Ah! Love [1ra Parte Semicolon] - Omegaverse

Capitulo 48

De nuevo tenía a Wonwoo debajo suyo, haciéndolo gemir solamente para él. Tenía que disfrutar cada segundo pasaba para estar con él, para marcarlo como suyo. Se apoyaba con fuerza sobre la cama, penetrando con profundidad el interior del Omega. Le encantaba verlo de ese modo; tan vulnerable y exquisito. Era suyo ese momento y lo guardaría por siempre en su mente.

Se acercó al mentón de Wonwoo, dejando besos cerca de su cuello, ascendió a su oído y mordió levemente la orilla de su oreja con seducción. Tenía al Omega aferrándose a él, con las uñas encajando en su espalda y sus piernas alrededor de su cintura. Eso lo hacía excitar más.

—Eres tan hermoso… —soltó entre jadeos—. Maldita sea, no quiero separarme nunca de ti —apegó más su cuerpo al de Wonwoo para sentir su calor—. Eres mío, solamente mío —pasó uno de sus brazos a su cintura y lo tomó con fuerza. Quería morder nuevamente su cuello, pero algo hizo que se detuviera.

Mingyu se apoyó con ambas manos sobre la cama y observó el rostro de Wonwoo. Estaba sollozando. Entró en pánico al pensar que algo malo había hecho. ¿Lo había lastimado?

—¿Te hice daño? —fue lo primero que pudo decir, Wonwoo negó cubriendo sus ojos con su brazo—. Mierda, ¿qué hice?

—No hiciste nada —dijo con voz temblorosa—. Es solo que… —tragó un poco al sentir un nudo en su garganta—. Todo me parece tan irreal… despertar y saber que todo esto solo sería un sueño… —Mingyu podía sentir el dolor de Wonwoo, la tristeza que albergaba en su corazón—. Tengo miedo, Mingyu. Tengo miedo de que al despertar te vayas y me dejes solo… Tengo miedo de volver a ser abandonado…

Mingyu comprendió su sentir, recordar el pasado donde creyó estar en una nube de amor y después estar en el suelo, solo y abandonado. Él no volvería a hacer sufrir a Wonwoo. Mingyu apartó el brazo de Wonwoo y tomó su rostro entre sus manos para besar sus labios con ternura. Acarició sus mejillas con el único propósito de limpiar sus lágrimas. Necesitaba sentirlo seguro de que nada malo sucedería y que estaría con él a partir de ese momento.

—Esto no es un sueño —murmuró sobre sus labios—. Esta es la realidad, Wonwoo. Mis sentimientos por ti son tan reales como en este momento. Eres mi Omega y jamás te abandonaría —sus palabras lo confortaban—. Tú y Soobin se han vuelto mi vida, no quiero apartarme de ustedes. Te amo, Wonwoo y nunca te dejaré, te voy a proteger y amar por el resto de mi vida.

Wonwoo volvió a romper en llanto. Escucharle decir eso era una emoción única. Prácticamente, Mingyu lo estaba aceptando con todo e hijo. Sabía que no todos los Alfas harían eso, normalmente ellos rechazaban a los Omega abandonados junto a sus cachorros, y cuando el padre del cachorro moría, obligaban a los Omegas a abandonar sus cachorros para estar con ellos. Había escuchado demasiadas historias de eso, y tenía miedo de que Mingyu fuera igual. Pero se equivocó, Mingyu amaba a Soobin como lo amaba a él. Y le daba gusto de saber, que no tendría que elegir entre su hijo y entre Mingyu.

—Por favor… —Wonwoo pasó los brazos por el cuello de Mingyu para atraerlo por completo y ocultar su rostro en su cuello, aspirando el aroma a menta que lo relajaba—. Quédate conmigo…

—Lo haré… lo prometo —Mingyu dejó un beso en la frente y lo abrazó con todas sus fuerzas. No lo soltaría jamás.

✙

La luz del día se asomó por la ventana, abrió los ojos con pesadez. ¿Se había quedado dormido nuevamente? Se volteó a su lado con pánico y pudo notar la cercanía de Mingyu. Lo estaba abrazando mientras dormía. Wonwoo sonrió y se acomodó entre sus brazos para acurrucarse. Ya lo recordaba todo.

Hicieron el amor un par de veces, el Alfa lo había hecho sentirse demasiado seguro de estar con él, y ahora, amanecer a su lado era una clara señal de que Mingyu estaba cumpliendo sus palabras. Se quedaron dormidos durante la noche, y estaba despertando una mañana fascinado a su lado. Lo amaba demasiado.