Ah! Love [1ra Parte Semicolon] - Omegaverse

Capítulo 45

Admite que de nuevo se siente como un adolescente cuando conoce a su primer amor, pues con Wonwoo sucedía igual. Desde el primer momento que comenzó su relación, todo se volvió de color de rosa. Había mensajes de textos a todas horas, llamadas cuando querían escucharse, y le enviaba pequeños detalles a su casa. Todo sin poder verse, por petición del Omega.

Wonwoo no quería importunar la vida de Mingyu y traerle más problemas de los que ya tiene. Estaba en la recta final de su matrimonio y debía esperar paciente a que tuviera un final. Es por eso, que le pidió no verse hasta que todo se solucionará en su vida. Y Mingyu aceptó, porque tampoco deseaba poner en riesgo a Wonwoo y que se sintiera incómodo con todo el proceso. Tenía esperanza de que todo se solucionaría.

Con Jihoon, las cosas se volvieron un desastre. Lo llamaba a todas horas, le mandaba mensajes de texto, lo buscaba en el hotel que se hospedaba —por qué sí, Mingyu no soportaría ni un solo minuto con sus padres—. Jihoon lo estaba hostigando y asfixiando. Nunca buscó a hacerle daño, por ello lo evitaba y buscaba alternativas para llevar aquella distancia. Todo era tan asfixiante que no sabía qué día terminaría todo su infierno.

—Presidente Kim —Seungkwan tocó la puerta de la oficina de Mingyu y entró con un sobre—. Me enviaron esto de la oficina de su abogado —Seungkwan se acercó al escritorio de Mingyu y le entregó el sobre. Mingyu lo tomó—. Me dijo que lo recogería personalmente más tarde —mencionó. Mingyu abrió el sobre sacando los papeles que contenía, tenía una nota y la leyó.

—Son los papeles del divorcio —Mingyu miró a Seungkwan—. Ya te puedes ir —Seungkwan asintió, dió una leve reverencia y se marchó.

Mingyu de inmediato dio una ojeada a las hojas, leyendo cada renglón y prestando atención. Era el documento que declaraba su separación con Jihoon, solo tenía que firmarlo y entregarlo para que Jihoon y él estuvieran separados. Las cosas no iban a ser fáciles en ese momento. Jihoon debía aceptar el arreglo estipulado de Mingyu: La casa, el auto, la mitad del dinero, todo lo conseguido durante su matrimonio, a excepción de objetos personales y de valor para Mingyu, serían entregados a Jihoon, tal y como el Alfa pidió.

Tomó una pluma y de inmediato firmó los papeles donde su nombre venía, y por último, los guardó en el sobre. Mingyu se levantó tomando sus pertenencias junto con el sobre y salió de su oficina acercándose a Seungkwan.

—Entrega el sobre cuando vengan por él —se lo entregó.

—Sí, presidente Kim.

Mingyu salió de prisa de la empresa, tomando el ascensor y llegando hasta el primer piso. Necesitaba buscar a Wonwoo, decirle que por fin sería libre y estarían juntos muy pronto. Debía celebrarlo con él, por ello, le prepararía una sorpresa que marcará el inicio de su vida juntos.

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Jihoon se tuvo que levantar de mala gana de su cama al escuchar el timbre tan insistente de la casa. Se colocó un suéter para cubrirse del frío y salió de su habitación para ir directo a recibir la persona que le arruinaba su momento depresivo. Desde que Mingyu decidió marcar su fin de su matrimonio, tuvo que dedicarse a buscar una forma de que lo perdonara. No hubo nada que funcionará, todo era definitivo, Mingyu se separaría de él pero Jihoon no le dejaría las cosas tan fáciles.

Abrió la puerta reconociendo de inmediato al Alfa que estaba frente a él. Tenía un sobre en sus manos y vestía un traje sumamente caro. También tenía un portafolio y Jihoon de inmediato supo que su mayor temor se estaba haciendo presente.

—No firmaré nada —dijo Jihoon. Entró a su casa, dejando pasar al Alfa. Quería escuchar todo lo que tenía que decir a pesar de que ya lo sabía—. Así que puede decirle a Mingyu que lo olvide, no le daré el divorcio si planea meterse con la zorra de Wonwoo —dijo de manera agresiva y cruzándose de brazos—. Él es mío.