Lo que sea por ti

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Los años fueron pasando y los chicos se sentían más unidos que nunca, tenían trabajo, tenían una casa con perros demasiado grandes para el gusto de Bastian y gatos que para Máximo no eran normales al ser más grandes de lo habitual y lo más importante de todo, alguien que los espere en casa, Máximo ya había conocido a sus suegros y como era de esperarse, estos lo amaron en cuestión de horas quedándose más de lo esperado para su hijo que creyó que solo se quedarían un fin de semana, pero como a el no le molestaba la presencia de sus padres en su casa estaba más que feliz y a Maximo tambien estaba feliz, pero algo le pasaba y Bastian lo sabía porque conocía tanto a su marido que supo que la sonrisa que le dio a su madre no era genuina, no sabía si ella no había notado o no, pero si lo noto agradecia que no le haya preguntado.

Cariño...- se separa de mi madre y camina hasta mi.

Qué ocurre? dónde vas?...- me mira al notar que cambie mi ropa.

Quiero comprarles un obsequio sorpresa, puedes entretenerlos hasta que regrese...- confirma.

Solo no tardes...

No lo haré, cualquier cosa surgió sigo en la oficina y me tuve que ir un momento, ¿de acuerdo?...

Como digas...- deja un beso en mis labios y me voy, una vez fuera de la casa y luego de haber hecho un par de cuadras hablo.

Mauro llévame a lo de mi suegra...- me mira con sorpresa por el espejo retrovisor.

- y de esto una palabra a nadie...- confirma y sigue manejando.

Desde mi pelea con Máximo no la he vuelto a ver y no estoy seguro de querer hacerlo, pero mi cabeza no deja de repetirme que es lo correcto y de recordarme la frase que Max siempre me dice "lo que sea por ti" y eso mismo es lo que tengo que hacer si quiero que mi marido sea completamente feliz y sé que se muere por volver a verla por más que no me lo diga, es por eso que dejaré mi orgullo y enojo de lado y arreglaré las cosas con ella para que Max la vuelva a aceptar en la casa.

Por suerte después de esa pelea mis suegros no se separaron pero ahora todo es como mi suegro quiere y cuando quiere porque ya le dejo en claro que al mínimo movimiento en falso la deja, por lo que ahora está más tranquila y mansa, según Cameron el cual tiene más contacto con ella que yo, ya que desde ese día ni yo ni me esposo hemos vuelto a pisar la casa de mis suegros.

Señor Bastian, que sorpresa verlo aquí, siempre es un gusto verlo...

Hola Yamil, gracias y a mi igual, ¿la señora esta?...- confirma con un movimiento de cabeza haciéndose a un lado para que pase.

Si me espera unos minutos ya le aviso que está a...

Bastian?...- me doy vuelta encontrándome a mi suegra caminando hacia mi.

Hola señora Blue...- se queda a unos pasos de mi y puedo sentir sus nervios.

Dime Caeli por favor....- asiento.

Podemos hablar un momento...- su teléfono suena.

- si esta...- niega.

No, mi familia está primero, te escucho...- miro en todas direcciones nervioso ya que aún nos encontramos en la entrada.

Señora...- Yamil está a unos pasos de nosotros.

- el comedor ya está listo, pueden pasar cuando gusten..

Bueno gracias...- el se va y me mira.

- quisieras... merendar conmigo?...- antes de darme enojo me da ternura verla sonrojada por lo que me apiado de ella y me acerco, levanto mi codo y enganchó su mano en el.