TU DESTINO |MINSUNG|

XVIII

Felix había obligado a Changbin a ir por un helado para dejar a Jisung solo con su hermano mayor.
Minho agradeció la idea de su hermano, pues no se sentía cómodo estando con Changbin y Jisung en el mismo techo teniendo en cuenta la conversación que el peli negro había escuchado.

— No le caigo nada bien a tu amigo — Jisung tomó asintiendo en el sofá donde segundos después Minho lo acompañó.

— No digas eso. Él es así. Un poco antipático.

Jisung asintió con desdén y se lamió los labios nervioso.

No tenía idea de que decir, de cómo empezar. Ni siquiera sabía muy bien porque había tomado la decisión de venir.

— Minho, yo... no tengo mucho tiempo pero... realmente necesitaba hablar contigo.

El castaño asintió poniendo total atención en el menor, tenía el presentimiento de que sería una conversación muy importante.

Jisung se acomodó en el sofá y tomó las manos del mayor en las suyas, este acto sorprendió a Minho quien miró al chico al frente anticipando lo que saldría de sus labios.

Pidió que no fuera algo malo.

— Primero, quiero disculparme por lo qué pasó ayer en la universidad. Hyunjin me contó, el guardia no tenía ningún derecho de tratarte así. Realmente lo siento.

— No es tu culpa Jisunie. No debes disculparte.

— Lo es, si tan solo yo hubiese sido más discreto y mi madre no se hubiera enterado de ti.

Minho dejó su amable expresión y poco a poco se fue tornando seria. Se veía muy decepcionado.

— Discreto — murmuró Minho llevándose una confundida mirada del menor a quien sin ser muy consciente le había soltado las manos — Jisung, yo no quiero ocasionar problemas en tu vida.

— No lo haces.

Minho sonrió con desgana, se sentía algo frustrado, tal vez fuera por la conversación con Changbin, tal vez por haber sido echado de la lujosa universidad o solo por ver a Jisung.

— Vas a casarte ¿verdad?

La pregunta resonó los tímpanos de Jisung, el miedo se había apoderado de su cuerpo. No quería responder esa pregunta.

Si, había ido con la intención de hablar de eso, pero no estaba listo para ver la reacción de Minho, no cuando sus ojos estaban viéndolo de esa forma. Con esa tristeza.

— Respóndeme por favor.

— Yo... no quiero hacerlo. No quiero casarme Minho.

Minho perdió fuerzas en su cuerpo, escucharlo le hizo sentir un dolor inmenso en el corazón.

— Pero lo harás. Porque es lo que quieren tus padres. Tu harías lo que fuera por ellos, lo se. Así como planeas dirigir la empresa sin querer hacerlo, así como planeas seguir con esas clases que tanto odias. Tu también te casarás, solo por complacerlos.

— No lo hagas, no me digas esas cosas.

Minho bajó la mirada y se lamió los labios asintiendo lentamente, se puso de pie y dio unos pasos alejándose del sofá, no quería ser duro con Jisung, no quería hacerlo sentir mal, pero le estaba costando mucho controlarse y pedirle que no se casara, pero él no tenía derecho.

Así como tampoco tenia el derecho de sentirse tan dolido. Después de todo ellos eran solo amigos.

Y como iban las cosa, jamás serían algo más.