Ah! Love [1ra Parte Semicolon] - Omegaverse

Capítulo 06

No le gustaba ocultar información al Alfa con el que estaba casado, pero era necesario si deseaba hacerlo feliz. ¿Cuánto tiempo llevaba haciendo esto? Podría jurar que ya casi cumplía el año y las cosas se estaban complicando más.

Estar en ese hospital le causa ansiedad, quería huir y buscar un refugio; pero estaba ahí, intentando hacer feliz a su esposo. Sentado, en aquella blanca habitación, frente al escritorio de un médico, esperando para saber si todo lo que hizo fue un éxito o simplemente falló en el intento. Temblaba de miedo y su corazón latía con rapidez, sus manos sudaban y juraría que vomitaría tarde o temprano.

La tensión se quitó en cuanto la puerta fue abierta, haciendo recordar que tanto podrían existir las buenas noticias como las malas. Clavó su vista en los movimientos del médico, viendo en una de sus manos un sobre blanco. El médico Beta se sentó en su asiento y procedió a abrir el sobre para sacar la hoja y leer de inmediato su contenido.

La cara del hombre frente a él le dijo todo lo que temía, y evitó verlo a los ojos.

—Escucha, Jihoon —escuchó su voz—. Lamento traerte estás noticias, pero debes saber la verdad —dijo con delicadeza—. El tratamiento falló. Hay un daño muy fuerte en tu cuerpo debido al aborto causado hace un año y medio.

—¿Significa que no volveré a tener un hijo? —preguntó con un nudo en la garganta.

—No, al menos no aquí —respondió—. Escuché que en el extranjero, en Europa existe un tratamiento mejor que el que hay en Incheon. Si viajas y te sometes a ese tratamiento, puede que tengas una tasa de éxito mayor.

—Eso no me asegura que pueda tener un cachorro, doctor —comentó un poco frustrado—. Si el tratamiento no es exitoso, perderé mucho dinero que no tengo.

—Escuché que tu esposo es dueño de una empresa, él podría apoyarte si solo le dices la verdad.

—¿Y decirle que aborté un bebé sin su autorización? Sería el fin de mi matrimonio. ¿Por qué cree que hago esto? Para no perderlo, no quiero perder a Mingyu.

—Es eso o despedirte de la oportunidad de tener un cachorro propio —Jihoon se quedó mudo.

Jihoon no sabía qué hacer. Le había mentido de la peor forma a Mingyu solo por sus propio beneficio, pero cuando se dio cuenta de lo que hizo, las cosas salieron de control y jamás pensó en una consecuencia negativa en su vida.

Había perdido la oportunidad de tener un hijo.

Era cierto que no deseaba tener uno en ese momento, sin embargo, cuando se enteró de que había quedado en cinta sin planearlo, todo su mundo se vino de cabeza. Con ayuda de su cuñado, hizo lo posible para ocultar ese hecho a Mingyu y a Seungcheol, ninguno de los dos pensaron en las grandes consecuencias que sería hacer algo indebido.

Si tan solo lo hubiera hablado con Mingyu, él sería capaz de entender la situación y hubiera tomado la mejor decisión. Le había mentido y Mingyu detestaba las mentiras de ese tipo. ¿Qué otra opción tenía? Huir del país fingiendo que estudiaría lejos, someterse a un tratamiento que no fuera cien por ciento efectivo o decirle la verdad a Mingyu y arriesgarse a perderlo.

De ninguna manera quería perder a Mingyu, pero tampoco estaba dispuesto a irse del país como si nada.

—Gracias, doctor —Jihoon se levantó haciendo una reverencia—, pero… no me someteré al tratamiento, intentaré buscar más opciones por mi cuenta.

—La decisión que tomes, ya queda fuera de mis manos —Jihoon asintió—. Te deseo suerte.

No respondió y simplemente salió del consultorio médico.