"In the twilight of enigmas, the human mind becomes both the player and the board of a deadly game."
La mansión, una obra arquitectónica de grandeza imponente, se alzaba ante mí como un coloso silente. Sus torres y almenas se recortaban contra el cielo nocturno, como guardianes de los secretos que habitaban en su interior. Cada detalle de su diseño parecía minuciosamente pensado, desde los intrincados adornos en las molduras hasta las gárgolas que adornaban los balcones. Los ventanales, oscurecidos por las sombras de la noche, parecían ojos cerrados que vigilaban con cautela cualquier intrusión en su dominio.
La noche en Nueva York había caído con su manto oscuro, y esa misma oscuridad parecía abrazar la mansión, envolviéndola en una atmósfera de misterio y expectación. La fachada de piedra se volvía aún más impenetrable bajo la luz de la luna, y la mansión adquiría un aire enigmático que parecía susurrar historias no contadas.
Caminar hacia la entrada principal era como adentrarse en un reino prohibido. El camino que llevaba al portón estaba flanqueado por setos cuidadosamente recortados, que se alzaban como guardianes silenciosos. El portón de hierro forjado, decorado con intrincados diseños, comenzó a abrirse lentamente, como si cediera ante la fuerza magnética del misterio que yacía detrás de él. Cada chirrido del portón parecía una nota que resonaba en la quietud de la noche, una nota que aumentaba mi anticipación y mis latidos cardíacos.
Mis pasos, lentos y deliberados, resonaban en el suelo de piedra mientras avanzaba por el camino empedrado hacia la entrada. Cada paso era como un eco de mi propia determinación en contraposición al silencio opresivo que parecía envolverlo todo. Cada rayo de luna que se filtraba a través de las ramas de los árboles aportaba un toque de misterio al entorno, como si la naturaleza misma estuviera conspirando con la mansión para mantener sus secretos a salvo.
Al final del camino, me encontré frente a la entrada principal, una puerta de madera oscura adornada con detalles intrincados. El picaporte frío y sólido bajo mis dedos era como un primer apretón de manos con lo desconocido.
Al girar la manija, el interior de la mansión se abrió ante mí como un mundo de contrastes, donde el lujo coqueteaba con las sombras. Los pasillos, adornados con tapices y pinturas que parecían contar historias antiguas, me envolvían en un ambiente de nostalgia y enigma. Cada paso que daba resonaba suavemente en el aire, absorbido por la suave alfombra que cubría el suelo y que parecía recibirme con un suave abrazo silencioso.
La luz de candelabros colgantes iluminaba los pasillos, proyectando destellos dorados sobre las paredes oscurecidas por el tiempo. El fulgor intermitente de las llamas parecía jugar con las sombras, creando un baile etéreo que me recordaba a los cuentos de hadas y misterios antiguos. Los detalles arquitectónicos, cuidadosamente tallados en la madera y la piedra, conferían a cada rincón una sensación de importancia y elegancia intemporal.
Mis pasos, cuidados y deliberados, seguían las indicaciones que me habían proporcionado, guiándome a través de los pasillos como hilos en el laberinto de una intriga. Cada rincón que exploraba parecía llevarme más profundamente en la historia de esta mansión, en sus secretos y en sus misterios.
Finalmente, entré en la sala donde tendría lugar la reunión. Mi mirada escudriñó cada uno de los rostros presentes, registrando sus características y expresiones. Los miembros de la organización, reunidos en torno a una gran mesa de madera oscura, llevaban en su piel tatuajes que parecían un símbolo de su lealtad. Una corona y una calavera entrelazadas, un emblema que resonaba en mi memoria de una manera que no podía identificar con certeza. Por un instante, un destello fugaz de reconocimiento pasó por mi mente, pero desapareció antes de que pudiera agarrarlo.

ESTÁS LEYENDO
FLEMING
Mystery / ThrillerUna mente retorcida y sin remordimientos, sumergida en un mundo turbio y desconcertante, donde los límites morales se desvanecen y la oscuridad se adueña de todo, deleitándose en el caos y la manipulación. Ella no busca redimirse, por el contrario...