Capitulo 20

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A la mañana siguiente Kakashi, Sasuke y Sakura se levantaron temprano junto con Tazuna para acompañarlo y protegerlo en la construcción del puente, todos desayunaron con excepción de Inari y Naruko.

-Kakashi sensei no deberíamos despertar a Naruko?- pregunto Sakura

-Talves lo mejor será dejarla descansar por ahora Sakura, el puente casi está terminado y nos tenemos que dar prisa para acompañar a Tazuna- respondió kakashi

-Oye Tsunami como se encuentra Inari?- pregunto Tazuna

-El aun esta algo triste por lo de anoche creo que es mejor dejarlo tranquilo por hoy papa- respondió su hija.

Mientras esos cuatro se marchaban Zabuza ya había empezado con su plan. Él y Haku estaban en una barca con la cual se estaban acercando al puente. Mientras hacían eso Gatoh intentó ponerse en contacto con ellos por radio y no estaba siendo muy amable. Zabuza se estaba hartando ya de ese hombre y se dijo que lo mataría después de acabar con Kakashi, así que por eso mismo coge la radio y de un golpe con el pie la rompe.

-Vamos, Haku hay que terminar con esto de una vez – dice el espadachín mirando al chico, el cual se había colocado la máscara ANBU.

-Zabuza yo... queria preguntarte que es lo que piensas sobre lo que dijo esa chica Naruko- pregunto Haku

-No me importa lo que una niña de la hoja opine esta es la vida que elegi- exclamo Zabuza

-Aun asi a ella parecía importarle lo que ocurriera con nosotros talves vale la pena pensar en esto- dijo Haku con algo de preocupación a lo que Zabuza solo vio fijamente al chico de la máscara con un rostro de hartazgo y enojo

-Escuchame Haku quiero que te quede muy claro esto yo decidi aceptar este trabajo asi como decidi tomar este estilo de vida por una razon, porque estoy dispuesto a llegar hasta el final de mis dias como lo que soy sin importar nada. Sabes que sino estas de acuerdo con esto entonces..- hablo Zabuza sin embargo antes de terminar de hablar fue interrumpido

-Entiendo de lo que habla Zabuza si quiere continuar con esto yo lo seguire sin importar que, asi como usted yo también tome mi decisión de ser su herramienta hasta mi último dia- respondio Haku con voz decidida a lo que Zabuza se calmo un poco.

Los dos ya habían llegado al puente y vieron como varios trabajadores ya habían empezado con el trabajo. Era hora de empezar.
Naruko abre los ojos despacio, pero enseguida se yergue con los ojos muy abiertos.

- ¡Me dormí, de nuevo! – grita y se levanta del futón para asomarse a la cocina -. Hey, ¿dónde se fueron todos?

- Oh, Naruko-chan – dice Tsunami girándose para mirar a la chica

-. Tu maestro dijo que deberías descansar todo el día.

- No puede ser, debo nuevo no tebane!!- grito Naruko algo enojada

-¿de nuevo?- Preguntó la hija de Tazuna

Despues de eso Tsunami le contó que todos se habían ido y la habían dejado descansar que ella rápidamente se vistió y se arreglo para ir detrás de ellos, no sin antes recibir una disculpa por parte de la madre de Inari por lo ocurrido con su hijo la noche pasada

-No es necesario que se disculpe señora yo fui algo brusca ayer con el, lo lamento- dijo Naruko algo apenada

-Inari también fue bastante descortes anoche el ha pasado por mucho y aún no supera la muerte de.. bueno solo quiero que entiendas su situación- respondió Tsunami

Inari estaba encerrado en su habitación aun pensando en todo lo que Naruko le dijo ayer por la noche y escuchó que esta se marchaba.

-Lo entiendo a la perfección no tiene porque preocuparse, bueno me tengo que ir- dijo Naruko y comenzó su camino, no paso mucho para que la rubia recordará lo que ocurría en este preciso momento, pues en su vida anterior unos matones de parte de Gatoh irían a casa de Tazuna a por su hija y en ese momento si bien contaba con que Haku y Zabuza cambiaran de opinión con atacar a Tazuna, prefirio volver con Tsunami pese a que llevaba ya una parte del camino recorrido si es que ellos hacían acto de presencia lo cual al poco tiempo pasó.

los dos secuaces de Gatoh habían llegado a la casa de Tazuna. No se molestaron en tocar la puerta, pues en vez de eso la destrozaron con la ayuda de sus catanas. Tsunami se asustó al verlos ahí.

-Así que tú eres la hija de Tazuna... - dice uno de ellos -. Lo siento, pero tienes que venir con nosotros.

Inari se estaba lavando las manos para ir a ayudar a su madre, fue entonces cuando escucha un grito y algo que se rompía. Esos dos hombres habían empujado a la mujer haciendo que a este se le cayera el plato que estaba lavando.

Inari no tardó en ir a ver qué había pasado y se asusta al ver a dos desconocidos en su casa y también de ver a su madre en el suelo.

-¡Mamá! – grita él.

-¡No vengas! – dice Tsunami más que asustada. El terror se había instalado en su corazón al ver ahí a su hijo -. ¡Corre!

Los dos secuaces de Gatoh se giraron para ver al niño. Uno preguntó si se llevaban a Inari también, pero el que había hablado al entrar le dice que solo necesitaban un rehén. Entonces su compañero llegó a una conclusión, y lo hizo con una sonrisa. Coge su catana para desenvainarla y así poder acabar con la vida del niño.
El gran miedo de Tsunami estaba por hacerse realidad. Tuvo que lidiar con la muerte de su esposo Kaiza y ahora iba a ver como mataban a su hijo. No iba a permitir eso. Fue entonces cuando mira a su pequeño, el cual estaba aterrorizado, tan así que no podía moverse.

-¡Espera! – dice la mujer, haciendo que los dos hombres girasen sus cabezas para mirarla -. Si le haces algo a él, ¡morderé mi propia lengua y moriré! – Inari miró a su madre con los ojos muy abiertos, pues estaba viendo que su madre estaba dispuesta a sacrificarse para que a él no le pasase nada -. Necesitan un rehén, ¿verdad?
El más bajito, y el cual era quien había hablado al entrar en la casa, sonríe y su compañero vuelve a envainar su catana. Fue entonces cuando mira a Inari y dice:

-Agradéceselo a tu madre, mocoso.
Inari cayó de rodillas mientras comenzaba a llorar y pudo escuchar como el hombre que pretendía matarlo le dijo a su compañero que no estaba satisfecho con eso.

-Déjalo – gruñe el más bajito -. Ya has destrozado a esos animales antes de que viniéramos. Cojamos a la mujer.
Tras eso cogieron a Tsunami y le ataron las manos tras la espalda. Inari cerró los ojos mientras apretaba los puños. El chico no podía dejar de llorar y de sentirse impotente.

-Mamá, lo siento... lo-lo siento... - susurra mientras esos hombres se llevaban a su madre. Él se sentó en el suelo mientras abrazaba sus rodillas

Naruko renace con una nueva vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora