Community; Daryl Dixon.

64.- Blanco y negro

8 meses

La realidad de la vida, es que seguirá enseñandote las veces que sea necesaria una lección hasta que la aprendas. 

Nosotros creímos aprenderla en la granja, pero no era así, debíamos aprender, que los caminantes afuera no se detendrían, que serían un peligro constante, pero que además habría otras cosas de las que tendríamos que cuidarnos.

Esa es la más grande lección, que no debemos pensar que estamos a salvo.

Los gritos de los niños me llaman, repiten una y otra vez un tierno “mami”, pero no los veo, no los encuentro, reviso cada celda corriendo entre los pasillos, busco en los pabellones sin encontrar rastro de ellos. 

Me tropiezo y caigo en las escaleras, segura de que están arriba, que puedo encontrarlos, que podre abrazarlos, corro escaleras arriba, llegando al descanso, agotada, con los latidos a mil por hora, falta de respiración como si hubiera subido un rascacielos. 

ㅡ ¡Mami! ㅡ el grito es diferente, está lleno de terror y mi instinto me hace correr, impaciente por encontrarlos, cuando suena el llanto, la desesperación dentro de mi es incontenible. 

ㅡ ¡¿En dónde están?! ㅡ mi grito es lastimero, alto y desesperado, el eco de la prisión no hacen más que regresarme mis palabras alterandome, porque no hay respuesta, sólo mi voz.

Las lágrimas de frustración comienzan cuando me doy cuenta que no están en la última celda que queda, mis piernas se doblan cuando dejo de escuchar sus vocecitas, sólo hay silencio, hasta que el sonido de un arma siendo disparada me despierta. 

ㅡ ¿Darly?

ㅡ Estoy aquí ㅡ mira mi rostro y lleva sus manos a mis mejillas, donde hay rastros de la pesadilla recién ㅡ  los disparos vienen de afuera, ¿estás bien?

ㅡ Si ㅡ limpio los rastros de la pesadilla ㅡ ¿Qué sucede?

ㅡ No lo sé

Nos levantamos de la cama y apenas nos vestimos, sacamos las armas del tacho de basura, al asomar la cabeza Ty me grita desde la planta baja.

ㅡ ¡Caminantes en el D!

ㅡ ¿Y el C?

ㅡ No, Sasha y Bob revisan los túneles.

Mientras corro hacia el lugar, mi cuerpo se siente repentinamente débil, me siento cansada, asumo que es por no dormir bien debido a las pesadillas, entro al lugar con falta de aliento sintiéndome torpe mientras mato a los caminantes que salen de la celdas, todos los gritos me revientan la cabeza, pero trato de no dejarme llevar por mis sentidos.

El grito de un niño me alerta desde la celda contigua a la puerta principal, un caminante se acerca a la reja, corro moviendo mi cabeza para alejar el sentimiento de mareo que empieza, al llegar a la reja los gritos del niño suenan más y más alto y al verme llegar trata de correr hacia a mi, veo el cráneo del caminante dividirse en dos, mostrándome dos cuerpos, parpadeo y ataco al que creo es el correcto, el cuerpo del caminante casi cae sobre el pequeño que me mira llorando y se acerca a abrazarme. 

ㅡ No pasa nada ㅡ le miro la carita cubierta de lágrimas y las limpio, el niño me abraza y lo cargo saliendo con mi arma en mano. 

Mis sentidos vuelven ahora que lo cargo, lo llevó sano y salvo hasta la salida, las personas se juntaron afuera del pabellón y los envió a todos al patio central, donde tenemos el comedor, respiro agitada sacando todo el aire e inhalando lento. 

ㅡ ¡Rick! ㅡ la voz de Rhee se escucha desde la torre de vigía ㅡ ¡la reja!

Giro la mirada hacia donde señala, pasmada por la manada de caminantes que están ya derrumbando la única barrera que nos protege del exterior, atravieso corriendo el patio, tomando de paso una varilla.