TU DESTINO |MINSUNG|

II

— ¡Aqui está! — gritó Changbin emocionado al ver el billete

Lee dejó la botella de agua en el suelo y le quitó el billete a su amigo.

— Maldición, te juro que me fije en las personas que dejaban los billetes pero nadie había dejado uno de cincuenta.

— Bueno, en realidad no importa quien sea, nos ama, ama nuestro show o tal vez me ama a mi — Changbin bromeo y se dispuso a empacar las cosas.

Lee Minho no dejaba de ver el billete. Desde hacía unas semanas alguien estaba dejando un billete de 50.000 wons y él tenía mucha curiosidad por saber quien era.

— ¿Vas a ayudar o hablarás con Shin Saimdang por una hora más? — bromeo Changbin refiriéndose a la mujer que aparecía en el billete

Minho guardó el billete y se apresuró a Changbin ayudándolo a guardar todo el equipo de sonido que usaban para sus presentaciones.

Luego de guardar todo caminaron a casa de Minho, en el camino hablaron de cosas triviales y de nuevas canciones que Changbin había empezado a escribir.
Era un gran compositor, y eso Minho no lo iba a negar. Pero todo ese talento se desperdiciaba al no tener quienes escucharán sus canciones.

Changbin trataba de no pensar en eso.

Al llegar a casa de los Lee fue el hermano menor de Minho quien abrió, Lee felix, un chico de cabello rubio con algo de pecas en la cara que lo hacía lucir terriblemente inocente.

— Hyun, estas en casa ¿me trajiste algo? — Minho revolvió el cabello de su hermano menor y entró con las maletas, atrás de él Changbin también entró.

— Claro que le trajimos algo al pequeño Felix – Changbin le entregó una bolsa — Es Bungo ppang

El menor sonrió enorme y sacó un pastel con forma de pescado de la bolsa que le había entregado su mayor y se lo metió a la boca.

— Gracias Bin-hyun, eres el mejor, eres mi Hyun favorito.

El mencionado sonrió y levantó una ceja mirando a su amigo al lado.

— ¿Lo vez? Tu hermano me quiere más a mi — Minho rodó los ojos y acomodó las grandes maletas en la sala para luego sentarse en el piso, a los pies del sofá.

— ¿Donde está mamá?

— No ha llegado, llamó y dijo que llegaría tarde, al parecer la persona que hace el turno de la noche en el hotel aún no llega.

— Oh, llegara tarde entonces. Deberíamos tenerle algo de comida, para que tenga algo que comer cuando llegue — Minho se puso de pie y miró a su amigo — ¿me ayudarás?

— ¿Yo? ¿Cocinar? ¿Quieres matar a tu familia intoxicada acaso?

Minho rodó sus ojos por segunda vez en la noche.

— Si, lo entiendo lo haré solo.

— Yo te ayudaré hyun

Pronto los hermanos Lee prepararon la comida y en cuestión de una hora la cena ya estaba servida sobre la mesa y los tres chicos sentados al rededor.

Changbin bromeaba con Minho mientras felix estallaba de risa con las ocurrencias de su hermano y de su amigo. La puerta principal se abrió dejando entrar a una señora de cabello castaño atado con una coleta y rostro cansado, apenas vio a los chicos hizo un movimiento de cabeza.

— Hola mamá, ¿cómo te fue? — el primero en saludar fue felix, con su característica sonrisa.

— Bien, me voy a dormir.