Perdón por no ser Julieta | Serie Cayetano #2

39. CATA (FINAL)

all my daughters- dodie / Moriría por vos- Amaral

—Romeo y Julieta es la mierda más machista que se ha escrito jamás —masculla Mencía con la boca llena del bocadillo de jamón que se está comiendo, ya toda caracterizada como Paris.

—Mueren el uno por el otro, es bonito, aunque sea de una manera retorcida —replica su hermana, vestida de nodriza para la primera escena.

—¡Mueren porque son imbéciles! —dice Mencía.

—Pues fuiste tú quien propusiste la obra... Es tarde para cambiarla —comento yo.

El traje de Romeo se ajusta a mi cuerpo casi como una segunda piel: los pantalones ceñidos, las medias y las mangas abullonadas de mi camiseta contrastan con mi maquillaje. Aún no me he puesto la peluca, pero me he recogido la melena en un moño hasta arriba de laca, como los que me hacía mi madre para las competiciones de gimnasia rítmica cuando yo tenía cinco años y ella aún tenía tiempo para llevarme a extraescolares.

—Claro, si la obra en sí es la pera, pero romantiza una relación súper posesiva. ¡Y Julieta tiene catorce años, por dios! —añade Mencía.

Esta noche estrenamos la obra en el salón de actos del instituto. Hemos pasado el día entero haciendo pruebas de sonido y ultimando cuestiones del decorado. La verdad, lo he disfrutado como nunca. Me encanta el ajetreo que precede la salida al escenario, los nervios, las risas, la tensión. Y me encanta que, aun así, mis amigas y yo hayamos encontrado un momento para convertir una clase en un camerino y comer algo antes de salir. Bueno, la que come algo es Mencía, porque la verdad es que yo no tengo estómago para nada.

—Romeo y Julieta es machista y es dramático, pero no creo que sea tan raro el concepto de morir por amor, ¿no? Aunque no esté bien —murmura Jimena, picoteando una ensalada.

El estómago se me encoge un poco. Brianda le dedica una mirada confusa a Jimena y juraría que la está regañando por lo que acaba de decir y más aún por decirlo minutos antes de salir al escenario. Supongo que, para ella, hablar del amor, es hablar indirectamente de León, esa persona que nos hemos asegurado de no mencionar en los últimos meses.

—Puede ser... Desde luego en las películas es así. Todos aman hasta la muerte —dice Mencía.

—Yo no quiero ser dramática, ¡pero moriría por vos... como dice Amaral! —exclama Jimena—. ¡Por vosotras tres mataría y me dejaría matar! Igual es exagerado, pero lo siento así.

—¡Pues es lo más bonito que me han dicho jamás! —Brianda se acerca para darle un abrazo que hace que las dos se derrumben en el suelo.

—Yo creo que está bastante feo. No pienso ser responsable de tu muerte, capulla —le digo a Jimena.

— ¿Acaso no me quieres? —mi amiga se señala con el dedo y finge ofensa.

—Te quiero muchísimo, pero estoy intentando quererme un poco más a mí.

Mi Julieta sonríe y se acerca, para darme un abrazo y apoyar la cabeza en mi hombro. Después, abre la boca para decir algo, pero se calla cuando llaman a nuestra puerta y aparece Balma, toda caracterizada como paje:

—¡Os estamos esperando! Venga, que salimos en una hora y tenemos que acabar de maquillarnos.

La hora siguiente pasa en un suspiro. Me coloco bien la peluca, me hago mil millones de fotos, grabo mil millones de tiktoks, ayudo a compañeras a maquillarse, grito y lloro un poco cuando la profesora da un discurso sobre lo mucho que hemos crecido todas a lo largo de este curso. Y sí. Yo creo que un poco sí que hemos crecido y que, desde luego, la Cata del septiembre pasado no reconocería a esta.