❝El Stripper❞ ➳『•MinSung•』

16

Los labios de MinHo jamás se despegaron de los suyos cuando comenzó a caminar, obligándolo a retroceder y caer en el sillón en donde segundos atrás estaba sentado él.

JiSung se colocó encima de él y rompió el beso gimiendo cuando las manos de Lee se deslizaron hasta su trasero y lo apretó, acercándolo más provocando que sus miembros se rozaran por encima de la ropa.

Y joder, cuánto lo excitaba teniéndolo encima de él, con sus miembros rozándose.

—Oh, mierda —gruñó MinHo—. Si así de duro me pones con un simple beso, no quiero imaginar como será cuando te folle.

Y lo volvió a besar.

Las manos de JiSung bajaron hasta su pecho y escuchó a MinHo gemir cuando lo acarició, ciñiendo cada uno de sus músculos. Era muy fuerte, y mientras lo besaba, se preguntó con que fuerza se pondría mover si lo tuviera dentro de él.

Las manos de MinHo subieron lentamente desde su cadera hasta su cintura, enmarcando cada una de sus curvas. Sintió a JiSung estremecerse a medida que subía y eso le gustó.

—¿Te gusta que te toque, bebé? —preguntó con la voz áspera.

JiSung gimió como respuesta cuando sus manos se posaron sobre sus pezones. Los acarició sobre la tela de su camisa, endureciéndose. El peliazul echó la cabeza hacia atrás, disfrutando de su tacto y de pronto la duda surgió en su interior.

¿Estaba haciendo lo correcto al someterse a esto? ¿Sería capaz él de serle infiel a HyunJin?

Sólo entonces cuando la mano de MinHo se deslizó debajo de su camisa fue capaz de reaccionar y apoyó sus dos manos en los hombros de él, alejándolo.

—Joder, MinHo, se supone que era sólo un pequeño beso.

–—No es mi culpa que me coloques así. Vamos, sé que lo quieres igual que yo.

—No puedo hacerlo, lo siento — dijo e intentó levantarse, pero MinHo se lo impidió agarrándolo firmemente de la cadera.

—¿Por qué no?

—Estoy casado.

De pronto, la expresión de MinHo cambió, asustandolo.

JiSung se levantó, pero rápidamente se vio atrapado por los brazos de éste que lo mantenían acorralado entre la pared de la habitación y el cuerpo de él. Tragando saliva, alzó la vista y se encontró con los ojos de MinHo que lo miraban con una ira que lo congeló.

—Estoy harto de escuchar esa estúpida excusa —dijo con los dientes apretado—. Entiéndelo, tu maldito esposo no te ama. Si te hubiese amado realmente jamás debió haberte sido infiel.

JiSung se enojó al escuchar sus frías palabras. Tragó saliva en un intento fallido por desatar el nudo que se le había formado.

—Eso no es cierto —musitó JiSung—. HyunJin me ama.

—¡Eso no es cierto!—golpeó con el puño la pared, justo en el costado de la cabeza de JiSung. Éste se sobresaltó—. Respóndeme, ¿él te ha vuelto a llamar?

JiSung negó con la cabeza, incapaz de articular alguna palabra.

—Ves, si realmente le importaras él ya debería de estar aquí contigo, y no en su jodido viaje de negocios. Él no te ama, JiSung.

Al menor se le humedecieron los ojos. Apretó los labios, en un intento por no echarse a llorar pero antes que de que pudiera pensar con claridad, se encontraba a sí mismo lanzándose a los brazos de MinHo y llorando sobre su hombro. El mayor le frotó la espalda, y depositó un suave beso sobre su cabeza, aún sin soltarlo.

—Tienes razón, MinHo — sollozó JiSung—, soy un estúpido. Es la verdad, él no me ama. ¿Por qué me pasa esto a mi? ¿Tan mal esposo soy?

—No digas eso, tú... tú eres perfecto. No tienes la culpa de nada, es tu esposo quien es el idiota. Sólo estás muy enamorado de él.

JiSung se separó un poco de él, lo suficiente como para mirarlo a los ojos. Tenía los ojos inundados de lágrimas y a MinHo se le encogió el corazón.

—Por favor, haz que lo olvide. Ayúdame a olvidarlo — pidió JiSung.

Y eso era justo lo que MinHo quería oír. Una sonrisa se formó en sus labios.

—Sunnie, haré que lo olvides y mucho más que eso—le agarró el mentón y lo acercó a sus labios—. Haré que lo disfrutes tanto como yo.

Y lo volvió a besar con la misma desesperación de siempre.

¿QUÉ QUIERE EL PUEBLO? 🥵