Only One || Chirú ||

Aceptación

Una semana pasó desde el incidente entre los enamorados y Francisco. Esa semana transcurrió de una manera tranquila y sin ningún contratiempo. Miguel y Manuel se mantenían más unidos que nunca, hablando y comunicando lo que sentían, abrazándose y acercándose cada vez que podían; y sus amigos, después de presenciar todo lo que tuvieron que atravesar la feliz pareja, solo los dejaron ser, evitando decir cualquier recuerdo del pasado que puedan perturbarlos.

Sin embargo a lo que se trataba de prevenir, Manuel y Miguel llegaron a una conclusión, ésta era que debían conversar con Francisco, a fin de arreglar cualquier asunto pendiente, y así evitar otro conflicto al poner un punto final.

Miguel se comunicó con Itzel a fin de que ella pueda coordinar una reunión entre él y Francisco, algo que no tomó mucho tiempo, debido a que el ecuatoriano aceptó de inmediato.

Por más que presenció de primera mano el amor que se tenían Miguel y Manuel, Francisco aún conservaba las esperanzas de tocar el corazón del peruano, arreglando todo asunto y así volver a enamorarlo. Ese era su único rayo de esperanza.

Llegado el día de su reunión, el cual se llevaría a cabo en una cafetería de "San Miguel", los involucrados estuvieron presentes, así como Manuel e Itzel, claro que ellos sentados en otra mesa.

Miguel suspiró, tratando de elevar un poco la comisura de sus labios, formando una tenue sonrisa para quien se sentaba frente a él.

- Aquí estamos...Quién lo pensaría ¿No?

- A mí me gusta, me gusta volver a hablar contigo a pesar de todo lo que ocurrió entre nosotros...

El ambiente desde un principio se presentó incómodo, aún más para Miguel, quien trataba con todas sus fuerzas sonar amable.

El menor observó aquellos orbes marrones, aquellos labios sonrientes y aquella expresión de carisma que ahora no le transmitían nada, pero que una vez casi veneró.

-Ah...

Suspiró rindiéndose a la situación.

- Sé que nuestro final fue de todo menos amistoso. No pensé que eso podría generar algún problema en el futuro, pero ahora vemos que no, ¿No es así?

- Ah, sobre eso, yo lo sien...

- No. -Miguel no lo dejó terminar- No es necesario que te disculpes... supongo que también fue mi responsabilidad. Dejé que mi amargura me consumiera así que no aclaré las cosas como era debido, tanto contigo como con Manuel.

Francisco apretó sus labios de solo escuchar el nombre del chileno. No era que le desagradaba como persona, pero odiaba los celos que le hacía sentir, ya que quería estar en su lugar.

- Mira, Francisco. Entiendo que ambos estuvimos muy enamorados en el pasado. Ambos pasamos por diversas circunstancias, y realmente nunca funcionó entre nosotros...Nos tuvimos que dar cuenta recién al final.

- Miguel...quizás no fue el tiempo adecuado para nosotros, pero...

Miguel negó con su cabeza en conjunto con su semblante serio.

- No es que sea o no el tiempo adecuado para nosotros, simplemente no funcionábamos juntos. Ahora lo sé, sé quién es esa persona adecuada para mí, en el tiempo y espacio necesario.

Francisco apretó su puño debajo de la mesa. No quería admitirlo pero las palabras del más bajo lo lastimaban demasiado.

- Tú sabes...sabes que aún te amo.

La voz del mayor fue dicha en un tono bajo pero a la vez con un rastro de resentimiento.

- Sé que ambos sufrimos en nuestra ruptura, pero yo...yo he hecho muchas cosas reprobables solo porque no te tenía a mi lado...me hacías mucha falta...