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Suspiró por tercera ocasión, era sábado por la mañana y él se encontraba acostado en el piso de la sala después de haber ayudado a su padre con el aseo, miraba con desinterés el techo, sus pucheros eran más profundos con el pasar de las horas, su corazón estaba encogiéndose y el dolor de su pecho, y de su marca se hacía cada vez más grande, era el tercer día que no sabía nada de Jungkook, este le había mandado un mensaje diciendo que sus padres le castigaron por no haber pasado el examen, internamente sabía que eso podía pasar, porque los padres de Jungkook no eran los más comprensivos y amorosos. Aún así, lo resentia y su omega también, porque su marca necesitaba atención y él estar a su lado.

—Patético—dijo Jimin mirandolo desde la entrada de la sala.

Taehyung bufó y se sentó mirándolo, antes de soltar una carcajada, su hermano estaba hecho un asco, lleno de lodo y con aquel chaleco verde fosfo horripilante, llegaba de su castigo por haberse metido en problemas con la ley.

—Tú te ves genial, como tu espíritu animal, un salvaje psicópata.

—Ah, no digas nada, odio estar castigado y más teniendo que soportar a aquel omega descerebrado. Lo odio Tae—gruñó sentándose en el sillón.

—Papá te va a matar si te ve sentado así de sucio.

—No molestes—rodó los ojos—. Lo peor de todo es que no puedo estar con Yoongi, lo extraño.

—Lo viste ayer.

—No es suficiente.

Taehyung le miró de mala manera. —Te quejas por eso, yo no he visto a Jungkook en días, mi marca duele, lo extraño y no puedo ir a visitarlo.

Jimin le sonrió. —Entonces, escapa y velo sin que nadie sepa.

—No soy como tú, no puedo escapar.

—Entonces sigue llorando como un bebé—le sonrió ladino—. Oye, quería preguntarte algo importante...la otra noches, Yoongi y yo...

—¡Park Jimin fuera de mi sillón!

Baekhyun apareció con un paquete de pan, miró a su hijo con molestia, estaba sentado en su sillón blanco, lleno de lodo, se acercó y pegó con el pan en la cabeza.

—Fuera, ve a bañarte—ordenó.

—¡Ay! —se sobo la cabeza antes de levantarse—. Que agresividad hay en esta casa.

Salió disparado a las escaleras cuando vio que su padre estaba por lanzarle el pan, subió las escaleras corriendo y riendo, su familia era graciosa, al entrar a su habitación se miró en el espejo, sí, estaba hecho un desastre, pero todo era culpa de Jeonghan, quien mientras limpiaban el parque se le ocurrió lanzarlo "accidentalmente" a un charco de lodo, lo odiaba, era un omega demasiado tonto que siempre estaba buscando pelea, ya tendría tiempo para vengarse.

Se metió en la ducha, agradeciendo el agua caliente que mojaba su cuerpo, estaba cansado y preocupado, no le había querido decir a nadie, mucho menos a Yoongi, pero últimamente no se estaba sintiendo muy bien, y el miedo de que sus sospechas se hicieran ciertas era peor. Suspiró pesadamente, limpio todo su cuerpo y su cabello, saliendo de la ducha para arreglarse, quería pasar lo que restaba del día al lado de Yoongi.

Se puso lindo, el frío comenzaba, uso un gran suéter y unos pantalones apretados, tomó su mochila con ropa, porque planeaba quedarse en casa del afa. Bajó y corrió a la cocina, en donde estaban sus pequeños hermanos. Taehyun se acercó a él al mismo tiempo que SooBin, estos le abrazaron.

—Jiminie ayúdanos a hacerle una broma a Tae.

—¿Papá no les había dicho que no más bromas? —preguntó con una ceja alzada.

El Cisne Que Voló Por El Tigre *Yoonmin/KookV/Namjin/HopeWen/Jihan*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora