Capítulo 19

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  Los días parecían pasar en ráfaga y los shows parecían estar más cerca. La canción de Jungkook saldría en un par de horas, Junto a un vídeo musical que solo reproducía la letra, ya que el verdadero video sería una colección mixta de todas las presentaciones en vivo y saldría al finalizar el pequeño tour que haría por los estados unidos y algunos otros pocos países.

  Yo, por mi parte me preparaba mentalmente para viajar nuevamente con él y luchaba contra mis instintos para evitar caer de nuevo.

Él respetó mi petición y se mantuvo al margen.

  Y lo sé. Yo lo pedí así, pero en el fondo pensaba si realmente a él le había dado igual.

  Todo el equipo se juntó para ver el estreno del vídeo lyrics y esperar el anuncio de la gira.

  Esa noche habría una fiesta de celebración en uno de los clubes más costosos de los angeles. Saldrían varios autos con los invitados y nos llevarían al lugar.

  ¿Por qué yo estaba tan nervioso?

  ¿Tal vez porque la última vez que estuve en una fiesta con Jungkook terminamos en la cama?

  Los tabloides estaban como hormigas por afuera del club esperando poder fotografíar a los famosos que asistirían al evento.

— Apresúrate a bajar. Jeon sale de la camioneta del frente — me dijeron, y eso hice.

  Primero salí yo del auto y Jungkook se bajó seguido. Caminé hasta su lado y entramos a la fiesta.

  No cruzamos palabras, solo nos sonreímos de forma incomoda aparentando "cordialidad"

  Todo el mundo se acercaba a felicitarlo por tan buena canción y aseguraban que sería un éxito arrasador.

  Un mesonero se acercó con una bandeja de copas y negué sintiendo un déjà vu.

  Tomé asiento en uno de los sillones blancos que habían en una zona "vip" y solo disocié en silencio esperando el momento para irme.

  Cuando mi trance terminó, busqué con la mirada al evento principal y lo ví hablar con un chico.

  Jungkook parecía prestarle atención a lo que este le estaba contando y el contrario tocaba cada dos palabras su brazo.

Tragué saliva sintiéndome incómodo y traté de desviar la mirada pero soy terriblemente necio, por eso volvía a mirar.

  El muchacho con el que hablaba era muy atractivo y se veía fino... Delicado y sobre todo: interesado en él.

Vamos, Jimin. No seas idiota. Tú decidiste cortar todo contacto fuera de lo laboral con Jungkook... Tienes que soportar.

  El mesero pasó frente a mis ojos y le arrebaté una copa, la cual bebí como agua y le quité otra — Tenía sed — le dije al ver cómo me miraba.

  Me levanté y busqué un baño.

  Cuando lo divisé, entré y por suerte estaba solo.

Mojé mis manos y las pasé por mi cabello, exhalé y me miré al espejo por varios segundos hasta que la puerta al lado de mí se abrió y entró el rey de Roma.

— Jimin, que gusto encontrarte aquí, ¿te diviertes? — preguntó posicionándose a mi diestra y abriendo el grifo para lavarse las manos.

— Sinceramente me aburren las fiestas — respondí más cortante de lo que debía.

— ¿Y qué opinas de mi canción?

— Meh...

— Define "meh".

— Hay mejores — mentí y él se rió de forma tan... Jodidamente erótica.

— Lo sé... Gracias — mojó su largo cabello y lo despeinó un poco — espero la sigas pasando bien.

— Sí, claro... Tan bien como la estás pasando tú — dije tan infantil e irónico.

— ¿Se nota mucho? — habló burlesco moviendo la joya de su labio con la lengua.

  Tragué saliva y desvíe la mirada para luego salir del baño pasando por su lado.

  Cerré los ojos al cruzar esa puerta y me sentí un total imbécil.

  Mi amigo más íntimo el mesero, estaba cerca, así que le robé dos copas más. Sabía que no debía beber, sabía que me caía fatal; sin embargo estaba tan...

  Jungkook no salió del baño pero adivinen quién entró cuando yo salí.

  El chico miró a ambos lados antes de entrar y toda mi sangre hirvió de celos.

  Es decir; no conozco a Jungkook perfectamente pero sabía lo que iba a pasar ahí dentro y quería llorar de frustración.

— ¿Todo bien? — Uno de los compañeros de grupo de Jeon, se acercó a mí.

— Todo bien — fingí una sonrisa y él hizo una línea con sus labios.

— No quiero hablar de más pero... Puedo imaginar lo que te está pasando.

— ¿Qué quieres decir?

— El último manager de Jungkook renunció, ¿sabes por qué?

— Supongo que no soportó a ese hijo de...

— Se enamoró de él...

  Abrí los ojos a más no poder, sintiendo una taquicardia en mi corazón — ¿De verdad?

  Él suspiró — Lo que tengo entendido es que él se enamoró de Jungkook pero Jungkook es un alma libre y no quiere a nadie. Llegó un punto en él que todo lo que Jungkook hacía a Derek le afectaba y vivía llorando en los rincones. No tuvo de otra que renunciar.

  Maldición...

— ¿P-por qué me cuentas esto?

— He visto como lo miras...

  Oficialmente me sentía peor que antes.

— No pasa nada entre nosotros — hice como si no me importara y miré de nuevo al baño. Ellos no habían salido.

  El hombre a mi lado miró mi pie, el cual no dejaba de moverse contra el suelo y sonrió lastimero — Lo siento.

  Asentí y lo ví alejarse.

  Volví a mirar al baño y en ese instante Jungkook salía acomodando su chaqueta de cuero.

  El aire que brotaba por mi nariz parecía fuego y segundos después salió ese chico.

  Me acerqué furioso y tomé a Jungkook por el brazo antes de que se uniera a los demás invitados — ¿Sabes la cantidad de prensa que hay esta noche aquí?

— Lo sé, ¿por qué? — miró mi pequeña mano sobre él.

— ¿De verdad estabas follándote a ese en el baño sin importar si hay cámaras o si alguien los veía?

— ¿Quién te dijo que follabamos?

— ¡Te conozco! — le grité en un susurro — ¿O es que acaso le estabas cantado tu maldita canción en privado?

  Soltó una carcajada y se safó de mi agarre — Creo que has tomado mucho, Park. Estás viendo cosas donde no las hay — se burló.

— Soy tu jodido manager después de todo, así que no me intentes ver la cara de idiota. Puedo hacerlo sacar de esta fiesta y ponerle orden de alejamiento a más de cien metros.

  Me miró divertido con una ceja elevada y se cruzó de brazos — ¿Estás celoso?

— ¿Q-qué?, ¿de ese?

— Ese tiene nombre, se llama Sunoo.

— Y a mí qué mierda me importa como se llame. Más vale que te comportes. Estás en la celebración de tu debut y no lo puedes cagar por culpa de tus hormonas.

  Se carcajeó antes de mirar a los lados y lamer su labio. Abrió la boca para decir algo pero al parecer se contuvo y cambió de opinión.

— No bebas más.

  Ordenó y se fue a seguir celebrando.

  Dejándome cabreado en esa esquina.

You Rock My World - KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora