Capítulo 14: ¿Hermanas?

277 23 1
                                    

Josie no daba crédito a lo que escuchaba. ¿aquella imponente rubia había sido una chica sin hogar como ella?

Negó mientras fruncía lentamente sus cejas.

—¿quieres sentarte Lizzie?

La rubia asintió sin hacer contacto visual con la castaña. En su mente aún había una lucha por decidir si le hablaba sobre sus sospechas o si solo le contaba una parte de su historia.

Ambas entraron en la oficina de la mayor; Josie con el interés completamente elevado y la rubia casi con el corazón en la mano. La menor guio a la otra hasta el sillón de la habitación y se sentó junto a ella.

—se nota que necesitas hablar; puedes hacerlo conmigo. Después de todo, has abierto una parte de tu corazón allá afuera hace unos segundos.

La rubia inspiró y suspiró, tratando de calmarse; de poder estar repuesta para lo que iba a relatar.

—a los seis años fui acogida por Hayley y Klaus Mikaelson. Estuve en un orfanato por unos meses antes de que ellos me adoptaran.

—¿Qué ocurrió exactamente? bueno... ¿Qué recuerdas?

—pues, ¿Qué puedo decirte? No recuerdo ni siquiera haber estado en un orfanato. —Se agarró la cabeza y empezó a temblar—. No recuerdo cuando, ni cómo, conocí a los Mikaelson. Hasta que cumplí siete años fue que me di cuenta de que ellos no eran mis verdaderos padres. —Se encogió de hombros—. Y todo gracias a pesadillas nocturnas, en las que recordaba algunas cosas de mi pasado.

—¿recuerdas a tus padres?

—he soñado con ellos desde que tenia siete; sin embargo, sus rostros siempre han estado borrosos. Apenas y reconozco frases dichas.

Josie notó como las manos pálidas de la rubia empezaban a tintinear. Aquello la afectaba demasiado y el hecho de que se estuviera abriendo con ella, la hacía sentirse importante. Ella tenia la responsabilidad de escuchar su relato; Lizzie necesitaba sanar.

—fui con una psicóloga desde que esos sueños empezaron y... fueron mermando poco a poco. Después de que cumplí doce, no volví a tener aquellos sueños. —Se giró hacia la castaña con expresión curiosa en sus tristes ojos azules—. ¿alguna vez has soñado con tus padres?

Iba a negar, sin embargo se acordó del sueño de la otra noche. Aunque no estuviera segura de que si esa mujer era realmente su madre, creyó que debía contarlo.

—soñé con una mujer una vez.

Los labios de Lizzie se entreabrieron con anticipación.

—¿Qué recuerdas exactamente? —Se atrevió a preguntar.

La castaña sacudió su cabeza intentando recordar algo importante.

—recuerdo estar herida y una mujer frente a mi me consolaba con su suave voz —dijo encogiéndose de hombros.

Lizzie recordó su propio sueño y su interés se elevó de pronto.

—¿Cómo era ella?

Josie no vio la razón por la cual la rubia parecía muy interesada con sus sueños, pero aún así respondió con lo que recordaba apenas.

—era... —un flashback repentino vino a su mente de aquel sueño. Miró a la rubia, escaneando su rostro completamente. Frunció las cejas— como tú.

Lizzie pudo ver con claridad cada teoría ahora.

—¿ella era rubia?

—y de ojos azules —completó la castaña—. ¿Cómo no lo pude ver antes? Eres igual a ella.

El Océano De Tus Ojos ~HOSIEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora