Chisei Chouetsu DxD

Capitulo 41: Declaracion de Desafio

-Entonces ¿Alguna novedad?

-No afirmaron ni negaron nada, solo... me dijeron de una profecía.

En el edificio antiguo de la academia de Kuoh, en una sala privada de la que Azazel se apoderó, se llevaba a cabo una pequeña reunión entre el mismo Gobernador de Grigori y el Dios Líder de los Dioses Aesir de Asgard, Odín, el padre de todo.

Estas reuniones comenzaron a llevarse a cabo hace dos semanas, siempre que ambos líderes tuvieron tiempo libre. Con motivos de llegar a un acuerdo de paz entre la Facción de los Dioses Nórdicos y la Alianza Bíblica, junto con la adición de los Nórdicos a esta nueva alianza.

Además de tratar otros asuntos como otras amenazas a parte de la Khaos Brigade, en las diferentes facciones mitológicas.

-Una profecía, eh...*Azazel daría un sorbo a su trago*. Bueno, tratándose de seres como las Nornas, supongo que es normal que no quieran hablar tan fácilmente.

Las Nornas son disirs, o espíritus femeninos, de la Mitología Nórdica. Tres de ellas son las principales, conocidas con los nombres de Urd, Verdandi y Skuld. Ellas están asociadas al destino y que el pasado, el presente y el futuro están entrelazados de tal modo que no pueden ser separados por las tres Nornas principales... Son básicamente las equivalentes Nórdicas de las Moiras de la Facción Griega.

Las Nornas viven bajo las raíces del fresno Yggdrasil, el árbol del mundo en el centro del cosmos, donde siempre permanecen viendo con su omnisciencia lo que pasa en el mundo y prediciendo lo que podría llegar a pasar a futuro.

-Según ellas, es mejor dejar que las cosas pasen...*Odín entrecerraría su ojo*. Y que sea el verdadero destino el que elija. Aun así, me dijeron la profecía que encontraron y no están dispuestas a decirme más.

-¿Y de qué trata esa profecía?*Pregunto Azazel, interesado.

-Te sorprenderás...*Odín sonreiría antes de dar una tos y decirla*. ''Aquel que marco el Destino del Mundo con solo una decisión sin siquiera desearlo... Ese que camina entre la Luz y la Oscuridad... Y que recibió la bendición del Crepúsculo... Cargara con el dolor y la Esperanza del Mundo... Este debe conocer el Fin para obtener su poder y aceptar su propia imperfección para trascender... Por qué el día en que la Bestia aparezca por la ambición de los que desean imponer su voluntad en el mundo... Sera el día en que aquel que tiene la bendición del mundo, deberá luchar para evitar el fin de todo... Tras ello, traerá el final de la Era de los Dioses... Bendecido el que cree en el Sueño y sigue al Infinito... Por qué él marcara el inicio de una Nueva Era''.

Tras terminar de escuchar lo relatado, Azazel se quedó algo sorprendido y se puso a pensar en todo lo que decía esa profecía... principalmente hablaba de alguien que cambio el destino del mundo con una sola decisión y que fue bendecido... ¿Sera...?

-Veo que has llegado a la misma conclusión que yo, niño Azazel...*Este pasaría a ver a Odín, que sonreía*. Ese mocoso es o será más de lo que es ahora.

-Creo que ni él se lo creería...*Azazel suspiraría*. Y por eso no se lo puedo decir, sería como meterle presión, ya que últimamente está muy serio que está creando las armas necesarias para lo que sea. Ni siquiera un pequeño momento de relajación lo saca de eso y eso es normal, aun es un humano y tiene miedo a lo que se escapa de su comprensión y control.

-Tal vez esta profecía sea una prueba para él...*Odín sonreiría*. Lo presiento, el nacimiento de una gran leyenda que ya ha logrado su primera gran hazaña.

-Un God Slayer, eh...*Azazel suspiraría*. Entonces es innegable que el mocoso estará en el ojo del huracán.

-Ja. Sí. Irónico ¿No crees?*Odín daría un sorbo a su hidromiel*. Como en la historia de los últimos milenios, creía que los usuarios de Sacred Gears y Longinus serían los que labrarían los momentos importantes del mundo, pero... Ese no es este caso.