dijo no muy convencido.

– si claro, vamos por un jugo? – dijo cortando el tema Gastón de una pues en el roller cualquiera se podía enterar de este asunto y a matteo no le iría tan bien.

– Si claro vamos, pero si llega luna, dices que tenemos que ir a ver algo de la universidad, ahorita mismo no quiero discutir con ella– Gastón solo asintió mientras caminaba hacia la cafetería del roller.

Narra tn

Llegando al hotel que me había indicado mi padre, me acerque al mostrador para pedir la habitación que me había dicho semanas atrás mi padre.

– Buenas tardes, hay una habitación a mi nombre.

– Nombre y apellido por favor

– tn Darían Uribe– sonreí tímida.

– Si justo aquí la tengo, si gusta acompañar al botones y darle sus pertenencias para que pueda guiarla hasta su cuarto por favor.

– Claro muchas gracias – siguiendo las instrucciones de la recepcionista siguió al botones y después de unos cuantos pisos arriba llegaron al cuarto indicado, dejando las maletas a un lado del pasillo y después de que tn le diera propina al botones por haber subido sus maletas, el mencionado se retiró.

– Que tenga linda estancia en el hotel, le recordamos que existe el servicio al cuarto para mayor comodidad de usted y si necesita algo los número de los recepcionistas están en la parte baja del menú, sin más que decir, linda tarde– se dejó de reproducir un audio pre grabado en cuanto cerró la puerta de entrada.

Examinó todo el cuarto, tenía lo necesario para vivir ahí mientras estuviera en argentina. De nuevo su teléfono volvió a sonar.

– Hola linda, ya llegaste al hotel– hablo su madre desde el otro lado del teléfono.

– Si madre acabo de llegar, supongo que tendré que desempacar ahora que no tengo nada que hacer.

– me parece bien, linda mañana a las 9 Matías llegará a tu cuarto de hotel, te llevará a conocer unos lugares y luego te llevará a la pista en dónde tienes que entrenar, por favor trata de mejorar esos saltos, sabes cómo se pone tu padre al respecto.

– Si lo sé, entrenaré demasiado para que pueda regresar a Alemania lo antes posible.

– Por cierto, dile a Joshua que deje de venir a la residencia, desde que te fuiste no ha dejado de venir cada hora.

– Si lo siento madre, yo hablaré con el, solo por favor no le digas en dónde estoy.

– De acuerdo, si sigue viniendo para mañana, haré que los escoltas se lo lleven.

– Si madre está bien.

– Hasta pronto– y con eso su madre corto la llamada sin siquiera poder despedirse, eso la hizo suspirar