El Cisne Que Voló Por El Tigre *Yoonmin/KookV/Namjin/HopeWen/Jihan*

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Miraba el techo de su habitación con fijación casi inhumana, en su mente había in sinfín de pensamientos, unos más claros que otros, el miedo aún estaba atrofiando sus sentidos, suspiró pesadamente, miró de nuevo su celular, aquellos mensajes que había dejado a Jimin, ninguno de ellos había sido visto, eso le angustiaba, no sabía de él desde esa noche donde le confesó sobre su destinado.

Destinado.

Empezó a tenerle miedo a esa palabra y a lo que conllevaba cuando se dio cuenta que estaba enamorado de Jimin, Yoongi no quería encontrar su destinado, no envidiaba a Namjoon, a Jin o a Hoseok y a Wendy, él no quería nada de eso, lo único que deseaba era vivir una vida feliz con Jimin, haber encontrado a su destinado sólo había empeorado sus planes y lo que él realmente quería, tenía miedo, estaba aterrorizado de pensar que su alfa se vincularía con aquel omega que vio, y que dejara de lado todo lo que pasó con Jimin, no era justo para su cisne.

Comprendía por qué este no quería contestar, pero estaba desesperado por saber si se encontraba bien, desde hace días experimentaba una sensación angustiante en el pecho, algo en su interior dolía y no había forma de detenerlo, mandó mensajes a todos sus amigos, ninguno le respondía, no quería ser paranoico, quería pensar que estaban muy ocupados con la universidad, pero la ansiedad crecía porque al llamarlos no contestaban, había una persona que no había contactado. Namjoon. Este siempre era mordaz al hablar, dudaba que se diera cuenta de lo que pasaba a su alrededor, dudaba que estuviera al pendiente de lo que sucedía entre él y Jimin, aunque a esas alturas sus amigos ya deberían de estar enterados.

Se sentó e hizo la llamada...

Los seis chicos se hallaban sentados en una mesa en aquella cafetería cercana a la estación de metro, era muy temprano, y tres de ellos no habían dormido nada después de haber dejado a Jimin y JeongHan en el aeropuerto, miraban sus cafés con una mueca, sus teléfonos estaban en la mesa, habían recibido varios mensajes de Yoongi, al igual que llamadas, pero ninguno de ellos tenía la valentía de responder.

—Yoongi nos ha llamado a todos—dijo Hoseok con una mueca.

—A mí no—dijo Namjoon sin mirarlos, estaba leyendo un libro de la clase que tendría en una hora.

—No me gusta dejarlo así, él también la está pasando mal—dijo Wendy pasando de largo las palabras de Namjoon.

—Jimin tampoco contesta.

—No creo que hayan llegado aún—tranquilizó Jin a Taehyung que parecía un manojo de nervios desde que se despidió de su hermano—. Dijo que nos avisaría cuándo llegarán allá.

—Lo que a mí no me queda claro es desde cuando Jimin y Jeonghan se llevan bien ¿No se odiaban? —preguntó Jungkook confundido, mientras se atragantaba con un pan.

—Tampoco lo entiendo—negó Taehyung—. Pero, quiere ayudar a Jimin, supongo que hicieron las pases, bueno, eso no es importante en este momento—bufó—. ¿Qué le voy a decir a mis padres? A esta hora lo más probable es que ya sepan que Jimin no está en el hospital...

El sonido de un celular los distrajo, con horror miraron sus teléfonos, pero no eran los suyos los que sonaban, se volvieron a ver a Namjoon quien sostenía si teléfono.

—¡Espera Namjoon, no!

Pero, era tarde, Namjoon se llevó el celular a la oreja. —Hola Yoongi...bien...Jimin...oh bueno Jimin está—Jin le dio un golpe, y comenzó a hacer cosas extrañas con sus manos y dedos—. Jimin está... ¿Caminando? ¿Bailando? —Jin desesperado le hacía más señas y los demás también—. ¿Baño? ¿Dormido? —gruñó molesto antes de darle el teléfono a Jin.