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Los gritos no sesaban y estaba que me arrancaba todo el cabello con mis manos. Apague el stream de Quackity y corrí hacia la puerta. Estaba en pijama. Estaba tan apurada por ir a correr de mi casa a Mateo que olvide ponerme mis pantuflas y así sin nada, mis pies desnudos viajaron atraves del piso frío.

Con mis manos echas bolas, cerré los ojos enojada. Trate de controlarme y si que funciono. Las típicas respiraciones que encuentras vagando en Internet si que funcionaban.

Sin más me metí en la conversación que estaba teniendo Mateo y la puerta.

—¡¡¡Tn!!! Se que estas ahí —aúllo con su voz gruesa tan característica.

—¿Qué quieres, Mateo? — pregunte sin abrir la puerta. Podía ver como desde el pequeño hueco inferior, se hallaban los pies de Mateo.

—Sabía que estabas ahí.

—¿Qué necesitas?

—Abre la puerta, Tn.

—No.

—¿Por qué?

—Mateo... —murmure y comence a frotar mi ceja con mi dedo índice haciendo que esa parte de mi rostro comenzará a palpitar por lo fuerte que hacia ese movimiento  —Solo vete, enserió. No te quiero ver —le ordene con la voz más serena que pude. Últimamente había aprendido a controlar mis problemas de ira, porque de no ser así hubiera comenzado gritarle un montón de groserías.

—Tn... —apoyo su frente en la puerta y de la misma manera su antebrazo. Ahora era él era el que murmuraba—Por  favor — suplicaba. El sonido de su chaqueta, viajaba hacia el otro lado de la  madera que nos separaba y si bien estoy segura, podía escuchar incluso su respiración agitada.

—¿Cuántas veces te debo decir que no?

—Sabes que aunque digas cien mil veces "no" , yo no me largare de aquí

—Ah sí... —hablé agresiva apunto de echarle una amenaza. Mis pies corrieron hasta el lugar en donde había dejado botado mi celular  para luego volver enfrente de la puerta —Escucha, Mateo.

—¿Qué cosa?

—Acércate a la puerta. Debes escuchar —le ordene y por supuesto que el chico siguió mis órdenes. Poso su oreja derecha en la puerta y al yo estar segura de su acción comencé a teclear el número de la policía en la pantalla.

—¿A quién llamas, Tn?

—¿Tú a quién crees? —sonreí aun sabiendo que el no podria verme — A la policía, pendejo.

—¿Qué?

—Sí. Vete o te denunció por acoso

—¡Ey! Tn, tranquila.

—Qué te vayas.

—Esta bien... me voy.

—Rápido, Mateo —lo apresure y empecé chasquear fuertemente mis dedos tres veces. Él sí que escucho, y se echo a andar hacia su auto. Lo mire todo por la mirilla de metal que estaba de mi lado, y antes de subirse, postro sus ojos por ultima vez en mi casa. Después abrio la portezuela y entro. « Por fin se fue»,  soplé y limpie el sudor de mi frente que estaba cayendo por mi rostro. Eran unas pequeñas gotas que indicaban la incomodidad que me había provocado,  Mateo.

Acabando tal escena volví a mi cómodo asiento. Prendí mi laptop para seguir con lo que estaba haciendo anteriormente: viendo el stream de Alex , haciendo tarea y poniendome al corriente con la infinidad de trabajos atrasados que me había costado por ir a mis pequeñas vacaciones con Alex. Me di cuenta al momento de entrar a Twitch que Alex había terminado stream y no dude ni un segundo en mandarle mensaje.

Alex <3

¿Por qué el stream tan corto?

Siempre suelo hacerlos cortos

Pero estés es más pequeño de lo normal

Tal vez
 

¿Por qué?

Porque quería hablar contigo
Pero si quieres vuelvo a stream

No, no, no.
:)

¿Te puedo llamar?

¿Te parece si me llamas en unos 10 minutos?

¿Por qué? ¿Estas demasiado ocupada?

Algo así. 
Ando haciendo tarea, y claro que podemos estar en llamada, pero siento que no te pondré mucha atención y yo quiero darte la atención que te mereces.

¿Es mucha?

Bastante.

Voy para tu casa.


Si vienes para acá, por favor cómprame un sacapuntas que lo acabo de perder 🙏🏻

Jajaja
Claro. Yo te lo llevo.








Mystery Girl | Quackity Y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora