Los Herederos De Drácula

Capítulo 1

Ha pasado un año completo desdé que mi hermano Bastián se fue.

He pasado demasiado tiempo buscándolo, he pedido ayuda a demasiadas brujas y ninguna de ellas ha logrado encontrar una sola pista que me lleve a él. Y cómo si eso no fuera suficiente mi padre Kai, continúa en el hechizo en el que mi loco bisabuelo lo puso. Nadie de la familia ha podido encontrar tampoco una forma de romperlo.

La única forma en la que mi padre podría despertar sería matando a Jace, pero eso no está a discusión. Nadie se manchara las manos con sangre inocente. Eso no es lo que mi padre querría. Estoy completamente segura de que él preferiría seguir dormido.

He tratado de hacer mi vida desdé lo que ocurrió en Valaquia, me he graduado con éxito de la escuela espada del dragón, ahora soy una vampiro que se sabe controlar a la perfección.

Puedo andar por el mundo sin ninguna preocupación. Mis amigos también han seguido con sus vidas después de la graduación.

Cordelia y Metatrón aún siguen con su noviazgo, mi amiga ayuda a su madre con su negocio familiar en casa y su novio de vez en cuándo la visita ya que tiene asuntos celestiales que atender en la ciudad de plata.

José ahora se está preparando para tomar el trono vampiro de México, ahora ya no hablamos tan seguido cómo lo hacíamos antes. Rara vez nos enviamos mensajes. No me molesta en lo absoluto, yo sé lo difícil que es ser un heredero vampiro.

En cuánto a mi, he entrado con éxito a la universidad en Londres. Me prepararé ahora para convertirme en una diseñadora de modas. Mi vida sin duda ya no es la misma.

En estos momentos estoy terminando mi última clase, tomo mis cosas y las guardo todas en mi bolso. Me levanto de mi lugar y camino directo hacia la salida del salón.

Los pasillos de la universidad están llenos de chicos humanos. Las escuelas humanas son más pesadas que las sobrenaturales, o por lo menos para mi. Cuándo estaba en Canadá, los pasillos de la escuela jamás estaban tan llenos cómo los de está.

Extraño la escuela espada del dragón, así como extraño a mis amigos y la vida que tenía allá.

Pero ahora ese ciclo en mi vida ha terminado, ese capítulo ha llegado a su final. Ahora tengo que escribir uno nuevo.

Camino directo hacia la salida principal de la universidad, veo la puerta a lo lejos, llego a ella, la abro y salgo. Bajo los escalones de la entrada y me dirijo a la parada del autobús. Ha sido un día pesado y lo único que quiero en estos momentos es llegar a mi departamento y descansar un poco de todas las personas.

Llego a la parada y tomo asiento para esperar pacientemente el trasporte.

Pasan unos cuántos minutos, estoy ahora subiendo los escalones de mi edificio. Llego al tercer piso, camino a mi puerta, me coloco frente a ella, saco mi llave, la inserto, abro la puerta y entro a mi casa para luego cerrar la puerta a mis espaldas.

Dejo mi bolso sobre mi sofá y me dirijo a la cocina. Me acerco a la nevera, la abro y saco una de las tantas bolsas de sangre que tengo.

Abro la bolsa con cuidado y después comienzo a beberla tranquilamente.

—La vida de universitaria te ha cambiado —dice alguien a mis espaldas.

Dejo de beber la sangre y doy la vuelta.

—Tú.

—Ese no es el reencuentro que esperaba, te has vuelto fría. Querida prima.

—Scorpius —doy una sonrisa.

Dejo la bolsa de sangre a un lado y abrazo a mi primo.

—Te he extrañado tanto —le digo.

—Y yo a ti —responde el rubio.

Pasan unos segundos y lo miro a los ojos.

—Mira nada más Aurora, te pintaste el cabello nuevamente.

—Las puntas solamente, ¿Te gusta?

—El rosa te queda —responde él.

—Gracias, pero... ¿Qué haces aquí? Dudo que hayas venido solamente a visitarme.

—Y estás en lo cierto, no he venido de visita solamente —responde el vampiro oji-azul.

—¿Qué pasa? ¿Acaso hay problemas?

—Aurora...

—¿Es Bastián? ¿Lo encontraron? —tomo las manos de mi primo —. Scorpius... ¿Encontraron a mi hermano por fin?

—No —dice —. Desgraciadamente aún no. Bastián sigue desaparecido, no hemos encontrado nada nuevo que nos lleve a él.

Bajo la mirada.

—No te sientas mal, no lo vamos a dejar de buscar ni nada, vamos a hacer todo lo posible para encontrarlo —dice mi primo.

—Entonces, si no se trata de él ¿Qué pasa?

—Necesito que vengas a Valaquia conmigo.

—¿Para qué?

—No te lo puedo decir, tú padre solamente me pidió que viniera. Él es el que tiene que hablar contigo.

—¿Mi padre?

Scorpius asiente con la cabeza.

—Pero... no puedo irme. Tengo clases en la universidad, además tengo trabajos que entregar y...

—Aurora, de verdad es importante que vuelvas.

Miro a mi primo a los ojos y segundos después asiento con la cabeza sin responder.

—¿Cuándo nos vamos? —interrogo al vampiro.

—Ahora.

—¿Ahora? ¿Y cómo? ¿En avión?

—Para nosotros no es necesario eso, al parecer te has olvidado de muchas cosas en esté último año que no nos vas visto.

Saca su teléfono y mi primo envía un mensaje.

Scorpius cruza sus brazos y segundos después se abre un portal mágico a sus espaldas.

—Nuestro trasporte ha llegado, después de ti.

Me acerco al portal y quedo frente a él.

Ha pasado tiempo desdé que visite Valaquia, no me he parado ahí desdé lo que pasó con Bastián y el desgraciado del Dragón. Me trae muchos malos recuerdos.

Pero tal vez, el ir a ese lugar de nueva cuenta no sea una mala idea. Podre intentar buscar a Bastián allá. Estoy completamente segura de que él sigue en Transilvania, en Corea no ha aparecido, ni en Hungría y en Canadá tampoco. Él tiene que seguir en Valaquia, escondido. Y yo lo tengo que encontrar.

Avanzo y cruzo el portal para después aparecer justo en la entrada de la ciudadela del reino Tepes.

Scorpius aparece a mi izquierda y el portal se cierra a nuestras espaldas.

—Bienvenida a casa, Aurora —me dice.

—Parece que ha pasado una eternidad desdé la última vez que estuve aquí —comento —. Había olvidado cómo era.

—Te concentraste en vivir una vida humana después de la graduación de tú escuela sobrenatural.

—Si, lo hice.

—Nadie te culpa por querer olvidar todo lo que pasó hace un año, no te preocupes.

Scorpius empieza a avanzar.

—Basty...—murmuro —. Sé que estás aquí. Espérame un poco, nos vamos a encontrar pronto.

Sigo al vampiro.