20

4.4K 587 96
                                    

JiSung llegó a casa con una sonrisa en su rostro. No podía dejar de pensar en MinHo y lo maravilloso que había sido verlo hoy. Sabía que esa pequeña felicidad que sentía en ese momento desaparecería en cuanto HyunJin, su esposo, regresara de sus molestos viajes de negocios.

Negó con la cabeza para apartar esos pensamientos de su mente y se dirigió a su estudio de pintura para dejar sus cuadros. Sin embargo, escuchó un fuerte ruido proveniente de la cocina. Lo primero que pensó fue que era un ladrón. Agarró lo primero que encontró y corrió hacia la cocina, solo para darse cuenta de que la luz estaba encendida.

—¿Hay alguien ahí?—fue lo primero que se le ocurrió preguntar.

JiSung contuvo la respiración cuando la manilla de la puerta giró y se abrió. Suspiró aliviado. Era HyunJin, sosteniendo una taza de café y vistiendo un traje sin corbata, con una camiseta blanca y los primeros botones desabrochados.

—¿HyunJin?—preguntó incrédulo, soltando la escoba que había agarrado minutos antes.

—Hola—sonrió HyunJin, dejando la taza de café en la encimera.

—¿Qué estás haciendo aquí? — preguntó confundido.

—Pues, aquí es donde vivo —respondió intentando bromear, pero la expresión fruncida de JiSung indicaba que no estaba de humor—. Te dije que volvería a casa esta semana.

—Pero hoy es martes — murmuró para sí mismo.

—Llegué hace una hora, ¿dónde estabas? — cuestionó bajando la mirada y frunciendo el ceño al ver la caja de cuadros detrás de JiSung—. ¿Son tus pinturas?

—Son los cuadros que pinté para la exposición del concurso en el que participé—dijo restándole importancia, tomando la caja de nuevo en sus manos.

—¿Concurso?—preguntó confundido.

—Sí, te lo mencioné antes de que te fueras, HyunJin.

En ese momento, el celular de JiSung comenzó a sonar en el bolsillo de su pantalón. Con una mano, logró sacarlo y ver quién lo estaba llamando. En la pantalla del celular se leía "MinHo". Dudó en contestar, pero finalmente decidió llamarlo más tarde y simplemente rechazó la llamada.

—¿No vas a contestar? — preguntó HyunJin.

—No.

El menor se dio la vuelta y continuó su camino hacia su estudio de pintura. HyunJin lo siguió detrás.

—¿No me has extrañado, Sunnie?

Lo pensó. Recordó todo lo que había pasado con MinHo en las últimas semanas y se preguntó si realmente lo había extrañado.

—Si te soy sincero, esperaba que llegaras en unos cuantos días más, HyunJin—dijo mientras colocaba sus pinturas sobre la mesa.

—¿Estás enojado conmigo?

JiSung soltó una risa irónica y se volteó para caminar hacia su habitación. HyunJin lo siguió una vez más.

—¿Tú qué crees?—respondió cruzando los brazos.

—Déjame explicarte.

El celular de JiSung volvió a sonar y supo que era MinHo quien lo estaba llamando de nuevo. Tenía muchas ganas de tomar su celular y hablar con él, sin importarle que HyunJin lo escuchara, pero decidió ignorarlo y dejar que siguiera sonando.

—Estoy muy estresado y cansado, HyunJin—suspiró—. Mañana hablamos.

El mayor apretó los labios y abrió la boca para decir algo, pero en lugar de eso, suspiró.

—Está bien.

JiSung se encerró en el baño y aprovechó para enviarle un mensaje a MinHo. Se cambió de ropa, se cepilló los dientes y, suspirando, salió del baño, ignorando a HyunJin. Se acostó en la cama y se cubrió con las sábanas. Pocos segundos después, apagó las luces y JiSung sintió cómo él se acostaba a su lado, colocando su brazo alrededor de su cintura y acercándolo más a él.

—Te amo, Sunnie — susurró HyunJin en su oído.

JiSung apretó las sábanas, tratando de controlar el creciente sentimiento de enojo que había dentro de él. No dijo nada. Cerró los ojos y deseó poder quedarse dormido rápidamente.

❝El Stripper❞  ➳『•MinSung•』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora