Ah! Love [1ra Parte Semicolon] - Omegaverse

Capítulo 54

Mingyu llevó a Wonwoo a su oficina, siendo seguido por Seungcheol. Seokmin tan pronto escuchó la situación, fue hasta ellos para ver el estado de Wonwoo. No dejaba de llorar, de sentirse atemorizado por recordar el pasado. Todo era tan doloroso volver a recordar todo. Le dolía demasiado que solo quería llorar hasta olvidar su dolor. Mingyu estaba a su lado, de alguna forma lo sentía reconfortante, pero su miedo ganaba. 

—¡¿Cómo que ese maldito estuvo aquí?! —soltó Seokmin con furia. Quería tener a Moon Junhui frente a él. Joshua intentaba calmarlo—. ¡Quiero matarlo! —dijo entre dientes, furioso. 

—Nadie aquí va a matar a nadie —exclamó Seungcheol un poco estresado—. Primero que nada, necesito saber, ¿quien jodidos es Moon Junhui y qué tiene que ver con Wonwoo? —el silencio reinó entre ellos. Joshua tampoco sabía lo que ocurría, pero ninguno se atrevía a hablar. 

Wonwoo se calmó y se limpió las lágrimas. Tomó algo de aire y se incorporó para hablar sobre ello. Solo Mingyu, Chan y su familia, sabían de ello al respecto. 

—Jun es el padre de Soobin —confesó finalmente. Seungcheol se sorprendió. Así que era verdad eso de que Wonwoo fue abandonado. Joshua simplemente se llevó la mano a la boca para evitar decir alguna estupidez—. Sé que dije que había muerto —sollozó—. Pero lo hacía para protegerme a mí y a Soobin —miró a Seungcheol con súplica, no quería que lo juzgará—. Lo siento… 

—¿Tú lo sabías? —Mingyu asintió—. Pensé que era una excusa, pero realmente era cierto —Seungcheol estaba incrédulo—. Dios, ahora todo tiene sentido —dijo—. ¿Ahora que vamos hacer Mingyu? —le recriminó al Alfa—. Firmamos un contrato, en cuanto Jun lo lleve a la notaría será nuestro fin. ¿Cómo obtendremos más de un millón de dólares en pagar la indemnización? 

—Cálmate —soltó Mingyu—. Yo tampoco sé cómo lo pagaremos, pero voy a romper ese contrato, así termine hipotecando mis propiedades —comentó Mingyu—. No dejaré que la integridad de Wonwoo y la empresa, salgan lastimados. 

—Wonwoo —Joshua se acercó al Omega—. ¿Estás bien? —Joshua le ofreció sus brazos, y Wonwoo no pudo evitar refugiarse en él. Tenía demasiado miedo de involucrar a Soobin. 

—Tengo miedo… —murmuró. Mingyu le dió caricias en la espalda—. No quiero que me quite a Soobin —se cubrió el rostro—. No quiero… 

—Tranquilo, Wonwoo —Seokmin se acercó a su hermano—. No lograremos que Jun lo haga, nos tienes a tu familia y tienes a Mingyu para sentirse protegido. 

—Lo sé… pero me duele… —se separó de Joshua para limpiar sus lágrimas—. Debo llevar a Soobin a casa —comentó Wonwoo—. Por favor, llama a Seungkwan para que lo traiga —le pidió a Seokmin. 

—Yo te llevaré a casa —comentó Mingyu—. No puedo dejar ir como así —el Alfa lo tomó de la cintura dejó un beso en sus mejillas—. Anda, vayamos a mi casa. Creo que lo necesitas —Wonwoo asintió. 

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Chan regresaba de las clases de baile, estaba agotado físicamente por todo el trabajo que tuvo hacer. Llegaron nuevos estudiantes, y enseñarles las rutinas de baile que tenía con los antiguos era un poco cansado. Solamente quería llegar, dormir y esperar a Seungkwan para que tuvieran un momento de comodidad. Estaba demasiado somnoliento, que simplemente subió por las escaleras de su edificio caminó por el pasillo en dirección a su apartamento. 

Se quedó frente a la puerta, y buscó las llaves en su mochila. Batalló un poco al encontrarlas, incluso creyó que las había olvidado en casa y debía esperar a que Seungkwan llegara de trabajar o directamente a su trabajo. Pero nada de eso fue necesario, porque logró encontrarlas en lo más profundo de su mochila. Introdujo la llave en la cerradura y retiró el seguro de puerta. La abrió de inmediato sintió una mano que cubría su boca y otra que aprisionaba su mano izquierda contra su espalda. Chan quería gritar pero no podía.