TU DESTINO |MINSUNG|

XXII

Las manos temblorosas de Jisung sostenian el vaso de agua qué Felix le había brindado.
Ahora tres pares de ojos lo observaban esperando escuchar una explicación.

— Escapé de casa.

Soltó.

El primer sorprendido fue Minho quien estaba sentado junto a él en el sofá.
Su mano agarro la del pelinegro y la acarició lentamente.

— te golpeó ¿verdad? — Jisung asintió

Minho tensó las manos y apretó un poco la mano que aun sostenía, Jisung lo miró.

— Debo salir de la ciudad. El me enviara a Malacia y yo... No quiero irme —el pelinegro empezó a iperventilar — Pero no conozco a nadie, no se a donde ir. No tengo idea de que haré — Minho lo atrajo a su pecho y lo apriciono en un abrazo

Los ojos de Jisung empezaron a dejar salir aquellas lagrimas qué había acomulado empapando el hombro del castaño.

— No debes preocuparte Jisung. No estas solo.

Las manos de Jisung viajaron a la espalda de Minho y se aferraron a él dejando salir todos sus sentimientos en forma de llanto.

Felix y changbin veían a los chicos abrazados en el sofá y decidieron retirarse para darles algo de privacidad.
Luego de unos minutos se separaron. Minho llevo una mano a la mejilla de Jisung y la acarició.

— Puedes quedarte conmigo Ji. Yo te cuidare.

-— No te arriegare nuevamente Min, mira como te dejaron. —  Jisung acarició con su pulgar la comisura de Minho —  Lo lamento tanto.

Su rostro estaba lleno de morados, su nariz aun estaba lastimada y su labio estaba roto. Jisung quiso llorar.
Minho negó lentamente.

— No fue tu culpa.

— Si lo fue, si no hubiese venido...

— No digas eso. No fue tu culpa.

Jisung clavo su mirada en los ojos del castaño.

— No quiero alejarme de ti Minho.

— No lo hagas — Minho sonrió levemente.

— Pero si me quedo en Seúl mi padre vendra por mi.

— Entonces me iré contigo. Vamonos juntos de Seúl.

Jisung quedo en silencio, sorprendido.
Sus ojos se abrieron levemente

— ... ¿Qué?

— Me iré contigo — repitió el mayor con confianza.

— No Minho, tu vida esta aquí. Tu familia, tu trabajo, la academia...

— Pero tu no, y no creo que pueda estar tranquilo si no se como estas o donde estas. No podré vivir tranquilo si tu no estas en mi vida Jisung.

El corazón de Jisung se detuvo por unos segundos, no sabía que decir, estaba aún procesando lo que había escuchado.

Minho acerco su rostro y posó sus labios en los del castaño con delicadeza, jisung correspondio casi al instante al tierno beso poniendo las manos en las mejillas del mayor, Minho deslizó su mano derecha en la definida cintura de Jisung, luego de unos segundos se separaron justando sus frentes.

— Podemos ir a Gimpo — susurro Minho.

—¿Estas seguro de esto? — pregunto Jisung inseguro — No quiero que te arrepientas Min, no soportaría ser yo quien arruine tu vida.

— Jisung parece que no lo entiendes. Tu llegaste a arreglar mi vida, a darle color y sentido a mi existencia.

— Exageras — Jisung sonríe timido con las mejillas sonrojadas.